No tenemos otro título para describir a la banda que opera desde el palacio de los cóndores, bajo la dirección del filósofo: El Comandante “piro piro” quien junto a sus lacayos durante estos últimos años han intensificado su accionar en el tema de los secuestros y los cobra vacunas, sembrando el miedo y el chantaje en este estado.
Es asombroso el observar a Manuel y su combo defendiendo lo indefendible o justificando lo injustificable, como diría un amigo, pero la realidad es que no hay vuelta atrás en el destape de esta olla, la captura de Mazuco y la huida del país de quien fue jefe de seguridad de Manuel en su aventura presidencial Henry López Sisco dio los indicios necesarios para que los organismos judiciales iniciaran la investigación de esta banda, desenmascarándolos y poniendo en evidencia sus planes conspirativos donde tergiversaban sus delitos a través de la difamación política utilizando los medios de comunicación privados para culpar al gobierno nacional de la inseguridad cuando eran ellos mismos los jefes del complot.
Fueron muchas las dudas de alguna parte de la población zuliana engañados mediáticamente y muchas vidas inocentes quienes con su cautiverio y posteriores asesinatos pagaban viejas facturas delincuenciales, claro todo esto ordenado desde el palacio de gobierno. La campaña presidencial de Manuel evidencio para muchos sectores de la oposición muchas interrogantes e incluso para sus financistas desde los EEUU, pero al pasar ya un tiempo es fácil entender la división irreconciliable de una gran parte de la oposición con “piro piro” y los no rotundo buscando financiamiento que recibió en Panamá y España, en pocas palabras, nadie se quiere hacer responsable de esta locura llamado Manuel Rosales.
Hoy alertamos, aunque sabemos que el presidente Chávez está muy atento a esto por la responsabilidad asumida de conciliar entre los grupos guerrilleros y el gobierno colombiano en aras de buscar esa paz tan deseada por ese pueblo bolivariano que data de más de 50 años, pero es necesario también limpiar este estado dirigido por estos personajes entrenados por inocentes como López Sisco y los ya desaparecidos hermanos Castaño, quienes tomaron se puede decir a sus mejores alumnos Mazuco, el Comandante “Piro piro” y todos sus lacayos para llevar a cabo sus planes de sembrar el miedo y el terror en el Zulia utilizando los medios de comunicación, el tema político y un instrumento como es la Gobernación para llevar a cabo sus objetivos.
¡Fuera los terroristas del Zulia!
