La dialéctica, el instrumento más importante para el análisis de la realidad (hechura de Marx) nos permite entender vicisitudes que parecieran aislados uno del otro, cuando en realidad tienen perfecta relación. Ella se complementa con el materialismo histórico, que es la visión en 360 grados del mundo y sus realidades. Los hechos no son aislados, y, además, tienen su origen en una historia.
Por ello cuando el premier francés Enmanuel Macron, junto a su par inglés Boris Johnson, durante la realización de la Asamblea General de la Organización las Naciones Unidas, intentaron concretar un encuentro entre el presidente iraní, Hasán Rohaní, y Donald Trump, en esencia intentaban detener un conflicto que a todas luces se ve indetenible, con el agravante de que, si estalla, sería imposible predecir su fin.
El intento fracasó porque Rohaní les dijo que aceptaba el encuentro con Trump, sólo si Estados Unidos quitaba las sanciones. Sería el primer encuentro entre mandatarios de ambos países desde 1979, cuando las condiciones eran absolutamente distintas. Y era, sin duda, la posibilidad de encontrar nuevamente la estabilidad en la región, que tiene al mundo entero, y sobre todo al medio oriente, en ascuas, pues sabe que un disparo de revólver sería la chispa que encienda la pradera, parafraseando a Mao.
Porqué Francia e Inglaterra hacen este intento ahora y no lo hicieron antes, porque ahora sí tienen claro que los iraníes se han preparado durante décadas para este momento, con una capacidad de respuesta bélica determinante, y que seguramente se convencieron de la posibilidad real de ser alcanzados por alguno de sus misiles en sus propios territorios. Como diría el Tío Miguel, "ahora ellos también están asustados". Y además porque hay un elemento de tipo cultural, quizás mágico-religioso: ellos no tienen miedo a la muerte.
Pero la otra parte del tema es que Irán reivindica su derecho a investigar la energía nuclear, en un tercer paso al poner en funcionamiento 20 centrifugadoras IR4 para enriquecer uranio en lugar de las diez que estaban permitidas y que formaban parte del Plan Integral de Acción Conjunta. Quizás haya sido una de las razones por la cual Estados Unidos se sale del Acuerdo de No Proliferación Nuclear que se firmó en 2015.
Y mientras Macron y Jonhson, hacían esfuerzos para que se produjera la reunión entre Rohaní y Trump, el Secretario de Estado yanqui, Mike Pompeo, se reunía con el Consejo de Cooperación del Golfo, que en realidad es con Arabia Saudita, para anunciar nuevas sanciones contra Irán y las empresas chinas que siguen comerciando con su petróleo.
En realidad, las medidas son una pancada de ahogado para responder a la desintegración de la mitad de la producción petrolera de los saudís de unos cinco millones de barriles, luego del ataque yemení con drones que destruyeron las instalaciones petroleras y redujeron a la mitad la producción de ese país.
El ataque, que tiene diferentes implicaciones, entre ellos la muy cuestionada incapacidad de la tecnología gringa para no detectar a tiempo el bombardeo de los drones, fue de inmediato atribuido a Irán, aunque los rebeldes Huties de Yemen se lo atribuyeron de inmediato, hecho que impulsó las nuevas sanciones a Irán. Hecho que se complementa con las declaraciones este domingo del príncipe heredero de Arabia Saudita, Mohammed Bin Salman, quien pidió una acción global contra Irán, y que, de no ejecutarse, los precios del petróleo serán "inimaginablemente altos".
"Si el mundo no toma una acción sólida y firme para disuadir a Irán, nos convertiremos en testigos de nuevas escaladas que amenazarán los intereses mundiales…se verán afectados los suministros de petróleo, dijo Bin Salman, quien aprovechó para culpar a Irán por el ataque del 14 de septiembre.
No obstante, timoratamente subrayó su preferencia por una solución política, pues una guerra entre Arabia Saudita e Irán, a su juicio, colapsaría la economía global. Destacó que la región representa alrededor del 30% de los suministros de energía del mundo, alrededor del 20% de las vías comerciales mundiales, y aproximadamente el 4% del PIB mundial. De este modo, explicó que la crisis no sólo significaría un colapso de la economía de Arabia Saudita o de los países de Medio Oriente, sino "un colapso total de la economía global".
Cabe destacar que otro 30% de la energía, es la reserva sólo de Venezuela; y es la razón por la cual Estados Unidos ejerce cada vez más presión sobre el gobierno venezolano, e impulsa nuevas sanciones y amenaza a diestra y siniestra, buscando una rendija por donde se pueda colar la traición.
Si el 60% de la energía tradicional, se ubica entre el medio oriente y un solo país, Venezuela, y Estados Unidos reconoce que sólo tiene el 1% de sus reservas petroleras, no tiene porqué extrañarnos que dos más dos sean cuatro, aunque no siempre. Desafortunadamente, para el norte grande, ninguno de los intentos internacionales ha dado pie con bola; y la diplomacia venezolana ha demostrado una gran capacidad de maniobra para salir airoso de todos los ataques, incluso revirtiendo posiciones de algunas naciones atacantes que ahora reculan y prefieren callar ante sus errores cometidos.
Y es preciso entender que, sin el apoyo de Rusia y China, esto no hubiera ocurrido, simplemente el Big Brother hubiera entrado tal como lo ha hecho en todo el mundo, como cuando los marines entraron en Santo Domingo, o cuando entraron en Panamá. A esta hora, estuvieran a Maduro escuchando escándalo musical en Miraflores antes de sacarlo esposado y llevarlo a sus prisiones. A eso se le llama dialéctica del entendimiento: para enfrentar a un poderoso, debes aliarte con otro. O como reza el proverbio árabe: "el enemigo de mi enemigo, es mi amigo". "No contaban con mi astucia" diría el Chapulín Colorado.
Caminito de hormigas…
Alguien puede explicar cómo es que el reparto de las cajas Clap, ocasiona de inmediato el abastecimiento de bachaqueros que comercializan los productos.
