¿Qué Hacer luego del 6D?

Las siguientes horas darán paso a debates, discusiones, o tan sólo momentos para expresar la tristeza, rabia e incomprensión de lo ocurrido. Yo también lo siento; siento rabia, tristeza y aún me queda mucho tiempo para preguntas. Sólo que escojo escribir las primeras reflexiones y dar mi parte al debate necesario. Este es mi decálogo de cómo afrontar este primer tiempo.

  • Primero: Asumir y dar la cara, perdimos y de manera importante. Enfrentar la derrota como acto de conexión profunda con una realidad que no debe sobredimensionarse pero que ahora el peligro es que la minimicemos. Es la derrota más importante que ha sufrido las fuerzas chavistas y dar la cara ante ella, es el primer paso para que no haya una derrota más.

  • Segundo: Afrontar responsabilidades, aún cuando todavía no tengamos claro el porqué, aún cuando no las veamos, aún cuando nos auto-excluyamos de ella, aún cuando estemos convencidos que fue otro el culpable, en todos esos casos, hay que asumir responsabilidades. La derrota electoral que sufrimos no puede ser huérfana. Y erigirse ante ella exige un "Soy responsable". "Ejemplo de Chávez un 4 de Febrero de 1992"

  • Tercero: Tener claro la nueva correlación de fuerzas. El primer balance indica que sufrimos un revés en importantes zonas que habían sido favorable a las fuerzas del Chavismo en los últimos 17 años. Se perdieron verdaderos bastiones. Y al momento de estas líneas no se ha definido si oposición alcanzará mayoría calificada de 3/5 partes o 2/3 partes de los miembros de la Asamblea Nacional. El nuevo mapa de correlación de fuerzas y los inmediatos escenarios a futuro dependen de ello. Pero si podemos adelantar que requerimos reconocer que existe un amplio sector opositor, un pueblo que nos adversa, y que hoy ganó la mayoría de la AN. Es hora de dejar a un lado los calificativos que impiden vernos, reconocernos y aceptarnos, allí comienza la claridad de nuestro balance.

  • Cuarto: No culpar al Pueblo. Bajo ninguna razón, pero es que no cometamos el error de salir a despreciar al soberano que ha dado fe, lucha y el sentido a la Revolución Bolivariana. Chávez nos enseño y recalco que si el Pueblo se expresó, hay que saber comprender su mensaje. Y eso no lo lograremos desde posiciones altisonantes que lo vean culpable de no apoyar irrestrictamente a la Revolución. Yo me iría a comprender que pasó en cada mesa electoral, evaluar cada resultado, pero no sólo eso, sino lograr un espacio de confidencia con aquel que había creído permanentemente en nosotros, y ahora no lo hizo. Y ojo ese "aquel" asumamos que debemos volverlo de nuevo un "nosotros".

  • Quinto: Ratificar que el proyecto es el de la Revolución Bolivariana, Socialista, Anti-Imperialista y profundamente Chavista. Seguro haremos las revisiones, todas las que sean necesarias, pero bajo un claro e inequívoco eje, la Revolución.

  • Sexto: Cuidar la Patria. Es un deber, es esencia de la Revolución. Anteponer cualquier visión personal a lo que siempre debe ser el centro de nuestra preocupación, nuestro país. Lo que se haga, lo que deba hacerse, lo que exija hacerse, deberá primero priorizar el lugar de la Patria. Inclusive cuando nuestras ideas o más profundas creencias entren en conflicto, antepongamos a Venezuela.

