13 sept. 2019 - Ante los falsos positivos generados por el gobierno de Iván Duque contra Venezuela, Diario VEA entrevistó a William Izarra, comandante (en situación de reserva) de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB).

Aseguró que los hechos históricos, entre ellos el conflicto de Los Monjes en 1952 y el caso de la corbeta Caldas el 9 de agosto de 1987, “nos permiten proyectar una derrota contundente a las posibles agresiones colombianas, si quisieran concretarlas”.

-¿Qué tan grave es la situación a la que usted hizo referencia en un mensaje publicado en su cuenta @williameizarra, donde asegura que “la situación es más seria de lo que creemos”, al referirse a la convocatoria que el lunes hizo el presidente Nicolás Maduro al Consejo de Defensa de la Nación? Dijo usted que “El Presidente sigue en sus funciones, pero decidiendo en colectivo dentro del Consejo”.

Antes que todo, hay que precisar que la información a la que tengo acceso es la que se publica abiertamente en los medios nacionales e internacionales y a las manifestaciones de las redes sociales.

Quiero decir con esto, que no manejo información de los entes del Estado que procesan inteligencia ni la que posee el presidente Nicolás Maduro Moros o el gobierno.

Por lo tanto, tengo que apelar a mi juicio fundamentado en el marco de referencia conceptual que me he formado.

Considero que uno de los puntos de la declaración que hizo la noche del lunes 9 de septiembre el presidente Maduro, fue para mí la clave de la naturaleza grave de la situación.

El Presidente expresó: “He entregado, como jefe de Estado, al Consejo de Defensa de la Nación, la conducción colectiva como máxima instancia del Estado de esta coyuntura de amenaza real”.

Expresión que me lleva a sentenciar que, más allá de lo que se sabe públicamente, hay otros factores no visibles que impiden la formulación de un diagnóstico más cercano a la realidad verdadera.

-Tomando en cuenta los últimos 20 años de Revolución Bolivariana, ¿estamos en condiciones de responder y repeler tales agresiones?

-Si asumimos como muestra inequívoca de lo que podría suceder en caso de una agresión armada contra Venezuela por parte de Colombia, como lo fueron:

(I) El conflicto de Los Monjes en 1952, cuya respuesta categórica y aplastante de Marcos Pérez Jiménez hizo retroceder al gobierno colombiano en su intención de apropiarse de esos islotes;

(II) El caso de la corbeta Caldas el 9 de agosto de 1987, como una operación premeditada al entrar en aguas jurisdiccionales venezolanas, para definir a favor de Colombia la tesis de la línea media en la delimitación de aguas marinas y submarinas, sin lograrlo, ya que fue rechazada con firmeza y demostración de poder de fuego por la Armada Venezolana, digo que estas dos muestras de hechos concretos, nos permiten proyectar una derrota contundente a las posibles agresiones colombianas si quisieran concretarlas hoy, a 20 años de la Revolución Bolivariana.

Debemos considerar que, además de los hechos históricos recientes, con la Revolución Bolivariana se han logrado consolidar los siguientes factores que elevan las condiciones superiores de confrontación militar:

(III) Se han incrementado los sistemas de armas de última generación en todos los componentes de la FANB;

(IV) Ha surgido una Milicia Bolivariana que, además de contar al día de hoy con 2.800.000 milicianos (cada miliciano un fusil), es un cuerpo de elevado espíritu que incide en una moral sustentada en la ideología bolivariana y la energía transformadora hacia un nuevo modo de vida;

(V) Se ha ampliado exponencialmente el dominio tecnológico por parte de los efectivos de la FANB;

(VI) Se posee una nueva doctrina de empleo de la FANB, sustentada en la unión cívico-militar, lo que hace que el binomio FANB-Pueblo fusione su poderío para operar como un solo ser, individuo o componente;

(VII) Ha crecido el nivel académico y preparación intelectual de los efectivos militares cuyas relaciones internacionales, vínculos técnicos y conocimientos especializados logrados con países como China, Rusia, Irán; además de los que se traen como herencia cultural desde años atrás con los países europeos, EEUU y latinoamericanos, le permiten a la FANB de hoy, revolucionarias, bolivarianas y chavistas, equipararse con las fuerzas militares de los países más avanzados del mundo.

Esta condición hace a la FANB quedar en condiciones de superioridad para repeler y batir a fuerzas intrusas que pretendan posesionarse del territorio nacional.

