El por qué en Venezuela nunca habrá un verdadero capitalismo

Espejismos

Si un ciudadano del común del tercer mundo va de visita a un país "desarrollado" tal como UK o USA, seguramente va a tener apreciaciones sobre algunos tópicos en los que luego coincidirá conmigo en que son un espejismo. Probablemente tendrá la apreciación de que en estos países la gente es más honesta y menos violenta porque los robos, la delincuencia y sus crímenes no son tan publicitados. También tendrá la agradable sorpresa de que luego de que compre una mercancía se la cambien, la pueda devolver, o incluso le devuelvan el dinero de su compra, por la razón que sea o incluso sin ella, sin que ni siquiera le hagan preguntas (por aquello de que "If you are not 100% satisfied, call us within 30 days and get a full refund, no questions") Es probable que piense que la tienda también es muy honesta y piense que el deshonesto sea usted. No obstante, si examinamos bien la situación, luego de esta lectura, nos daremos cuenta que todo aquello es un espejismo y una burda manipulación del ciudadano de esos países. Esas sociedades no es que siempre fueron así. Ni la tienda ni la sociedad funcionan de esa manera por la naturaleza de su gente, sino que ha sido moldeada, a través de los años de esa manera, por ciertas circunstancias. Tampoco es que no haya delincuentes ni pobres que forzados por el hambre se vean en el trance de robar para comer. Ni es que los capitalistas de allá son benefactores de su sociedad. No!, no son precisamente esas las razones. Son exactamente otras las razones y mucho más perversas.

Tecnología

En esos países las redes de tecnología de vigilancias están al servicio de la seguridad y de la propiedad privada. Por cualquier espacio en donde el ciudadano camine -dentro de una urbe- se puede observar que ese espacio está minado de cámaras de TV desde las cuales una mirada policial atenta le observa y en las que la policía puede seguirlo desde que toma una mercancía en una tienda hasta que llegue a su casa. Y eso lo sabe la gente del común de aquellas sociedades porque el sistema se encarga de pasarle programas por TV en donde los incautos que no sabían son apresados. No obstante, y a pesar de tanta tecnología, con la discreción del caso, las Asociaciones de Comerciantes es común que exijan ingentes cantidades de dinero en compensación por las pérdidas y por robos en tiendas. Es decir la idea de la ley-vigilante personificada en el policía-omnipresente se trata de sembrar persistentemente en el imaginario del común de la población y llevada a su conciencia social reforzada de una manera explícita por la TV. Pero ello, aún cuando es necesario no es suficiente. De hecho hay pérdidas por robo. Falta la característica del policía omnipotente apoyado por la ley que puede, desde dispararle a quema ropa a un individuo bajo la presunción de peligro inminente hasta llevárselo sin ningún tipo de razón. La ley es sumamente "estricta" y para el infractor de a pie no hay ni cámaras, ni micrófonos, ni prensa para que se defienda. La penalización puede ejecutarse el mismo día y en algunos de estos "civilizados" países incluso existe la cadena perpetua repetida o la pena de muerte. Hay sobradas razones para que el ciudadano común se acostumbre a acatar la ley. Y si es el caso que aparezca algún medio tipo RT o TELESUR a denunciar violación a derechos humanos ya se buscarán los medios para silenciarlas. Las penalizaciones por quebrantamiento a la ley del gran poderoso se deciden "civilizadamente" entre los grandes bufetes y los tribunales.

Domesticación

Obviamente, generaciones de ciudadanos naciendo, viendo y viviendo bajo estas circunstancias creará un ciudadano que no es más que un producto social de las circunstancias. Las personas actúan, pues, bajo el conjuro de la ley debido a un sistema que se ha trazado unas metas claras contra el que no cumpla las leyes y las que ese sistema no dudará un instante en ejecutarlas. Y eso la gente del común lo sabe. Por otro lado, si esos países aplican sus leyes a sus ciudadanos no habrá superpotencias amenazándolos con una invasión, ni con bombardeos, ni cortes interamericanas, ni OEAs, ni bombas atómicas, ni golpes de estado, ni coaccionándoles desde una asamblea opositora ni a través de los medios de comunicación en manos de opositores, ni testigos del hecho ni habrá derechos humanos que valgan. Va preso el que ose violentar la ley y el que intente obstruir la captura inmediata del indiciado también lo irá. Sólo lo salvará una de tres opciones "civilizadas". El único que puede defenderlo -estando una vez ya preso- es un abogado pago cuyo emolumento, que tendrá que desembolsarle, será la primera prueba que demostrará que no fue un delito por hambre. Pero si no tiene recursos, el mismo estado le nombrará un defensor que lo primero que le propone es declararse culpable para que la pena no sea doble, o una fianza salvadora que le dejará apenas presupuesto para respirar.

