30 junio 2019 - Mientras la Asamblea de la OEA se encontraba sesionando en Medellín, distintas organizaciones sociales y políticas del país se reunieron en la misma ciudad para realizar una jornada alternativa. Con reuniones y jornadas de movilización visibilizaron la situación real del país y reafirmaron los lazos de solidaridad con los países de Nuestra América en los que se están construyendo procesos alternativos y populares.
Estas jornadas fueron convocadas por la Coordinadora de Organizaciones Sociales -COS- y por el Encuentro Nacional de Organizaciones Sociales y Políticas -Enosp-.
El rechazo al asesinato de líderes y lideresas sociales, así como al incumplimiento de los Acuerdos con las Farc; el derecho de las comunidades a decidir sobre sus territorios y la autodeterminación de todos los pueblos, fueron las principales banderas de la movilización.
Sin embargo, la agenda de esta Asamblea de la Organización de Estados Americanos -OEA- priorizó temas como la intervención en Venezuela, mientras que pasaron de largo problemáticas como el genocidio de los líderes sociales en Colombia y la grave situación de DDHH que se vive en el mismo país.
«Nuestro país se ha pretendido como cabeza de playa del intervencionismo norteamericano en nuestro continente, lo que afecta a países hermanos como Nicaragua, Venezuela y Cuba», afirma Eduardo León, miembro del Congreso de los Pueblos e integrante de la Cumbre Agraria Campesina, Étnica y Popular y de la COS.
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