Para el momento en que escribimos estas líneas, se conmemoran 195 años del paso a la inmortalidad del Padre de la Patria Grande: Simón José Antonio de la Santísima Trinidad Bolívar Palacios Ponte y Blanco. Hubiesemos querido escribir un poco sobre él, pero estamos seguros que ante estos tiempos de combate, el mejor homenaje es escribir sobre la más reciente decisión del "pelo de estropajo" de Trump.

Al enterarnos de ello, no pudimos dejar de exclamar una típica expresión de indignación y nos disculpan lo fuerte, pero es que brotó del alma: "Grandísimo Hijo de Puta". Pero por nuestra conciencia de la nueva masculinidad pero tendiente a acompañar a las mujeres en su justa lucha por derechos y reivindicaciones, ofrecemos disculpas incluso a las trabajadoras sexuales, que precisamente producto de un sistema de opresión capitalista, machista y patriarcal que por necesidad les obliga a vender sus cuerpos en la mayoría de los casos para poder sobrevivir, no tienen la culpa de parir a semejante engendro.

La fecha del 16 de diciembre de 2025 será recordada, al igual que el 9 de marzo de 2015, serán recordadas ambas como fechas de la infamia no solo contra Venezuela sino contra el Derecho Internacional Público y el mundo. En la última, donde en la Orden Ejecutiva 13.692 Estados Unidos nos declara "amenaza inusual y extraordinaria a su seguridad nacional", y en la segunda como una escalada y como la caída de la careta y ante las posibilidades reales, como no había ocurrido en 123 años, de una nueva agresión militar contra la patria de los Libertadores y las Libertadoras de América.

Como era de esperarse, en su mensaje ayer ante la opinión pública internacional, Trump concretó e intensifica la escalada sin precedentes contra Venezuela. una confrontación completa y total al ordenar abiertamente el bloqueo de los tanqueros petroleros que entren y salgan de Venezuela.

Queremos destacar que la concreción de este escenario no es nada nuevo. El 1 de abril de 2020, durante el primer mandato de este señor, en entrevista para el Diario Vea que realizamos al periodista Carlos Batatin, dijimos de manera clara y sin eufemismos, que las pretensiones o amenazas provenientes de Estados Unidos en cuanto a someter a Venezuela a un bloqueo naval, "definitivamente habría que considerarlo como un acto de guerra abiertamente, lo cual sería una contradicción a lo establecido en la carta de la Organización de Naciones Unidas".

Y teníamos varias semanas advirtiéndolo. La situación de bloqueo aeronaval. Lo fuimos explicando de diferentes formas y maneras producto de seguimiento y análisis serios.

Cabe destacar que esta medida de Trump viene acompañada de una nueva NOTAM y con la ocurrencia de un segundo evento que casi ocasiona una colisión aérea entre un jet privado y una aeronave de guerra estadounidese. Y esto ocurrió con respecto al primer evento de una aeronave de JetBlue, con una diferencia menor a una semana. Ojo con esto.

Aunque suene duro, debemos decirlo, y en privado ya lo veníamos advirtiendo a algunas personas que gozan de nuestro afecto y aprecio. Esta nueva decisión de Trump, este bloqueo incrementaría las ya existentes dificultades en cuanto a la adquisición de medicinas, alimentos, materia prima, bienes y servicios. "Todo eso implicaría un grave ataque a los derechos humanos. Es decir, esto significaría un genocidio que se estaría cometiendo contra la población venezolana, lo cual sería otra prueba más del carácter criminal y terrorista por parte de Estados Unidos, a través de la Administración de Donald Trump". Esto lo advertíamos hace 5 años y medio casi, y de verdad no nos complace haber tenido la razón.

En nuestros análisis siempre pensamos, y el tiempo nos ha venido dando la razón, que el objetivo de Trump no era la invasión directa y tradicional de otros tiempos, sino este bloqueo total con el claro objetivo de estrangular nuestra economía. El 20 de octubre en entrevista en laiguana.tv en el programa "Cara a Cara" con el periodista Clodovaldo Hernández, siempre dijimos y lo ratificamos hace exactamente cinco días en Radio Lateral de Argentina, Estados Unidos apuesta a un quiebre interno para lograr el cambio de régimen en Venezuela. Su papel será apoyar a las fuerzas traidoras que hayan podido ser captadas a lo interno del país, en una estrategia coordinada de ataque externo e interno, como ocurrió con la denominada "Revolución Libertadora" liderada por el banquero y maricorino de la época, Manuel Antonio Matos, armado por la derecha, y que fue derrotado por el gobierno de Castro meses antes del bloqueo naval de Alemania, Inglaterra e Italia del 9 de diciembre de 1902.

