Te la das de loco o es que te comiste unos huevos fritos. Ser revolucionario, es lo que dice la palabra; revolucionar y ¿qué es lo que tú has revolucionado? Un revolucionario no emerge de la oligarquía, pero un “revolucionario como Teodoro y Pompeyo si se van a la oligarquía después de haber mentido diciendo que eran revolucionarios.
Es decir Teodoro y Pompeyo son par de vejetes medievales que un día decidieron que no iban a seguir masticándose un cable y se fueron a jalarle las bolas a Rafa Caldera, delatando a los camaradas y a los guerrilleros. Un buen ejemplo no son; son, eso sí, un par de vándalos asquerosos,
. Ambos se encamburaron y chao pescao. Ministro de Frontera ¿Qué vaina fue esa? Y Ministro de Cordiplan
Teodoro ahora es un vejete parlanchín que “rectea” cómo una cuaima en busca del dinero que le permita mantener ese volante llamado Pascual, perdón, Tal Cual. Que desvergüenza para sus familiares.
Ahora sale Capriles que desde que nació ha vivido, si es que eso se puede llamar vivir, en un pobre ranchito por Baruta y luego en otro de cartón por Valle Arriba, con dinero a montones, apartamentos de millones de dólares, negocios, dinero en abundancia, comercios, lujos, éxtasi, abundancia ¿Qué estupidez es esa de tratar al pueblo? Un día de esto dice que está componiendo con un juglar “qué triste viven los sifrinos en sus mansiones de cartón”.
¿Qué sabe este pobre hombre lo que es un revolucionario? ¿Un revolucionario barbudo y chancletudo como Leopoldo López, cantándoles una canción desde una ventana del Country Club a los adolescentes pobres de Manosblancaville?
Una pobre aliada buhonera como Mariacorina Machado vendiendo heladitos cerca del estadio Universitario, en esas calenturientas noches de temporada y borrachos. Un infeliz pobretón llamado Julio Borges vendiendo aguacate carupanero en una solitaria calle de Caricuao debajo de tremenda pepa de sol ¿Esos son sus revolucionarios? ¿Los Gerardo Blyde, Alberto F. Ravell, Antonio Ledezma, que suben cerros con dos canillas para seis hijos y que se acuestan sin comer diciendo, porque el pan no alcanza que “ya comí” para que sus hijos se alimenten con el poco trigo? ¿Esos son los revolucionarios de Capriles? Insisto, este hombre anda mal del cerebro. Este revolucionario que bebe cerveza en una escalera de su barrio Valle Arriba, con los panas, escuchando vallenato, triste bajo el compás de un bolero, de una changa, de un reguee, con una franela de Bob Marley, con una boina del Che Guevara, con una foto de Fidel y Chávez en su cartera ¿ entiende los que es ser revolucionario?
Este burgués, este habitante de Sodoma y Gomorra, este personaje de Curzio Malaparte, de Víctor Hugo ¿entiende lo que es ser revolucionario?
Da lástima y pena que sea venezolano, porque un hombre que bajo la sombrilla de la demagogia intenta engañar a los humildes, es un sátrapa, es un harapo al gentilicio varonil, es aquel que se escuda en la sombra de la ambición en busca del poder para joder y joder ¿qué es REVOLUCIÓN para un semi político que no sabe lo que significa humildad, sencillez y AMOR?
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