Humanos o bichos?

Por otra parte, su estancia en prisión no será nada grata ni ejemplarizante ni reformante ni nada de esos paradigmas "subdesarrollados". El único camino que le queda al ex presidiario, si es que sale de prisión con alguna fuerza, es el olvido, la discriminación, el desprecio social, la exclusión etc. En prisión no habrá banquetes, ni ONGs de oposición, ni Celulares, ni visitas familiares guiadas, ni cumpleaños en familia, ni patios productivos, ni discotecas los fines de semana, ni trabajo productivo alguno sino dosis idiotizantes de naftalina en cada una de sus comidas, para lentamente menguarle sus resentimientos. Eso sin contar con que hay cárceles en el limbo en donde los presos no son ni siquiera "simples animales en cautiverio" sino que, por un lado, son "animales experimentales objetos de pruebas de tecnologías blandas en la rama de la tortura, de la "doblegación del espíritu humano y del domesticaje " y además sirven de objetos de un circo-vitrina en donde los ciudadanos espectadores de una sociedad domesticada se observen a si mismos y se retraten en esa puesta en escena de la cual pudieran ser actores. Verbigracia: Guantánamo. Las cárceles en el limbo sirven de laboratorios para continuar los experimentos humanos iniciados con los nazis pero en una nueva era tecnológica. Es el pago sin aviso y sin protesto, que una parte de una sociedad "domesticada" desembolsa para disfrutar de una aparente tranquilidad y de una falsa paz social.

La sensación de que todo lo que compre el cliente está garantizado contra todo uso es otra de las ilusiones que te crea el capitalismo. Nada mejor que, si el cliente compra algo, tenga la oportunidad de devolverlo por la razón que fuera. Pero alguien tiene que pagar el morir en el intento. Expliquémoslo:

Real o ficticio?

La mayor de las virtudes del capitalismo es su éxito en la creación de "necesidades" y la satisfacción de las mismas. Pero su Nobel se lo lleva como sistema de una sociedad domesticada en donde su mejor carta es la creación de "necesidades ficticias". Necesidades "Ficticias" que luego se convertirán en "necesidades reales" puesto que te haces dependiente de algo que siempre usas. Dentro de las prioridades esenciales del sistema capitalista está el crearle al individuo y a la sociedad la "sensación de comodidad y bienestar" o, en una palabra, volverlo dependiente de sus favores. Muchas de esas necesidades "creadas" van en contra hasta de la propia salud del individuo y hasta de la salud de la sociedad. Crearle necesidades que le resulten lúdicas y de aparente descanso es una de sus metas esenciales.

El capitalismo ya maduro en sí lo forman una gran familia de empresas que se van desarrollando "aguas abajo", que se tragan al Estado Nacional, privándolo de productos propios, tecnologías o economías propias y hasta de bienes propios, que solo ven en los países y sus estados naciones como "mano de obra" a la que instan a especializarse para que puedan ser enchufados en sus maquilas en aguas internacionales y que se vuelven, con el tiempo, en el así llamado "imperialismo" cuyo ámbito geográfico es "la aldea global". No en vano la pelea por aguas continentales, que aparentemente son de la República Popular China. Ese es el "lomito" del paraíso. Aguas internacionales en el mar de China, con China enfrente, un inmenso manantial de mano de obra para montar sus maquilas en aguas internacionales en donde nadie les puede poner imposiciones. Este engendro está formado por grandes familias de corporaciones transnacionales propiedad del mismo grupo de capitales. Para ese gran grupo familiar capitalista, la meta de producir "necesidades" no solo radica en una tranquilidad del grupo empresarial en sí, sino de la sociedad en donde hace vida -al tener en abundancia todo lo que requiere- pero por sobre todo nace de una necesidad de hacer producir con eficiencia y eficacia a la sociedad para el disfrute del sistema. Esto es muy necesario e importante por cuanto para el gran capital, el vivir en abundancia de una sociedad, sigue siendo una "necesidad esencial" para vivir, valga la redundancia "en capitalismo", dentro del contexto de la felicidad grupal, la paz, el sosiego y el descanso. Pero esa premisa en sí misma genera una contradicción social intrínseca por cuanto para una empresa tener eficiencia con eficacia hace falta la explotación de la sociedad y por supuesto, de refuerzo, debe tener un amenazante ejercito de desempleados.

