Pedro Grima, profesor e investigador de la ULA y director del diario Despertar, presenta su análisis sobre el presupuesto que recibe la máxima casa de estudios de Mérida.
(4:27 p.m.) Conversar con el profesor Pedro Grima, es como revisar una gran caja de sorpresas, ya que su formación académica en el campo de la física, poco le permitiría al ciudadano común darse cuenta que su sensibilidad humana la cual le ha llevado a participar en los cambios que hoy día tiene nuestra sociedad venezolana, en especial la merideña.
La asidiosa búsqueda de algo, permitió que el físico Grima se encontrara con algo llamado “presupuesto universitario”, concepto que maneja de manera particular, y opina que el mismo es llevado a la balanza de manera desequilibrada y en su artículo “El eje del mal en Mérida” expone las condiciones actuales en las que se encuentra su círculo de acción dentro de la Universidad de Los Andes.
El análisis que realiza este dinámico investigador le llevó hasta una evolución del aporte del Ejecutivo Nacional al presupuesto universitario de la ULA durante el período del Presidente Chávez (1997-2003), según cifras de la propia Oficina de Presupuesto de Universidad que puede ser consultado en www.adm.ula.ve.
La cronología del presupuesto asignado por el Ejecutivo Nacional para la ULA, el profesor Grima lo divide por segmentos asegurando que lo correspondiente a la protección socio-económica pasa del 33.7% en 1997 a sólo 8.6% en el 2001; las partidas no asignadas a programas pasan del 22.3% en 1997 al 41.1% en 2001 y la correspondiente a la enseñanza disminuyó en el período 97-99, para después remontar a niveles similares con un aumento neto en el período 1997-2001 que apenas superó 6%.
Las conclusiones a las cuales llega el profesor universitario tienen que ver con que la ULA se ha desentendido casi por completo de la Protección Social, que el presupuesto se ha convertido en una “caja negra” en donde casi la mitad, es decir un 41.1 por ciento para el 2001, perteneció a partidas no asignadas a programas, y que a pesar del aumento presupuestario obtenido, la educación se estancó en 1997.y “si no hay protección social y no se invierte en enseñanza ¿en qué se gasta el dinero?
Otro de los aspecto resaltados por Pedro Grima, fue el de la creación de la Universidad Bolivariana de Venezuela. Al respecto afirmó que nadie posee la fórmula mágica para incluir a más de 400 mil bachilleres a sus aulas, pero insistió en la necesidad de buscar el mecanismo para que no queden fuera del sistema de educación superior.
En cuanto a la asignación del presupuesto para la UBV, dijo que es un argumento falso, y resaltó la importancia de las escuelas técnicas asociadas a la Universidad Bolivariana.
