(El Discurso que Estremeció el Hegemón) La ONU, es la Organización de las Naciones Unidas, no de los Estados Unidos. El discurso del comandante Chávez en la ONU, el 20 de septiembre de 2006, definitivamente marcó un antes y un después en esta organización. Antes de la intervención del comandante Chávez, todo era retórica, adulación, y discursos estériles. Después de que Chávez diera esa campanada ("Huele a azufre"), ese discurso histórico donde llamó por su nombre real (el diablo) al presidente de los EE. UU., George Bush en aquel momento, fijó un precedente. Este precedente ha servido para que todos los presidentes de los gobiernos progresistas del mundo se quitaran el bozal y se soltaran las amarras que por décadas tuvieron a la mayoría de los gobernantes del mundo silenciados y sumisos a unas políticas internacionales de servidumbre y de jalabolismo al imperio, para decirlo en criollo. Hoy, el presidente Petro llega sin cortapisas y sin temores de ningún tipo, sin bozal y por la calle del medio, llamando a las cosas por su nombre. Le canta todas las verdades al imperio en sus propias narices, estremeciendo los cimientos de la política mundial. Este discurso nos hizo recordar al presidente Chávez en aquel momento. Aprovechando el mamotreto llamado ONU, es ahí donde se deben decir las cosas, ya que así no se da oportunidad para que la prensa amarillista y palangrista distorsione la información. Lo que en este escenario se dice, lo ve y lo escucha todo el mundo. El discurso del presidente Petro fue tan contundente que a las "gallinas del imperio" no les quedó de otra que salir volando del auditorio (con el perdón de las gallinas, ya que ellas no tienen sus oídos educados para escuchar tantas verdades juntas). Las verdades para ellos son muy estridentes, ya que en otras épocas solo escuchaban de la mayoría de los presidentes y representantes de los países adulaciones o lisonjas y aplausos a todas sus mentiras y barbaridades que a los gringos se les ocurría decir. Luego, esos presidentes, para lucirse ante su amo, presentaban discursos muy complacientes para que no se enojara con ellos; eran, de hecho, los propios lacayos, que se arrastraban como reptiles a sus pies. ¡Buenas noticias para la humanidad! El mundo está cambiando, los pueblos llevan años despertando, y esto no tiene vuelta atrás. Ahora, lo importante es la unidad de los pueblos y estar preparados en nuestros países, prestos para cualquier arremetida imperialista. Y, por supuesto, debemos proteger a nuestros representantes. Recordemos que por ser irreverente y no estar sumiso a las políticas criminales de los EE. UU., y por ser contundente e incorruptible, eliminaron físicamente a Chávez, porque nunca le perdonaron que fue allá, al patio del hegemón, a darle una bofetada. Ahora va Petro con "cuatro testículos" y termina de poner la guinda al pastel en un momento donde el mundo está convulsionado con guerras por todos lados, conatos de guerra en pleno desarrollo, y genocidios como el que ocurre en la Franja de Gaza. Todo esto sucede en un momento donde el presidente Trump busca desesperadamente el apoyo de la comunidad internacional, presionando a sus aliados para continuar implementando sus políticas hegemónicas, que se ven amenazadas debido al despertar y el levantamiento de los pueblos. Pues, les ha salido el tiro por la culata. Algo sí les puedo decir, hermanos colombianos: cuiden a Petro. Véanse en el espejo de Chávez; no le perdonaron haber lanzado ese discurso en las Naciones Unidas y no pararon hasta que lo eliminaron físicamente. El "clon del diablo", Benjamín Netanyahu, también se llevó lo suyo, aunque no como debe ser, porque para mi concepto, este demonio debe ser execrado de este tipo de escenarios. Bueno, la Organización de las Naciones Unidas no ha sido ni es ni será esa organización que dicen sus siglas, ni de las naciones unidas, ya que su función ha sido la de un tentáculo del pulpo llamado imperio. Lamentablemente, para eso fue creada; es un mamotreto igual o peor que la OEA, la OTAN y la UE, que son organizaciones teledirigidas desde los Estados Unidos al servicio del Tío Sam. Que este ser despreciable y rechazado por el mundo entero —no lo digo yo— quedó demostrado en la ONU cuando fue dejado solo en el salón al momento de hacer su intervención. Este asesino de niños debería estar siendo juzgado por la Corte Penal Internacional, pero claro está, la ONU ni con el pétalo de una rosa lo toca, ya que este espécimen es el brazo armado de los Estados Unidos en esa región árabe. Esta organización, la ONU, sí está pendiente, conjuntamente con el gobierno de los Estados Unidos, de armarle al gobierno de Venezuela y a otros gobiernos progresistas una cantidad de calumnias para destruir moralmente a los representantes del gobierno, comenzando por el presidente, para luego asesinarlos o darles golpes de Estado y mandarlos presos, tal cual como lo hicieron en Irak, Siria, Libia, Panamá y tantos otros países más. La ONU calla como si nada estuviera pasando (¡lacayos!). Para mi concepto, todas estas organizaciones deben desaparecer y crear organizaciones nuevas donde sus representantes sean elegidos por los pueblos del mundo, y donde los mismos pueblos tengan potestad para revocar el mandato a sus elegidos. Así se podría lograr que estas organizaciones funcionen como debe ser, equitativamente y en defensa de la humanidad, y no para un sector privilegiado ni para ningún gobierno en particular. Ahora nos preguntamos los ciudadanos de a pie: ¿Qué decisión tomará la ONU con respecto al caso de Palestina? ¿Si tendrán valor, pudor y vergüenza para tomar una decisión bien contundente contra el gobierno sionista y genocida de Israel y el gobierno fascista de los Estados Unidos? ¿O seguirán permitiendo que continúe el genocidio contra este pueblo indefenso? Los pueblos se están movilizando: movilizaciones multitudinarias pro Palestina en algunos de los principales países del mundo (Alemania, Italia, España, Francia, los mismos EE. UU., etc.). Bueno, el mundo está a la expectativa, esperando un pronunciamiento de la ONU con respecto a Palestina, al caso Venezuela y a la invasión al Caribe. Repito, o se elimina este tipo de organizaciones o los países en protesta masiva no deberían asistir a ningún tipo de evento convocado por esta organización. ¿Hasta cuándo permitimos que esta organización, en componenda con estos países (y me refiero a EE. UU. e Israel), haga en el mundo lo que se les venga en gana, y estas organizaciones miren hacia otro lado y se hagan la vista gorda? No hay razones para que estas organizaciones continúen existiendo.