  • Séptimo: Hacer la necesaria y más dura revisión. Revisión crítica, auto-critica, dura, descarnada. Pero siempre honesta y sin emplearla para querer facturar contra otros. No se trata de irnos a terapia y terminar golpeándonos el pecho, tampoco quedarnos en la capa barnizada eludiendo profundidades. Prepararnos para escuchar las más duras afirmaciones de nuestros compatriotas y hacerlo sin molestarse, sin descalificar al otro, sin denominar traidor a quien me señale aunque me parezca totalmente injusta su acusación. Entender que seguramente al principio será el argumento ad-hominem pero luego daremos paso a verdaderas razones. Por ello requerimos un método, un método que oriente la revisión dura y profunda para evitar afanes destructivos, para evitarnos nuestro extraño sentido auto-destructivo que nos lleva al peor lado de la revisión porque a la final termina asumiendo que todo está mal y te ciega de lo que es verdaderamente necesario ver. El método lo dejó Chávez, las 3R al cuadrado. "Por eso es que yo digo que las tres R al cuadrado tiene un sentido: Revisión, Rectificación y Reimpulso. Pero por qué al cuadrado: porque dentro de esas tres R hay otras R, o más allá de ellas hay otras: Recuperar, Repolarizar, Repolitizar. Por eso digo al cuadrado, 3R al cuadrado". Hugo Chávez en primer encuentro con diputadas y diputados electos del PSUV. Teatro Teresa Carreño. 02 de octubre de 2010.

  • Octavo: Decretar la Emergencia Política, para convocar a todos (as). Es momento de tener claro que la historia deja enseñanzas y las que nos viene es que una fuerza contraria a nosotros, que ha estado al margen del poder político los últimos 17 años no dudará en aprovechar estas circunstancias para cortar de raíz lo que ellos consideran que es un error en nuestra historia. Una fuerza interna y una gran fuerza externa con un mapa geopolítico que amerita sumo cuidado. Así que se requiere llamar a la "emergencia política" de la Revolución Bolivariana.

  • Noveno: Ir a la ofensiva revolucionaria. Preparar avanzada en todos los ámbitos necesarios. Desde la siempre requerida "conciencia política" y organización adecuada para prepararnos para los siguientes tiempos. Ir a la ofensiva de gobierno en la calle, ahora para escuchar y evaluar. Hasta pensar la posibilidad de adelantar y dar el perfil más adecuado a lo que serán iniciativas que el sector oposición querrá llevar a cabo. ¿Por qué no interpelarnos antes?, ¿Por qué no ahondar en una auditoria pública a todos los que hemos tenido y tenemos responsabilidades en la administración pública?

  • Decimo: La economía. Es más que urgente, es momento para hacer antes que se nos deteriore más la situación económica nacional. Es una profunda responsabilidad que sean las fuerzas chavistas, el gobierno de la Revolución Bolivariana quienes planteemos la difícil superación de los desequilibrios socio-económicos. Al respecto debemos afrontar cinco (5) retos, fallas o problemas claves (luego en otro artículo profundizaremos). Estos son:

    • El reto de una visión estratégica de lo económico que en el marco de la concepción ideológica que ha venido construyendo la Revolución Bolivariana, asuma ahora la nueva correlación de fuerzas. La dura realidad del mercado petrolero internacional, la valoración de nuestras debilidades estructurales. La evidencia del agotamiento definitivo del capitalismo rentístico y de cualquier modalidad "rentística" de organizar los arreglos sociales. Una visión estratégica que no tenga miedo de revisarnos. Actualizar el modelo que hemos venido construyendo. Para ello hagamos urgente convocatoria nacional al debate, a la discusión amplia de las fuerzas del chavismo.

    • El reto del liderazgo y direccionalidad de la visión estratégica que llevemos adelante.

    • El reto de la coordinación al interior del Estado de las decisiones que sean aprobadas.

    • El reto de la implementación adecuada.

    • El reto de la supervisión y evaluación inmediata necesaria.

 

Para cerrar: Que la rabia y tristeza no nos obnubile, nos acabamos de caer pero la fortaleza es tener la capacidad de levantarnos y proseguir. Seguro muchos pedirán actos de contrición, seguro muchos exigirán cuentas, seguro muchos querrán que desfilen los que consideran "mayores responsables". Pero yo no quiero enfrascarme en un "todos contra todos". Pero evitar esta trampa exige una dirección política ampliada de la Revolución que evidencie disposición y contribuya al debate profundo.



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Juan Carlos Loyo Hernández

Economista. Sólo un militante. Profesor de la Universidad Bolivariana de Venezuela (UBV). Del Programa de Formación de Grado "Economía Política"

 jcloyo@gmail.com

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