Es una estrategia de largo aliento de Estados Unidos. Y sobre todo con una fecha clave a ocurrir dentro de 72 horas como es la revelación de los archivos de Jeffrey Epstein, el cual puede ser determinante en el destino de esta segunda administración de Donald Trump. Ya no se trata solo de complacer a Marco Rubio y a los Three Crazy Cuban o a los neoconservadores en Estados Unidos, sino las pataletas de ahogado de Trump, y cuya tabla de salvación podría ser la agresión a Venezuela.

Evaluaremos el desarrollo y los impactos que en los próximos días tenga esta medida. Pero si debería considerarse nuevamente la posibilidad de que se decrete el estado de conmoción exterior.

Y bueno, estas nuevas circunstancias exigen acelerar la preparación para una eventual acción militar estadounidense. No es nuestra intención alarmar a nuestro pueblo, pero hay que hablar pese a la crudeza, con la verdad por delante.

Aprovechamos estas líneas para felicitar a nuestro buen amigo, camarada y excelso analista y polemólogo, Pedro Román Castro. Quienes días atrás ya nos lo advertía: Estados Unidos se está manejando en el umbral desde el 15 de diciembre al 5 de enero para intentar en una primera instancia, el cambio de régimen. Pero como en esta primera instancia creemos que no lo lograrán, creemos que el bloqueo busca ir generando las condiciones para el tan ansiado quiebre interno que hemos advertido en anteriores entregas y entrevistas.

Y desde lo personal catalogamos estos actos no como sanciones, puesto que no hemos violentado ninguna ley ni tratado internacional que nos haga objeto de ser "sancionados". Aunque Bolívar hace casi doscientos años atrás ya nos lo advertía: "Nadie es libre impunemente". Y esta osadía, e irreverencia propia de los venezolanos y venezolanas pretenden los gringos hacérnosla pagar.

Pero se van a caer de una nube, se lo vamos advirtiendo. Y ante estos escenarios de agresiones, que no de sanciones, detrás de esos eufemismos, se esconde la intención por parte de los gobiernos estadounidenses del saqueo de los inmensos recursos y riquezas de los venezolanos y venezolanas.

El escenario siempre estuvo dado y Trump solamente lo que ha hecho en esta segunda administración suya fue simplemente retomarlo: Originar la conmoción exterior, generar movilizaciones en el 2019 con Juan Guaidó y ahora con María Corina Machado, para tratar de crear la cabeza de playa a nivel interno, conjuntamente con el bloqueo naval, y lograr el ansiado quiebre de Venezuela, buscado durante estos últimos 20 años.

Hay que cambiar la narrativa. Hay que dejar de hablar de sanciones, porque no lo son. Son agresiones, porque no hemos violentado ninguna norma del Derecho Internacional. Somos soberanos e independientes.

Y bueno por ética y lo que hacen los buenos investigadores e investigadoras es dar crédito a sus fuentes, y en este caso cuando buenos investigadores o investigadoras hacen aportes valiosos. En este caso queremos a los fines de pedagogía para nuestro pueblo y que esperar para las próximas horas, los próximos días y semanas por venir, citar los escenarios que la socióloga y brillante analista Kelly Potella Guevara, ante estos escenarios vislumbra para el país. Tomen debida nota de ello:

1. Escalada Descontrolada (Probabilidad Alta): Esta alta probabilidad se deriva directamente de la concentración militar en el Caribe y la proximidad geográfica de los activos. Los sobrevuelos de aeronaves de combate, la activación del West-Hemcom, y, críticamente, el incidente de alto riesgo operacional del 14 de diciembre con una aeronave civil, demuestran que el margen para el error es mínimo. En un entorno de tensión sostenida, un simple fallo técnico, un error de comunicación o un malentendido táctico tienen el potencial de desencadenar un conflicto localizado e involuntario. Por lo tanto, la probabilidad de que la situación se salga de control es significativamente elevada.

2. Negociación Coercitiva Forzada (Probabilidad Media): La estrategia de Estados Unidos de Asfixia Financiera Selectiva y coerción militar tiene como fin último forzar a Venezuela a una negociación para obtener un Triunfo Transaccional. No obstante, la materialización de este escenario depende de la resistencia de Caracas y su capacidad para alargar el P á g i n a | 4 proceso. La Reciprocidad Asimétrica empleada por Irán, al elevar el costo de la presión para Washington, juega a favor de Venezuela. La probabilidad se mantiene en media porque, si bien la negociación es inevitable a largo plazo, Venezuela buscará estratégicamente retrasarla hasta después del ciclo electoral de 2026 en EE. UU. Para mitigar la presión política de la actual administración.

