¡La Revolución se debe hacer con Internet! (I)

"La manipulación mediática puede hacer más daño que la bomba atómica, pues destruye los cerebros." Noam Chomsky

La principal obligación de la Humanidad actualmente es su supervivencia y para lograrla es necesario realizar a muy corto plazo una Verdadera Revolución Social y Económica, que es ya impostergable, si es que deseamos realmente sobrevivir. Existen unos componentes fundamentales e imprescindibles de esta revolución que debemos tener en cuenta inmediatamente, que son Internet y las Redes Sociales, pues constituyen la base sobre la cual estableceremos todo tipo de comunicación e información que requerimos para esa enorme empresa.

Actualmente hay una gran Explosión Comunicacional en el mundo entero, gracias a Internet, que así como la gran mayoría de nuestras riquezas, no hemos sabido aprovecharla adecuadamente en beneficio común y más bien está contribuyendo al fortalecimiento de la elite dominante; por lo cual, lo único que se ampliará será la enorme brecha económica y social que ya de por sí es insoportable.

Ese enorme potencial comunicacional, que nunca antes había estado disponible, hoy está a disposición de la población mundial para su beneficio, pero si no lo usamos racionalmente por el bien de todos, muy pronto lo habremos perdido y terminará concentrado en muy pocas manos.

Gracias al uso cada vez más generalizado de Internet, de la multiplicación de las redes sociales, de las plataformas digitales, etc., una verdadera revolución comunicacional está naciendo junto con el Siglo XXI. Hoy en día, el uso habitual de Internet ha generado una explosión de la información que nos permite conocer lo que anteriormente se nos ocultaba deliberadamente o no podíamos acceder por razones económicas, geográficas o puramente particulares. Lo que anteriormente era un fenómeno meramente informativo hoy se ha convertido en un fenómeno comunicacional debido a la posibilidad de una respuesta inmediata del receptor del mensaje, lo cual ha permitido dar cabida a la controversia, la denuncia y el debate, contando además con un testimonio absolutamente confiable e inmediatamente disponible de todos los actos realizados por los seres humanos.

Pero ya han comenzado a poner censuras y restricciones. La Unión Internacional de Telecomunicaciones UIT, es una agencia que pertenece a la ONU, y quiere hacerse con los dominios de Internet, para que los gobiernos afiliados puedan controlar, entre otras cosas, el acceso de los usuarios en cada país mediante el cobro de un impuesto. Este cobro, aunque argumentan sus proponentes, que es pequeño y para beneficio de todos, no es más que una forma inicial de censura y no debemos permitirlo. Habrá que buscar los mecanismos necesarios para lograrlo, activando, por ejemplo, campañas por las redes sociales.

Ese mundo maravilloso de Internet, como lo conocemos actualmente tiende a desaparecer en unos pocos años, si no estamos alerta, pues ya están empezando a legislar en muchos países, en aras de ejercer mayor control sobre la red como es por ejemplo, la Identificación Digital de Identidad, o firma digital, sin la cual nadie podrá entrar a una página web, un blog, etc. Nadie podrá descargar algo sin estar identificado. Todos los movimientos que hagamos tendrán nombre y apellido para efectos legales. Quien haga algo ilegal, será un delincuente y en consecuencia será tratado como tal. No podremos ver la mayoría de las noticias, escuchar música, ver videos, enviar correos, hacer llamadas, etc., sin pagar. Actualmente no lo estamos haciendo, pero hemos aceptado todas las condiciones que nos han impuesto al abrir una cuenta. Sin pensarlo, hemos caído en la gran trampa que nos han tendido poco a poco. Nuestras afiliaciones las pueden borrar el día que quieran. Todos nuestros correos existen y pueden ser investigados con sus respectivas consecuencias. No podremos ni encriptar ni proteger ficheros. El acceso a Internet será gratuito; lo que se deberá pagar son los servicios y si no cumplimos su reglamento podremos ser sancionados con la negación de ese acceso de por vida, sufriendo el peor de los destierros en el mundo.

Todo tipo de limitaciones como las censuras y las restricciones que hemos comentado se podrán combatir cuando Internet sea declarado como un derecho humano fundamental. Hemos dejado pasar el tiempo sin preocuparnos por autoconvocarnos a un REFERENDO MUNDIAL para afianzar este derecho.

