De la derrota del Sabotaje Petrolero a Sucumbir en el Desconocimiento

¿Colapso o destrucción de PDVSA? (1)

Con la muerte del Comandante Chávez y la llegada de Nicolás Maduro a la presidencia de la República Bolivariana de Venezuela en abril de 2013, la Política de Plena Soberanía Petrolera comenzó a ser mermada de manera soslayada.

Durante el periodo 2001-2014 el Estado Venezolano pudo disponer por concepto de Renta Petrolera de más de 500 Mil Millones de dólares, como consecuencia de las reformas fiscales y otras medidas incluidas en la Política de Plena Soberanía Petrolera. De ellos más de 360 Mil Millones hubiesen tenido como destino las cuentas bancarias de las Trasnacionales socias de PDVSA de no haberse aplicado dichas medidas, en lugar de haberse direccionado, como en efecto se hizo, para el desarrollo social de nuestro pueblo a través de las Misiones Educativas, la Gran Misión Vivienda Venezuela y el resto de las misiones y políticas diseñadas por la Revolución Bolivariana a las que PDVSA proporcionó en ese periodo más de 216 Mil Millones de dólares.

Sin embargo, Maduro desde un principio tuvo como objetivo tomar el control de PDVSA y en Agosto de 2014, Rafael Ramírez es sustituido de la presidencia de PDVSA por Eulogio Del Pino, un técnico patriota de mucha experiencia petrolera, que como Vicepresidente (VP) de Exploración y Producción y Presidente de la Corporación Venezolana de Petróleo (CVP), acompañó aquellos años al Comandante Chávez y a Rafael Ramírez en la batalla por la Soberanía Petrolera. Junto a Del Pino, el presidente Maduro nombra una nueva Junta Directiva conformada en su mayoría por técnicos petroleros conocedores del negocio. Sin embargo, hubo una excepción: Carlos Erick Malpica, sobrino de Cilia Flores, quien fue nombrado como VP de Finanzas, ocupando para la fecha también el cargo de Tesorero de la Nación. Las finanzas de la empresa, dirigidas desde Miraflores, habían sido sentenciadas a naufragar en las oscuras aguas del nepotismo.

El lapso 2015-2017 estuvo marcado por las consecuencias del periodo más largo de precios bajos registrados en la industria petrolera mundial. La caída en los precios del petróleo ocasionó una disminución del 40% en las inversiones a nivel mundial en proyectos de exploración y producción, afectando el desempeño de las más importantes empresas de esta industria, incluyendo a PDVSA. Sin embargo no era la primera vez que la empresa y la Revolución enfrentaban un escenario de precios bajos en el 2008 los precios cayeron de 130 a 20 $/Bl y a pesar del impacto que ésta disminución generó en los niveles de producción, el país NO colapso.

Adicionalmente, en este periodo se cancelaron más de 32 mil millones de dólares en compromisos de deuda (antiguos financiamientos y prepagos). PDVSA para poder cumplir con estos compromisos financieros difirió pagos de deuda a proveedores y empresas de servicios ocasionando un impacto negativo en la eficiencia operacional de la empresa.

El mes de diciembre de 2016 fue particularmente importante en la historia contemporánea de la Industria Petrolera Nacional, puesto que: simultáneamente al acuerdo de ajuste de producción alcanzado el 10 de Diciembre de 2016 en Viena, después de casi un año de discusiones dentro de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), PDVSA realizaba ingentes esfuerzos por cumplir con sus compromisos financieros.

Luego de tan relevantes victorias internacionales, Maduro avanzó en su plan de controlar (¿o destruir?) a Petróleos de Venezuela con acciones directas, ya sin cuidar las formas. A partir de ese momento comienza la felonía al Legado del Comandante Chávez y a la Nueva PDVSA: una de sus obras más trabajada y elaborada.

