La burguesía triunfó sobre la nobleza y el clero, precisamente porque descartó la superstición, la magia y la teología, separó la Iglesia y el Estado, lanzó la Reforma, sustituyó el Dios divino con la razón humana y adoptó el materialismo mecánico. Con todos estos cambios dramáticos barrió las clases oligárquicas y feudales fuera del poder social por medio de un doble ataque: en la política la Revolución Francesa (1789); en la economía la Revolución Industrial (1830).

Aparte de la dialéctica y la revolución, la principal arma invencible de la burguesía era la ciencia, la ciencia materialista, la ciencia natural. Para la producción industrial, de bienes y ganancias, era necesario el cálculo matemático preciso. El pensar mismo se convirtió en producción.

Los adivinos feudales, la profecía religiosa, la magia blanca y negra no fueron capaces de predecir la maximización de las ganancias o las depresiones y colapsos económicos. El capitalismo necesitaba un mundo que podría interpretarse de, por y para sí mismo, necesitaba la predicción científica, y con ella dialécticamente la teoría filosófica correspondiente. Esto lo hicieron posible precisamente Francis Bacon, Kepler, Newton, Kant, Adam Smith, Darwin, Hegel y otros.

Si se separa dialécticamente el conocimiento científico (la praxis) de su otro lado, de su negación (la teoría), entonces degenera en práctica repetitiva y produce ideología inútil, mentiras, engaños e ignorancia. Como tal, pierde sus facultades anticipatorias y emancipatorias.

Lo que niega este callejón sin salida actual, lo que es la única arma y esperanza de todas las clases trabajadoras contra la barbarie corporativa, contra el venidero globo fascismo, cuyo huracán económico ya se puede sentir, es simplemente el ‘No’ del capitalismo, su negación dialéctica: la praxis científica y la teoría filosófica, es decir, el socialismo, a saber, el marxismo.

¿Por qué necesitamos la predicción científica precisa y la anticipación filosófica concisa? Para estar siempre un segundo y un milímetro por delante de nuestros enemigos de clase! ¿Cómo nos matan nuestros amos? En el espacio y el tiempo!

Ahora, la cosa más fácil es predecir, puesto que tenemos plena posesión de nuestras facultades naturales, científicas y filosóficas. Si leyéramos el “Manifiesto del Partido Comunista” y “El Capital” concientemente, entonces, sin duda, descubriríamos el excelente poder intelectual de la reflexión y del pensar precisos, de la predicción práxica - lo que está ocurriendo ahora, y lo que los expertos burgueses llaman un “fiasco financiero”, en realidad, Marx lo predijo hace más de un siglo: es la crisis final del capitalismo, que durará por mucho tiempo como un nuevo modo de destrucción total (de barbarie), es decir, a menos que lo paremos en el tiempo y el espacio aquí y ahora!

A muy pequeña escala, como resultado de la praxis y la teoría marxista, he logrado ver en el futuro, para ayudar emancipar cosas y a camaradas en posibilidad.

El 14 de febrero de 2009, con referencia a las elecciones en Venezuela, que se iban a celebrar al día siguiente, contra la propaganda del tipo Goebbels y las mentiras a nivel internacional, científicamente pronostiqué los resultados de las elecciones 24 horas antes de que estas se llevaran a cabo. Predije que el “Sí” de Chávez iba a ganar con facilidad por lo menos con un millón de votos por delante para evitar conflictos sociales graves.
Véase:http://www.vheadline.com/readnews.asp?id=77671

Y, ¿cuáles fueron los resultados?

Tres horas y media después del cierre de las urnas, el CNE nos informó que, con 94,2% de los votos contados, el electorado ha votado con un 54,4% a favor del “Si” y con un 45,6% a favor del ‘No’, aprobando de esta manera la enmienda constitucional en Venezuela.

Fueron precisamente los 10 puntos de diferencia, el “millón de votos” que he mencionado un día antes, que obligó a la oposición de aceptar los resultados con mala cara.

Sin embargo, nuestros dones intelectuales, científicos y filosóficos incluso pueden predecir acontecimientos históricos mucho antes de su realización.

En un comentario tres años atrás, predije científicamente la caída actual de los Estados Unidos!
Véase:
http://www.aporrea.org/tiburon/a19132.html

El miércoles, 25 de enero de 2006, en Inglés publiqué en vheadline.com un artículo con el siguiente título: “Después del colapso de la Unión Soviética vendrá el ‘Gran Colapso’ de los Estados Unidos?”

Explicando las 'teorías del colapso del capitalismo', entre otras cosas pregunté:
“Después del colapso de la Unión Soviética, nos encontramos ahora frente al “Gran Colapso” de los Estados Unidos de América? Existen las teorías del colapso del sistema económico mundial?”
(Véase el original en Inglés: http://www.vheadline.com/readnews.asp?id=47751 )


La relevancia de la ‘teoría de crisis’ para la Revolución Bolivariana la formulé de la siguiente manera:

“En el caso de Venezuela, para ver el verdadero contexto histórico de la Revolución Bolivariana, y para entender por qué, más que nunca, tenemos que aniquilar el capitalismo aquí y en todas partes, vamos a refrescar nuestras mentes acerca de la ‘teoría de crisis’.”

En cuanto al 'doble colapso del sistema mundial capitalista' expliqué además que:

La “teoría del colapso del capitalismo” o “teoría de la crisis” ya es muy antigua. Ya los fundadores del socialismo científico y filosófico, Karl Marx y Friedrich Engels, habían pronosticado "un doble colapso del sistema mundial capitalista, de la acumulación capitalista y de la división entre la producción capitalista y el intercambio capitalista, que bloquean totalmente el uso completo de las fuerzas productivas y creativas existentes a nivel mundial. Precisamente este es el dilema actual del imperialismo corporativo y de la economía muy vulnerable de los Estados Unidos. ...”

La verdad histórica es simplemente, que la riqueza corporativa producida y acumulada en unas pocas manos durante las últimas décadas ya no puede valorizarse más, ni en la producción ni en la circulación. Vamos a terminar con mi predicción precisa:

“Hasta ahora, el capitalismo aún puede recuperarse de sus contradicciones inherentes, y, con la ayuda de ‘El Capital’ de Marx, todavía podría aprender a superar su crisis crónica, mediante la globalización. Sin embargo, en el siglo 21, el imperialismo americano está cruzando el Rubicón, y pronto se enfrentará con enormes rebeliones populares y un desglose económico total a nivel mundial.”

(Para más información, véase:
" ¿Después del colapso de la Unión Soviética, ahora la ‘Gran Caída’ de los EE.UU.?" (27/01/2006, http://www.aporrea.org/tiburon/a19132.html )

franz@franzlee.org.ve
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