La oposición, anda tan mentirosa y apátrida como siempre, esto no es nuevo, ya antes que Chávez asumiera el poder, muchas larvas opositoras, se movían en ese intrincado movimiento que sabía que no debía ganar ese “negro bembón” porque era peligroso para “la democracia” así, se fueron sumando las fuerzas de siempre, pero esta vez no para verse las caras frente a frente, sino para hacerle frente, a la incipiente revolución que se avecinaba.
Luego del paso torrencial de agua bajo el puente y sin nuestro líder físicamente, somos nosotros los chavistas, los que hacemos frente a una plaga mundial, que juró que acabaría con la revolución, porque este mundo, incluyendo Venezuela es de los burgueses, que vaina es esa que los monos de Venezuela estén viajando por el mundo, ni siquiera lo pueden hacer por la Gran Sabana, así piensan estas personas malignas y dementes.
Pero de repente, vemos ese “pelón” de Santos, que a cualquiera pone capcioso, como no va a saber, el presidente de un país que se jacta de ser de una gran diplomacia a gran nivel, que si usted no es de cierta zona del mundo, no entra en ese club (OTAN) entre otras cosas porque luego tienen más partes a repartir del botín, así, por ejemplo la invasión a Libia, aupada por sus propia gente, no reparte el botín, fuera de Europa y USA.
Pero, ese botín llego a otros países, gracias a esa parte opositora a la que le gusta mucho, mucho lo gringo, hablar inglés, ser más que pitiyanqui. Entonces, creo que Santos, que no es bolsa, prefirió lanzar ese trapo rojo y aplacar un poco su metida de pata al recibir, así sea con camisa rosada, al CAPriles. Él, más que nadie sabe, que los productos colombianos en la frontera, son requeridos por sus vecinos venezolanos.
La otra, Gaby Espino, una de esas mujeres que como son de una belleza excepcional y escalan gracias al venezolano, cometen luego la traición de irse y no venir más, una vez escuché a un mejicano que le respondía a un venezolano que manifestaba “en Venezuela nacen las mujeres más bellas del mundo” este mejicano le respondió “si es verdad, pero nosotros nos las cogemos” así me hace sentir Gaby y todas las otras arpías.
Con razón, le reclamaron los jugadores de la selección amarilla, azul y roja, eso de vinotinto no me parece. Para colmo, la “mejicana” Gaby Espino, dijo que ella escribe lo que le da la gana, la propia respuesta de alguien que traiciona. Dejemos a Gaby y entremos en las mentiras de Datanálisis, dadas en respuesta a un programa en Dat televisión, de la oligarquía valenciana en un programa que se llama Punto de Encuentro.
La periodista Esther, no recuerdo su apellido, le hablaba a Luis León, presidente de Datanalisis, acerca del racionamiento que existe en la frontera, lo del chip para la gasolina, etc. y el cómo títere muñeco de torta de la burguesía, respondió, su chorro de babas y dijo “en la frontera son ciudadanos de tercera o cuarta, como es posible que vayan a lo pequeño si, son mafias las que se llevan en gangolas las cosas que necesitamos” Esther lo increpó, “pero eso no fue lo que dijo el gobernador Arias Cárdenas” y la cosa quedo así; pero lo que no explicó Esther, es que poco a poco, el contrabando en gandolas, ha ido desapareciendo por unas Fuerzas Armadas, más leales a su país. Entonces lo que hacen los “bachacos” que son en un 99% colombianos, es pasar al lado de Venezuela y con bastante real del narcotráfico, compran al lado de cualquier zuliano o tachirense, en cualquier supermercado, una cantidad desproporcionada, por ejemplo 10 litros de aceite, entonces, si 100 bachacos compran 10 litros de aceite cada uno, en un solo viaje, son 1000 litros de aceite; en tan solo una incursión, así, van acopiando y van por otra incursión, mientras los bachacos comienzan a arrimar por los caminos verdes la mercancía. Un solo bachaco puede hacer hasta 10 viajes diarios y así van llevándose todo hacia Colombia, donde los productos son más caros, al igual que la gasolina, que todos sabemos; aquí es regalada. Esto fue lo que debió contestarle Esther, de Dat televisión valencia, al Luis León, para que no siga engañando y disociando a los venezolanos, que por no prepararse sucumben fácilmente, ante el músculo mediático mundial y creen que son amos del valle, inmigrantes escuálidos o un disociados en general.