3. Resiliencia Sistémica y Carga Costosa (Probabilidad Media): Este escenario es la estrategia de supervivencia a largo plazo de Venezuela. Se basa en el Fortalecimiento Endógeno (Blindaje Ciber-Físico de PDVSA, Desdolarización) y en la Reciprocidad Asimétrica Profunda con sus aliados estratégicos. La probabilidad es media porque, aunque es la única vía para evitar el colapso total, se enfrenta a dos grandes vulnerabilidades: la alta dependencia de los aliados y la incertidumbre generada por la Realpolitik de potencias como Rusia, que podría priorizar acuerdos de estabilidad global con Washington sobre el apoyo incondicional a Caracas. La capacidad de Venezuela para generar una autosuficiencia tecnológica y económica en un período corto será crucial para elevar la probabilidad de éxito de este escenario.

En síntesis, Kelly nos señala que debemos prepararnos para escenarios complejos. Y la apoyamos en su aseveración.

Para ir cerrando nuestras reflexiones, queremos señalar lo siguiente.

En primer lugar, rechazar la medida de bloqueo de Donald Trump, no solo por violentar el Derecho Internacional Público, sino además porque esta declaración constituye una abierta y nada disimulada declaración de guerra contra la República Bolivariana de Venezuela.

Segundo, Trump con esta declaración se ha quitado la careta al señalar que el petróleo, tierras raras y riquezas mineras "son propiedad de Estados Unidos". No es una locura, como lo expresaba Mario Silva en La Hojilla de ayer, sino un acto de sinceridad producto de la arrogancia imperial de los que se consideran dueños del mundo. Y si nos la pueden tener por las buenas, pretenden robárselas por las malas, como se expresaría llana y coloquialmente.

Tercero y al igual que nuestro Gobierno, ratificamos nuestra soberanía sobre nuestras riquezas naturales así como el derecho a la libre navegación, al libre comercio en el Mar Caribe y en los océanos del mundo. Todo ello de conformidad con el Derecho Internacional, la Carta de las Naciones Unidas, la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela y demás leyes de la República.

Cuarto, apoyamos la denuncia que hará nuestro representante permanente ante las Naciones Unidas, embajador Samuel Moncada, ante este gravísimo hecho que sienta un muy mal precedente a nivel internacional.

Quinto, llamamos al pueblo a estar alertas, a confiar en un mando único liderado por el Presidente Maduro y el resto de los y las integrantes del Alto Mando Político y Militar de la Revolución, con las tres máximas líneas dadas por nuestro máximo líder: 1.- Nervios de acero, 2.- Calma y cordura y 3.- Máxima conciencia para la organización y movilización.

Venezuela no volverá a ser colonia de imperio ni poder extranjero alguno y continuará recorriendo junto a su pueblo, la senda de la construcción de la prosperidad y defensa irrestricta de nuestra independencia y soberanía.

En caso de ser agredidos, simplemente nuestra respuesta será como el último párrafo de la proclama del 9 de diciembre de 1902 del entonces presidente Cipriano Castro ante ese bloqueo naval de Alemania, Inglaterra e Italia, que recomendamos reproducir completa. Pero en nuestro caso, como hemos indicado, reproduciremos solo su último párrafo:

Venezolanos:

El sol de Carabobo vuelve a iluminar los horizontes de la Patria y de sus resplandores surgirán temeridades como la de las Queseras del medio, sacrificios como el de Ricaurte, asombros como el de Pantano de Vargas, heroísmos como el de Ribas y héroes como los que forman la Constelación de nuestra grande Epopeya. Hoy por una feliz coincidencia conmemoramos la fecha clásica de la gran Batalla decisiva de la Libertad Sudamericana, la batalla de Ayacucho, hagamos votos porque nuevos Sucres vengan a ilustrar las gloriosas páginas de nuestra Historia Patria. (Resaltado del articulista)

Por ello, nuestro llamado es a tener la cabeza fría, pero los puños calientes.

Y por último, como lo expresó el inolvidable Comandante Hugo Chávez en su último mensaje ante la Asamblea Nacional de la República Bolivariana de Venezuela, después de la respuesta que le dio a Maria Corina Machado cuando le dijo que "está fuera de ranking para debatir conmigo", hay una frase que dijo mucho después y que casi nadie recuerda, pero que en mi periplo de estos tres últimos meses del año la recuerdo, y que ante estos nuevos escenarios de agresiones y nuevas dificultades, quiero con ello cerrar estas encendidas notas: Pase lo que pase, siempre resultaremos victoriosos y victoriosas.

¡Bolívar y Chávez viven y sus luchas y la Patria que nos legaron sigue!

¡Independencia y Patria Socialista!

¡Viviremos y Venceremos!