“No me preocupa la maldad de los malos, sino el silencio de los buenos.”
Rev. Martin Luther King;
“El mundo ya es peligroso no solo por los que hacen mal, sino por los que miran y no hacen nada”. Albert Einstein.

Por esa razón es que las crisis son buenas y oportunas; los cambios sociales no avanzan y se afianzan sino es a punta de látigo. El gobierno se apoltronó, dejó de atender lo importante y sus funcionarios se rodearon de jalabolas. La burocracia siempre es herramienta de la corrupción y de los ladrones.
Pero, la fidelidad de nuestro pueblo tiene 200 años de vida republicana luchando. Atravesó la guerra racial y con Boves limpio la Patria enfrentando a la oligarquía; luego llegó la guerra de independencia, y vivió la traición de Páez y los enemigos de Bolívar; después se alzó con Zamora y puso a la oligarquía en carrera …

Luego, Guzmán Blanco traiciona y mata a Zamora, y venimos al siglo XX, hasta que reapareció la dignidad nacional en Castro y traicionado éste, es entregado el País a los gringos por “el Compadre”; después vino el 23 de Enero 1958, traicionado por Adecos y Copeyanos; entonces vino Chávez y nos trajo hasta aquí.

En cada uno de estos estadios siempre hubo presencia revolucionaria militar del lado del pobre; nuestro pueblo, todas las veces, se convirtió en Soldado y Ángel Vengador. Hasta que llegaron los herederos del liberalismo amarillo, Adecos y Copeyanos y fabricaron esa fórmula estomagante que es es el “militar apolítico” y corrupto. Separado del pueblo y al servicio de la clase gobernante. El militar arrodillado, Soldaditos de escritorio y muñequitos de torta que ahora vendrían, no ya del pueblo, sino del seno de “las prestigiosas familias de bien que componen a la alta sociedad”. Proyecto que hoy gracias a Dios ha sido desarticulado por el Comandante del 4F.

Hemos venido dando tumbos en nuestra historia, pero avanzamos entre traición y traición. Esta etapa la vamos a superar, podemos estar seguros. Basta conocer la Historia nuestra…. Nuestra fe no está puesta en facciones políticas que coyunturalmente lideren la orientación política de nuestra historia, no. Si así fuere, ya hace tiempo nos hubiéramos rendido ante la desmoralización. Nuestra fe está puesta en el inexorable camino de luchas que transita nuestro pueblo desde su conciencia colectiva hacia su realización y consumación como proyecto común y de todos.

Esa nuestra historia, no la falseada de bandoleros de rostros lavados y maquillados para enterrarlos en el Panteón Nacional. Nuestra Historia, la que protagonizó y lideriza nuestro pueblo, la que nos dignifica.

Pero, hay que conocerla muy bien. Nuestro pueblo es pacífico porque conoce profundamente el demonio de la guerra de exterminio, y en sus crisis más profundas “fabrica” y levanta su propio liderazgo, los pone al frente y supera el trance.

Pero, también desecha a quienes no dejan avanzar, y los exhibe en el basurero de la Historia…

Una advertencia ante los que quieren una guerra civil como arma política para alcanzar las metas que por el sufragio no han podido. Las atrocidades de la Guerra Federal y en las que siguieron hasta bien entrado el siglo XX lanza una terrible advertencia contra aquellos que en Venezuela desaten el espanto de la guerra civil, blanquitos o gasparines de abolengo como Freddy Guevara, Capriles Radonski, Leopoldo López, Maria Corina Machado, y otros pertenecientes a la raza superior.

Es que en aún hoy persiste en nuestro inconsciente colectivo los mismos rasgos de carácter que, en tiempos de Boves exterminaron la cuarta parte de nuestra población. Cifras conservadoras ubican entre 250.000 y 300.000 muertos. El pueblo que liderizó Boves y que posteriormente insurgió con Zamora exterminó a todo lo que fuera étnicamente blanco o lo pareciera. Esto llevó a Bolívar a entender que sin el pueblo no habría victoria, y a decretar la liberación de esclavizados e integrar al pueblo compuesto por negros e indios al ejército.

Una advertencia Espantosa nos muestra que una cosa es llamar al diablo, y otra muy diferente es verlo llegar. Después de la Guerra Federal, el gobierno de Guzmán Blanco y los subsiguientes tomaron como política del estado el importar inmigrantes en España, Alemania, Italia y Portugal, esto para “reponer” una población blanca que fue exterminada convirtiendo a nuestro País en la segunda república negra de América después de Haití. También debemos mencionar que los movía el miedo a que Venezuela siguiera siendo negra, por lo que la política oficial fue el blanquear la piel de la población. Otra república negra era algo muy peligroso.

Las claves de nuestro futuro están en el conocimiento profundo de nuestra historia. Nuestro pueblo no es un simple vuelo de pájaros, diría el poeta de Falconía. Ante la decepción y la desorientación que pareciera campear debemos temer a la ignorancia. Es la ignorancia las que nos va a desmoralizar y a llenar de incertidumbre. Menos mal que existe el inconsciente colectivo.

Un Abrazo y de Pie, compañeros y compañeras,

“ Sin disciplina y seriedad no habrá victoria popular en el combate.La estrategia del Enemigo.Ataques de Infofrenia. El Facismo no es improvisado ni autodidacta. La dominación es sistemática, cínica, militante, sincronizada, disciplinada y organizada en sus objetivos.
Quien la combate no puede hacerlo desde la indisciplina. Los cambios sociales no se dan a punta de consignas, sino luchando despierto a brazo partido, y con los ojos abiertos, Es madrugando que se apura el sol”.