Adicción o necesidad?

Es común ver que si en una sociedad de consumo intempestivamente falta algún bien material, catalogado por esa sociedad, dentro de su lista de necesidades adquiridas, como ESENCIAL, ya sea en materia de descanso, en la diversión, en bienes personales o de higiene y servicios o en la alimentación, etc. se crea un gran desasosiego social que empieza precisamente en sus células, es decir en el núcleo familiar.

Es importante que en el país en donde hace vida permanente la gran familia de empresas capitalistas se tenga como premisa que haya cierta tranquilidad. El capitalista en su visión más palaciega crea sus mundos artificiales llamados "países desarrollados" en donde los habitantes del común de esas sociedades gozan una aparente vida sosegada (gracias a esa premisa), con ful-garantía sin preguntas o le devolvemos el dinero (A 100-percent , no questions asked money-back garantee, If you are not 100% satisfied, call us within 30 days and get a full refund, no questions).

Pero esa paz y ese sosiego social que disfruta el capitalista en su mundo artificial esconde muchas infamias. Y también malformaciones sociales.

Aproximaciones

En realidad, los capitalistas y sus sociedades de favorecidos de los países 'desarrollados' viven una vida parasitaria totalmente irreal y ficticia a expensas del obrero de los países subdesarrollados en donde realmente viven sus explotados.

Sus grandes capitales, que allí toman el nombre de INVERSORES van a esos otros países que llaman 'subdesarrollados' en donde los capitales son 'invertidos'.

La tragedia empieza imponiendo una relación de cambio ventajosa para el capital foráneo respecto al de las monedas locales. De esa forma las monedas nacionales de las metrópolis de origen del capital "invertido" (llámese USA Dollar, EURO o Sterling Pound) les permiten acceder a muchas horas-hombre por un ínfimo salario -comparado con los salarios que tendrían que pagar los capitalistas si esos mismos capitales estuvieran siendo 'invertidos" en sus metrópolis de origen-. A eso, en los países del tercer mundo, lo llaman "generación de puestos de empleo' mediante la atracción de "Capital foráneo".

Seguidamente, como los bienes primarios se pagan en moneda nacional, le imponen al mismo tiempo por esa vía, un precio insignificante a los recursos materiales del país 'target' o 'subdesarrollado" pues luego de que instalan sus MAQUILAS allí, con su tecnología depredadora del producto del trabajo de los obreros locales en forma de productos elaborados, hechos con las materias primas del mismo país subdesarrollado, esos productos no son vendidos en el mercado local sino que son llevados por el "inversor capitalista" a sus metrópolis desarrolladas como producto de exportación del "target" tercermundista, dejando en el país subdesarrollado, la expoliación, la rapiña, la pobreza, la contaminación, la basura, la miseria y por supuesto dichas cifras de exportación para el orgullo nacional. Es allí donde queda la desgracia que les da placer a las sociedades consumistas del así llamado "primer mundo"

Lógicamente, con esas condiciones reales de producción no pueden dejar el producto del trabajo robado al obrero local en los lugares donde lo generan por cuanto nadie los compraría. Sus explotados no tendrían como comprarlos.

El cumpleaños feliz de los capitalistas: ...Los pasteles para mí la basura para tí...

