Si tomamos como definición que un partido político no es un órgano del Estado, tenemos que el PSUV enfrenta a mí entender algunas contradicciones que pueden llevarnos a serias complicaciones hacia fines de año.
Primero, en los miembros principales ejercen labor de Estado dos representantes. Uno es nada menos que el Ministro del PP para la Educación. Cargo que (como todos los demás ministerios) necesita una dedicación exclusiva en cuanto a su rol como guía y representante de las políticas educativas del Estado. Este Ministerio está siendo actualmente bombardeado constantemente tanto por los medios de comunicación privados, como por organizaciones de cualquier índole, para tratar de desacreditar cualquier iniciativa que tienda a favorecer los intereses de la mayoría.
El segundo miembro es ni más ni menos que el Ministro del PP para la Agricultura y Tierras. No creo que haya que explicar que este es otro de los ministerios que más complicaciones conlleva actualmente. Está en la mira de Fedecámaras y toda la mafia de roscas que nos podamos imaginar.
Ejerce prácticamente una lucha a muerte contra los intereses más recónditos de la oligarquía, y no puede por un segundo descuidarse ya que nuestra soberanía en materia de alimentación depende de él.
Como suplentes no es menos el peligro en cuanto a la dedicación que necesitan sus despachos. Estamos hablando de dos gobernadores de estados claves (aunque todos lo son) y que no pueden darse el lujo de desatender sus labores. El Ministro del PP para Relaciones Interiores y Justicia y su Vice-Ministro están haciendo una labor excelente. Han logrado frenar los índices de delincuencia y han propuesto un plan de policía nacional el cual es clave para la solución a mediano plazo de ese mal que nos agobia. Al margen de estar enfrentando un complot internacional como es el Plan Colombia.
Como complemento podemos mencionar al Ministerio del PP para la Ciencia y Tecnología. Ya tenemos encima la entrada en escena del satélite Simón Bolívar y los inmensos esfuerzos que se hacen para salir de la dependencia tecnológica. Siguiendo adelante me queda por nombrar, un alcalde metropolitano y la presidenta de Movilnet. Por supuesto sin olvidarme nada menos que del Ministro del PP para la Energía y Petróleo y además presidente de Pdvsa. No hace falta mencionar el cúmulo de obligaciones que están en juego en estos dos cargos.
Así están las cosas y por lo visto, todos los antes mencionados están asignados a comisiones que a mi entender necesitan una dedicación casi exclusiva, y el día si acaso tiene 24 horas. Se nos avecinan elecciones de gobernadores y alcaldes y todo el proyecto de socialismo está en juego ante la amenaza latente de perder, no sólo el control político, sino el proyecto de país por el que la mayoría hemos apostado. La derecha malsana y conspirativa no dará tregua y ya no habrá, después de las elecciones, análisis que valga.
Vaya mi alerta sincera y sin mezquindades en torno a este fenómeno que se está presentando, y al cual hay que buscarle una solución pronta ya que para luego es tarde. Hay que delegar y estoy seguro que ese partido cuenta con gente de sobra que quiera llevarnos a la victoria.
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