¡Todavía tenemos tiempo, pero no mucho!

Todo lo anterior nos pone además de manifiesto, que muchos conceptos como libertad, independencia, democracia, república, participación, revolución, igualdad, trabajo, jornada laboral, justicia, denuncia, etc. deben someterse a una revisión en aras de un entendimiento más completo entre todos los seres humanos. El mundo está dirigido por gobernantes incompetentes, pusilánimes o muchas veces, sencillamente impotentes, que tienen que obedecer a los intereses de las grandes transnacionales, o a poderosos grupos económicos y financieros y es indispensable que la opinión pública en cada país ejerza sobre ellos la presión y el respaldo suficiente que les permita enfrentarse con fortaleza a esos enormes poderes capitalistas. Cuando han surgido dirigentes valientes, comprometidos y decididos, de la talla de John Kennedy, Olof Palmer, o Hugo Chávez, prontamente han sido eliminados y apartados del camino. Es por esta razón que los pueblos del mundo deben demostrar su respaldo cuando sus gobernantes han ganado su confianza, pues a éstos se le hace extremadamente difícil enfrentarse de manera individual a la inmensa maquinaria capitalista. Es muy raro que muera un presidente en funciones, y cuando esto sucede, es incluso sospechoso, especialmente si se trata de alguien que se ha enfrentado al poder fáctico, como son los casos que hemos comentado, que por lo demás, no han sido suficientemente aclarados. Estas conspiraciones del capitalismo están llevando al mundo hacia la destrucción total, pues ya ni entre los más poderosos hay paz como para garantizar la estabilidad general del planeta.

Pero no basta el acceso a Internet y a todos los mecanismos y medios que actualmente tenemos a nuestra disposición, también es necesario aprender a manejarlos eficientemente y tener claridad de los objetivos que buscamos alcanzar al comunicarnos. Si bien es cierto que algunas personas tienen una innata capacidad comunicacional, no todo el mundo cuenta con las mismas habilidades y en consecuencia es necesario aprender y practicar algunos principios básicos de la información y la comunicación, pues de otra manera, el enorme potencial comunicacional se convertirá en un arma que aumentará aun más nuestro involuntario sometimiento, convirtiéndose en el medio más represor del ser humano.

La pobreza es cada día más extensa y más intensa en el mundo entero. La brecha entre ricos y pobres aumenta constantemente. Las reformas laborales no hacen más que desmejorar las condiciones del trabajador y continuamente disminuye la calidad de vida de la población en todo el planeta a pesar de los adelantos científicos y tecnológicos. Solo basta observar los efectos de las políticas de bienestar en Europa y USA, que hace pocos años eran ejemplo para el mundo. El poder adquisitivo del trabajador constantemente está disminuyendo.

Es decir, estamos viviendo una nueva versión, o versión 2.0 de la esclavitud, una neoesclavitud, sin grillos metálicos pero con grillos electrónicos como el reloj y el celular, donde no solo los negros son esclavos, sino toda una clase social cuyos miembros hacemos todos los esfuerzos por ir en busca de nuestros "negreros" a diferencia de la versión anterior en que estos iban en busca de los futuros esclavos. La esclavitud como alguien acertadamente ha dicho: "no fue abolida, simplemente se ha puesto en nómina y nuestros gobiernos, sometidos por el poder económico y financiero de los grandes grupos empresariales son los encargados de reglamentarla y aplicarla".

Esta es una esclavitud pecuniaria, es decir, basada en el dinero, el cual siempre regresa a las manos de nuestros amos. Muchos de los esclavos no tenemos una percepción clara de nuestra realidad, debido a que los medios informativos y comunicacionales están al servicio de la clase dominante impidiendo ver nuestra condición de esclavitud. De ahí, la necesidad y utilidad de Internet para reivindicarnos.

 

 



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Gilberto Hernández Ortíz

Graduado en la universidad Nacional de Colombia en Licenciado en Ciencias de la educación especializado en el área de Física y Matemáticas Postgrado en Educational Media en la Universidad de North Carolina A&T State University año 1984 - Greensboro, N.C Prof. Jubilado de la Univ. de Oriente (Núcleo Anzoátegui)

 gilnandez@hotmail.com

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