El mecanismo lo que hace en realidad es separar pobreza de riqueza. Claramente, la riqueza se la llevan para ellos y sus sociedades obnubiladas en los tales países desarrollados y la pobreza la dejan para los trabajadores de los países explotados del tercer mundo en donde tienen sus teatros de operaciones. Esa desgracia del obrero tercermundista le financia, a las sociedades en los países origen del gran capital, una prosperidad artificial que se logra a costa de la pobreza de los creadores de esa misma riqueza. Por supuesto, la golilla de "full guarantee" sin preguntas o le devolvemos el dinero es obvia. Claro, no le van a devolver el dinero a sus clientes si el producto importado desde sus maquilas prácticamente no les ha costado nada.

Ese sosiego, esa prosperidad y esa paz social del común de los individuos que disfrutan allá en los países desarrollados es el producto del sudor explotado al trabajador foráneo en donde fabrican con sus maquilas. Sin percibirlo, las sociedades de los llamados países del primer mundo son convertidos en países en los cuales les resulta natural que los obreros de otros países los alimenten y le hagan la vida fácil.

Pero esa actitud, no debería sorprendernos. Esa es una conducta innata del que termina siendo capitalista originario. En su forma más primitiva, el capitalista iba a su sociedad de origen y explotaba al obrero local, después del proceso productivo le dejaba la pobreza en casa al obrero y se llevaba la riqueza producida por éste a su casa, para que sus hijos vivieran una vida artificial, irreal, imaginaria mientras el hijo del obrero vive en la miseria financiándole la felicidad al explotador.

Modernamente, hoy día, los capitalistas del primer mundo se la aplican y lo hacen con las sociedades de otros países del tercer mundo, porque la necesidad les impone vivir en algún país y quieren que, en ese país-habitad del primer mundo (en donde viven), haya una sociedad tranquila y pacífica que les permita disfrutar en paz de sus robos, la que no promueven en los lugares de origen de su riqueza por cuanto allí no hay circulante para pagar sus altos precios.

El dueño del gran capital le enseñará a su descendencia que el trabajo es bueno mientras lo realice el obrero explotado.

Tratara de crear en su sociedad de origen, cuando mucho, una supra categoría social que es el asalariado especializado y profesional, pero no le dará esa oportunidad a todos, sólo a su descendencia y a una selecta clase pertenecientes a los perpetradores de su sistema de dominación.

Formara así una "clase" llamada "media o intermedia" idiotizada, esperanzada y cómplice de sus fechorías laborales que colaborará en la expoliación del producto del trabajo ajeno, que pedirá por su trabajo 'intelectual" mayor remuneración que la del obrero, real creador de la riqueza y al que considerará su inferior.

Esa es la forma como tiene éxito el capitalismo global. De otra forma, más allá de su tecnología y de sus maquilas en aguas internacionales, le sería muy cuesta arriba generar riqueza en paz por cuanto generaría contradicciones insalvables en su propia sociedad.

Nunca significa nunca

El capitalista venezolano, en una primera aproximación, ve al país venezolano como lo ve el capitalista explotador foráneo. Es decir un país para explotar y llevarse su capital a USA, a Europa o a cualquier otro centro de poder mundial. Pero el capitalista venezolano es peor que eso porque ni siquiera produce. Y SI ES QUE LO HACE ni siquiera quiere llevarse el producto elaborado sino que quiere robar a la sociedad mediante el sistema de la ESPECULACIÓN desmedida del 10 mil por ciento -y por el de la inflación inducida- que no tiene referentes más que sus agallas. Luego quiere que por el pequeño aporte que da al estado, el gobierno, que es el administrador de los bienes del estado, le CAMBIE ese producto robado, porque no tiene su origen sino en el robo, por los dólares de todos los venezolanos que se reciben por las ventas del petróleo. Obviamente ese dinero es otro producto de la expoliación mundial, porque es que la explotación petrolera genera una cadena de explotadores que termina en el "de a pie" y esa explotación también tiene una "cadena de titularidad" cuyo último propietario es el Estado Venezolano. El empresario venezolano nunca traerá el producto de su explotación foránea al país. He allí la razón por la cual nunca habrá un verdadero capitalismo, por lo menos a la manera de los países del primer mundo.



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José Cristóbal Valera Pérez

Ingeniero electricista. Profesor del Departamento de Física.Ciencias ULA Fundador de la Web ¨Chávez Ahora¨Fundador del Circulo Bolivariano de UK Miembro de los Círculos Bolivarianos Europeos.

 valerajo@gmail.com      @valerajoula.ve

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