En enero de 2017, Maduro nombra una nueva Junta Directiva, que ya no estaba conformada por técnicos Revolucionarios con experiencia en el sector energético, baluartes del rescate de PDVSA luego del Sabotaje Petrolero. Esta nueva Junta Directiva, estaba integrada por los amigos de los representantes de los factores de poder que hacen vida alrededor de Maduro, incluyendo a la entonces Canciller y actual Vicepresidenta de la Republica Delcy Rodríguez como VP de Asuntos Internacionales y al actual Ministro de Finanzas: Simón Zerpa como VP de Finanzas. A partir de entonces, las discusiones sobre las acciones que debería tomar PDVSA se dan entre abogados, licenciados en estudios internacionales y militares retirados, todos sin experiencia ni conocimiento de la industria petrolera, junto a algunos técnicos del área petrolera con muchísimas limitaciones, pero de posiciones muy acomodaticias.

Las sanciones norteamericanas contra funcionarios del Gobierno y contra las operaciones financieras de Petróleos de Venezuela S.A, desataron los demonios en el grupúsculo que ejerce el poder en Venezuela, comenzando un proceso de infamias y mentiras desmedidas contra aquellos que salvaron a PDVSA del sabotaje petrolero, los protagonistas de la implementación de la Política de Plena Soberanía Petrolera para rescatar el petróleo venezolano del control de los capitales transnacionales, quienes ahora son acusados por el propio Nicolás Maduro de conspiradores, corruptos, agentes del imperio y de dirigir un paro silencioso en contra de PDVSA.

Es muy sencillo llegar a dos conclusiones:

  1. Actualmente, no hay conocimiento petrolero en la Junta Directiva de Petróleos de Venezuela, porque así lo decidió Maduro, Iniciándose una oscura etapa de desprecio al conocimiento que bien puede extrapolarse a todo el país.

  1. Desde el inicio de su gobierno, Maduro ha contado con muy cercanos colaboradores, incluso familiares, dentro de la directiva de PDVSA, particularmente manejando las Finanzas de la empresa, así que es inconcebible que el Presidente no estuviese en conocimiento de lo que allí ocurrió desde su llegada al poder.

Si antes las grandes ideas se parían en Miraflores donde el Comandante Chávez, con su ingenio, su disciplina para el estudio y su acuciosidad, generó enormes y trascendentales proyectos que eran materializados en una empresa dirigida por conocedores del negocio petrolero y llevados a cabo por una masa trabajadora motivada, moralizada al extremo y defensores a ultranza de la Política de Plena Soberanía Petrolera; ahora desde Miraflores se maneja, no solo el desmontaje de la política petrolera chavista y revolucionaria, sino la disminución al mínimo posible de la empresa más importante del Estado venezolano, de la 5ta empresa petrolera del mundo.

Es importante destacar que, aunque el Comandante Chávez fue duramente criticado por la "elite tecnocrática petrolera" de utilizar a Petróleos de Venezuela como palanca para el desarrollo nacional, dándole una gran cantidad de responsabilidades más allá de las tradicionales de cualquier empresa petrolera, PDVSA seguía siendo reconocida en el mundo entero como la 5ta empresa petrolera del planeta. Pero ahora, dirigida por inexpertos y desconocedores del mundo petrolero, controlada desde Miraflores por un Presidente que no se ha preocupado nunca por estudiar y aprender de petróleo, comienza a ser percibida internacionalmente como un peligro para la estabilidad energética del mundo. ¡Esto es inaceptable!

