Todos recordamos con nostalgia y admiración a ese gran líder que fue Nelson Mandela. Su lucha contra el Apartheid o segregación racial en Sudáfrica, le valió un lugar privilegiado en la historia de la humanidad que nadie podrá enlodar. Aun cuando el capitalismo y los seudolideres de ese entonces, cuando recupero su libertad luego de 27 años de digna cárcel, intentaron seducirlo a sus bajezas imperialistas y sacar partido de fotografiarse a su lado o hacerle invitaciones a países, que todos sabemos que siempre fueron cómplices de los asesinatos atroces que se dieron en esa época en ese país africano. Pero fue un hombre cocido en los crisoles de la dignidad y su incondicional amor por lo mejor de la humanidad.
Aquí en Venezuela tenemos innumerables casos de "Cárcel Digna". Desde el Generalísimo Francisco de Miranda, hasta los años de cárcel de Chávez y los compatriotas que participaron en el 4 de Febrero de 1992.
Recientemente y a raíz de los sucesos del 12 de Febrero de 2014, que los anti patria dieron por llamar "La Salida" se han venido fomentando una serie de ilegitimas comparaciones de ese gran líder que fue Mandela, con uno de los cabecillas de la salida como lo es el señor Leopoldo.
Hay que estar realmente loco o ser un ignorante tarifado, para atreverse a siquiera pensar que pueda haber alguna similitud, semejanza o parecido entre Mandela y Leopoldo. Es, a mi entender, una de las ideas más desquiciadas que se le ha podido ocurrir a los opositores al gobierno de la revolución Bolivariana.
Ahora, lo que sí es posible, es que Leopoldo a través de 27 años de meditación, contados a partir de 2015 y en el sobre entendido que este año que paso preso, ya lo perdió por que por sus declaraciones y posturas sabemos que no ha evolucionado en nada, pueda alcanzar un grado de meditación tal que le permita a su conciencia soportarlo a él.
VIVA Chávez, VIVA MADURO.
NO PODEMOS OPTAR ENTRE VENCER O MORIR, NECESARIO ES VENCER.
