A estas alturas de la revolución bolivariana y todavía tenemos que pensar cómo ganaremos unas elecciones, ya sea para presidente, para gobernadores o las próximas para alcaldes y concejales. Todo producto de que no estábamos preparados para gobernar y peor aún que no tenemos formación ideológica revolucionaria, ni socialista luego que nuestro recordado Hugo Chávez definiera ese rumbo. Primeroen su mente y luego en acciones siendo que la mayoría de sus colaboradores ni idea tenían de lo propuesto. Colocó a profesionales en los cargos de ministros y presidentes de instituciones, así como directivas completas, ajenos a la brillante visión de Chávez y eran simples ejecutores de tareas, que algunos tampoco sabían realizar.
Y venía la cambiadera y nada que mejorábamos; y venían elecciones de gobernadores y surgían “fenómenos” que resultaron fraudes políticos y traidores y las alcaldías y fracasaban igual, salvo uno que otro que estaba en sintonía con Chávez y al manos estaban pendientes de sus mensajes viendo los Aló Presidente, mejor aula no había. Pero muchos flojos, sin espíritus revolucionarios en formación, en aprendizaje, tal como simples escuálidos manifestaban que esos, para nosotros valiosos, programas eran muy largos y fastidiosos. Este estúpido criterio lo tenían funcionarios de niveles medios y altos en muchos organismos a quienes se los reclamamos diciéndoles que así no comprenderíancuál ruta era propuesta cada semana, creando socialismo, debíamos seguir. Peor con los que tenían, y tienen, su corazoncito cuartorepublicano. Casi al final de su vida logró el Líder configurar unos equipos políticos y gubernamentales que se aproximaran a sus esquemas visionarios y a sus interesantes y asentados planes nacionales.
Entonces compatriotas el problema siempre ha sido la falta de formación personal en cuanto al proceso revolucionario, ahora al socialismo, es la formación ideológica y la cultural en general. Con contadas excepciones no tenemos dirigentes, ni en funciones de gobierno con sólida formación ideológica, que a veces se confunde porque se expresan con frases estereotipadas que para afianzar sus discursos con fuerza recurren a nombrar a Chávez. “Chávez vive la lucha sigue”
Ese es el gran problema que a estas alturas de la revolución nos tiene sin cumplir muchas obligaciones con el pueblo, con marcada sensación de falla en las alcaldías ya que alcaldes, y concejales, sin formación de ningún tipo, cargados de cuarta república, corrupción incluida, sin darle poder al pueblo para su revolucionario desarrollo con protagonismo, además no cumplen sus funciones con eficiencia, que es lo menos que se debe esperar y exigir para ganar sin dificultad cualquier elección. Por el contrario aun los años de revolución, y aunque usted no lo crea, estamos a punto de perder muchas alcaldías, más que ahora no tienen la ayuda del portaviones Chávez, por más que Maduro se ha esforzado.
Compartimos algunos criterios que hemos leído de que, incluso a escasos meses, si atacamos los problemas municipales que afectan a todos, entiéndase recolección de basura, limpieza y ornato de calles (con el empoderamiento popular), reparación de vialidades importantes por ser las de mayor impacto diario (buenos bacheos); policías en avenidas y a pie, recorriéndolas, bajados de las patrullas y motos, ya que por lo que he visto y me cuentan en el área metropolitana de Barcelona a Puerto La Cruz no se observan, y permite que chamosmalandros atraquen directo solo con mostrar un arma: y dame tu cartera, el celular, etc.. Y es permanente. Y no se ve un policía.
Y proveniente del nivel nacional urge una estrategia de cómo distribuir los alimentos y el papel tualé de manera que elimine las fatigables colas. Hay un gran esfuerzo por la distribución pero no exitoso y es motivo de disgustos y molestias en todas partes y unido a las deficiencias callejeras, la ida de la luz, debe ser interpretada como votos menos a favor de nuestros candidatos a alcaldes y perdida segura de las Alcaldías.De paso que hemos observado propagandas de algunos de nuestros candidatos con una página a todo color en el más importante diario de esta zona, que su costo no baja de 120 millones de bolívares. O salen de las finanzas del partido, o son contribuciones de contratistas que en todos los casos genera compromisos para futuras contrataciones y comisiones por la estrecha vinculación entre el que recibe y el que da.
