Les voy a decir algo, esta acción es premeditada y tiene doble finalidad:
1. La principal, bloquear a las FARC a cualquier medio de comunicación. Telesur era el medio por el cual podían declarar sin temor dada la ética profesional e imparcialidad del periodismo de ese canal multiestatal. Ahora los periodistas de ese canal están en peligro en cualquier territorio del mundo porque se puso en duda su credibilidad periodística. Al mismo tiempo, bloquear todos los medios a través de los cuales las FARC puedan anunciar la intención de liberar a todos los rehenes, hecho éste insisto, no es del interés todavía del Gobierno de Colombia porque a la derecha extrema de ese País y al Gobierno de Washintong, no les interesa que un Gobierno de izquierda se monte en Colombia como está ocurriendo en varios países de Latinoamérica, por lo que su objetivo principal es exterminarlos. Al Gobierno de Colombia, mientras pueda desacreditar a las FARC, es una garantía para que no emerjan gobiernos como el de Chávez, Correa, Morales, Castro, Ortega, Kirchner y Lugo.
2. La menos importante, engañar a las FARC para robarle los rehenes en la cara de la manera más humillante y engañosa posible violando los acuerdos previos que los facilitadotes suizo y francés, ya habían logrado y el ministro Santos de Colombia había intentado callar, poniendo en duda la ética de estos dos ciudadanos mediadores internacionales entre las partes.
En cuanto a la Cruz Roja , la manera como respondió este organismo internacional, fue muy débil y extraña. Abiertamente los funcionarios del Gobierno de Uribe declararon que utilizaron un helicóptero con los colores alusivos a dicho organismo, y soldados colombianos con el emblema del mismo. Unidades de la Cruz Roja , ahora podrían ser blanco militar en cualquier conflicto bélico, ante la duda de que pueda tratarse de una emboscada. Las ayudas humanitarias no llegarán como antes a los civiles inocentes que pudieran estar heridos de gravedad. Pese a esto, este organismo se limitó a emitir un comunicado escueto de rechazo sin consecuencias jurídicas al respecto.
En mi opinión, no sé por qué Chávez reanudó relaciones con un Gobierno casi ilegítimo y reiterativo de mentiras. Aplaudo la honorabilidad del Presidente Rafael Correa. Aún cuando conozco de economía y de los intereses que nuestro País pueda tener con el hermano pueblo colombiano debido al activo intercambio comercial entre ambas fronteras; desde mi punto de vista la honorabilidad está primero. Y a la hora de las chiquitas, mercado tenemos con Argentina, Brasil, Bolivia, Ecuador, Nicaragua, Cuba, etc. En el peor de los casos, la economía cuenta con los productos sustitutivos, así que no es tan sacrificante ignorar al Gobierno de Colombia hasta que Uribe se vaya, así se reelija fraudulentamente otra vez. El tercer Vicepresidente del Congreso Colombiano, está ahora también está tras las rejas por el escándalo de la parapolítica.
Relaciones de amistad con este tipo de gobiernos que violan acuerdos, leyes e integridad de organismos internacionales, no pueden ser gobiernos amigos de la República Bolivariana de Venezuela. Eso nos distancia de la alianza con el Gobierno de Correa y otros Gobiernos. Cuando el gobierno neogranadino actual nos vuelva hacer otro desplante más como estoy casi seguro que lo volverá a ser y cada vez peor; no vamos a tener el apoyo incondicional de Ecuador, al cual hemos dejado solo, a mitad de camino, en la invasión a su territorio.
Reconozco que tengo solo una opinión general del tema internacional; y no sé, como muchos venezolanos, cuál es la razón específica que impulsó a Chávez a restablecer relaciones con el Gobierno colombiano actual. Lo que sí sé, es que cuando varios gobiernos de Latinoamérica se alzan en una oposición a una injusticia flagrante como la que le propinó el Gobierno de Colombia al de Ecuador; la OEA se preocupa más, porque el conflicto pasa de ser de bilateral a multilateral. Pero al dejar a Ecuador y Nicaragua solos en los problemas causados por Colombia, la importancia que le da el organismo no es la misma, porque se trata de un problema bilateral. Es decir, menos reuniones de emergencia para la OEA.
Y otra cosa que critico, ¿qué sanciones hemos acordado hasta ahora los siete países socialistas latinoamericanos y de los no alineados hacia Estados Unidos por haber invadido a la Bahía de Guantánamo en contra del Gobierno de Cuba? ¿Tenemos miedo? ¿Por qué no se ha hablado más enérgicamente sobre el tema? Hablamos de unión, pero, ¿solo estamos unidos diplomáticamente? ¿y los hechos que demuestran una unión clara? ¿Hemos logrado algo al respecto? ¿Hasta cuándo vamos a observar con terror como la langosta destroza a cada una de las millones de hormigas? ¿Cuándo las hormigas en número mayor se unirán para combatir a las fornidas langostas de número menor? Son preguntas de uno de los millones de ciudadanos latinos que nos duelen nuestras tierras y se sienten impotentes al ver cómo son invadidas sin respuesta efectiva que eleve la moral patriótica de nuestros pueblos.
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