Para entender el impacto de las decisiones tomadas desde Miraflores por Nicolás Maduro con respecto a Petróleos de Venezuela, analicemos el comportamiento de la producción de crudo venezolano en los últimos 15 meses. En primer lugar hay que señalar que el 1 de Enero del 2017 comenzó a implementarse el ajuste de producción establecido en el acuerdo de países productores de Diciembre de 2016, en el cual el nivel de producción requerido para la República Bolivariana de Venezuela fue de 1 millón 972 mil barriles por día. El grafico #1 muestra la producción de crudo venezolano reportada por la OPEP usando como referencia las fuentes secundarias (se decidió en consenso dentro de la OPEP, tomar como referencia las fuentes secundarias para evitar cualquier distorsión o manipulación que pueda hacerse en las comunicaciones directas de cada país) y su comparación con el valor del crudo Venezolano en los mercados internacionales

Se evidencia que durante los primeros 4 meses de 2017, PDVSA ajustó de manera progresiva sus niveles de producción, hasta alcanzar en abril la meta establecida en el acuerdo de productores firmado en Diciembre de 2016. Los siguientes 4 meses bajo la presidencia de Eulogio Del Pino la producción se redujo en 30 mil barriles, a pesar de los esfuerzos por dirigir, casi de manera solitaria, una empresa con un muy limitado flujo de caja, que se mermaba mes a mes por la falta de conocimiento como consecuencia de la decisión de Maduro de acabar con la Gerencia petrolera Chavista, aunado al cumplimiento cabal de todos los requerimientos realizados por el Ejecutivo Nacional para llevar a cabo la más grande importación de alimentos en los 19 años de Revolución. Es así como a finales de agosto de 2017, Del Pino le entrega a Nelson Martínez la presidencia de PDVSA con una producción de 1 millón 941 mil barriles día.

Nelson Martínez fue expulsado de la presidencia de PDVSA, en un deplorable, bochornoso e innecesario show gobiernero, a finales de noviembre de 2017, con una producción de 1 millón 835 mil barriles diarios. Martínez estuvo al frente de la estatal petrolera por espacio de 3 meses en los cuales la producción se redujo en 100 mil barriles según la OPEP, fundamentalmente por las complicaciones propias de colocar al frente de una empresa tan compleja y que ha experimentado tanto cambios en los últimos años, a un profesional con una extraordinaria preparación técnica pero quien estuvo durante los últimos 10 años ocupando posiciones en las filiales internacionales de la industria. Martínez no tuvo tiempo de entender la conexión que luego del sabotaje petrolero se estableció entre la masa laboral y las estructuras de dirección dentro de PDVSA, esa conexión maravillosa que Chávez estableció con los trabajadores petroleros y que transmitió a cada uno de los que ocuparon la Presidencia de la empresa y el Ministerio de Petróleo.

Durante los últimos 9 meses con Quevedo al frente de la industria, los resultados han sido realmente catastróficos, los niveles de producción de PDVSA, han alcanzado los volúmenes producidos hace 60 años: 1 millón 278 mil barriles por día, es decir un descenso de casi 600 mil barriles respecto a la empresa que recibió. Habría que preguntarse entonces si la verdadera conspiración está en los más de 80 trabajadores hoy detenidos, señalados como conspiradores (a quienes en una clara violación de sus derechos aún no se le realiza la Audiencia Preliminar luego de más de 8 meses de estar detenidos).

¿Podríamos citar a Maduro como responsable de esta situación?, quien en Febrero de este año en una entrevista a un periodista internacional, expresó que los factores que afectan los niveles de producción de PDVSA son: "…la ineficiencia, la corrupción y la incapacidad de los jefes de la industria petrolera incluyendo su presidente".

¿Podemos concluir entonces que Maduro además de tener la capacidad de destruir la 5ta empresa petrolera del mundo, tiene al menos una virtud: Sabe leer el futuro?

¿Puede una industria tan compleja como la Industria Petrolera estar dirigida por militares y civiles sin ninguna preparación en este tema?

¿Lo que está ocurriendo en PDVSA es un colapso o es una destrucción mediática y premeditada con otros fines?

 

antoniohsucreb@gmail.com



Esta nota ha sido leída aproximadamente 1947 veces.



Noticias Recientes:

Comparte en las redes sociales


Síguenos en Facebook y Twitter