El presidente de Colombia, Gustavo Petro, ha condenado enérgicamente los ataques aéreos perpetrados por Estados Unidos contra embarcaciones en el mar Caribe, los cuales se realizan bajo el pretexto de la lucha contra el narcotráfico. El mandatario calificó estos bombardeos como "ejecuciones extrajudiciales" y subrayó que la cifra de personas fallecidas a causa de estos misiles se acerca a las 70.
En una entrevista concedida a Al Jazeera este domingo, Petro afirmó que: "Algo que nos está pasando ahora en el Caribe colombiano es que se repiten los misiles contra navíos; ya van cerca de 70 asesinatos, porque cuando se utiliza un misil contra una lancha y personas desarmadas, lo que se comete es una ejecución extrajudicial, como lo dijo la ONU".
El mandatario colombiano lamentó el silencio regional ante la situación: "Hay un silencio en Latinoamérica, una debilidad, y esas faltas de unidad en medio de la diversidad están dándole poder a la tiranía", sentenció.
Estos ataques se enmarcan en un despliegue militar que Estados Unidos mantiene en el mar Caribe desde hace once semanas. El Pentágono, que ha difundido imágenes de los ataques, justifica las acciones como parte de su misión antidrogas, aunque no ha presentado pruebas públicas de que las pequeñas embarcaciones bombardeadas transportaran narcóticos.
La condena de Petro se alinea con la postura de otros líderes regionales y organismos internacionales. El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha calificado las agresiones de EE. UU. como un pretexto para justificar una guerra y apropiarse de la "inmensa riqueza petrolera" del país.
Asimismo, expertos de Naciones Unidas y gobiernos como México y Brasil también han criticado los bombardeos, señalando que constituyen "ejecuciones sumarias" contrarias al derecho internacional. Incluso Rusia, a través de su portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, María Zajárova, condenó "enérgicamente el uso excesivo de la fuerza militar en misiones contra los narcóticos".