-¿Qué opinión le merece el trabajo de falso positivo de la revista Semana en contra de Venezuela, específicamente contra la FANB?

-Ese trabajo es parte del conjunto de actos que constituyen la matriz de opinión mundial de los medios que operan como franquicia de las corporaciones transnacionales de la información.

Hoy destaca esa información, señalada y demostrada por el gobierno de Venezuela que es un fake news, o noticia falsa, por coincidir con la decisión del gobierno colombiano de agredir a Venezuela y disponer de un operativo militar para confrontarse con las fuerzas militares venezolanas.

Tanto esta noticia falsa como el dispositivo militar en la frontera para atacar a Venezuela, son engranajes que buscan tumbar al gobierno del presidente Nicolás Maduro, liquidar al chavismo e impedir que se consolide la Revolución Bolivariana, para crear un nuevo modo de vida sustentado en el Socialismo Bolivariano.

Gobierno, Fuerza Armada, diplomacia y moral revolucionaria, están en modo “listo” para seguir venciendo a los oponentes agresores que busquen liquidar a la Revolución Bolivariana y a sus ideas emancipadoras en el siglo XXI.

–¿Qué debemos hacer, reforzar la frontera, activar todos los dispositivos de respuesta ante estos casos, o acudir a más diplomacia?

-Ambas referencias que me sugiere la pregunta (reforzar la frontera y más diplomacia) están vigentes, se están desarrollando ahora mismo.

Los ejercicios que se han activado en la frontera desde este martes 10 hasta el 28 de septiembre, ya es una acción de refuerzo y presencia física del poder militar venezolano.

Pero esa presencia no fenece con los ejercicios; a estos, le sucederán otros y nuevos entrenamientos que siempre estarán estimulando la perpetuidad presencial de la FANB en los espacios fronterizos.

Por su lado, la diplomacia no se ha estancado ni adormecido.

Chávez le dio una importancia especial a las relaciones internacionales y su tratamiento diplomático, desde que era candidato a la Presidencia en 1998.

Ese ímpetu por una diplomacia exitosa se la transmitió a su último canciller, Nicolás Maduro, hoy presidente, quien la ha continuado y le ha incorporado elementos novedosos y modernos para sostener que por vía de la diplomacia venezolana y su Revolución, nuestro país está presente en todos los países del mundo y en la conciencia de sus habitantes.

La diplomacia ha logrado atenuar la agresividad que el mundo occidental ha colocado como matriz internacional en la opinión mundial.

Por vía de la diplomacia se ha conseguido contener los actos desestabilizadores que buscan aniquilar a la Revolución Bolivariana.

La diplomacia ha permitido que todo el mundo conozca las realidades del imperio de EEUU en sus actos permanentes de violación al derecho internacional.

Si eso ha sido en estos 20 años de Revolución Bolivariana, en proceso de construcción, ahora ante la situación prebélica que ha generado el gobierno de Colombia y con más experiencia mundial en esta área, la diplomacia activará mecanismos para crear situaciones que armonicen y equilibren la postura guerrerista que propician desde Colombia.

-Ante la Alerta Naranja, ¿habrá que hacer otro alerta?

-Cada situación de alerta tiene otro nivel similar, de mayor o más baja intensidad, una vez agotado el período que generó esa condición.

Las alertas constituyen etapas de aproximación, prevención y resguardo, previas al acto de inicio de las hostilidades; estas ocurren y por lo tanto desaparecen las alertas, cuando se ordena la ejecución de las operaciones bélicas al señalar el día “D” y la hora “H”. Mientras no se dé el día “D”, siempre se estará cumpliendo una etapa de alerta si se han detectado posibles agresiones por parte del adversario.

–En toda esta situación, ¿cómo será nuestra respuesta ante los distintos factores colombianos, entre ellos, su ejército, la guerrilla, paramilitares y los paracos?

-La población venezolana debe aprehender para sí, la seguridad de respuesta que dará nuestra FANB, si se originan acciones de ataque militar por parte de las fuerzas militares colombianas o de constitución multinacional.

A mi juicio, entran en el concepto de agresión militar, las incursiones paramilitares que violen la soberanía nacional estando dentro o fuera de nuestro territorio.

También considero que, a diferencia de ejército o fuerzas militares colombianas, que constituyen los factores del plan militar de ataque a Venezuela, los grupos revolucionarios que asumen el foquismo, lucha armada o lucha popular para la toma del poder, se hallan en una dimensión humana muy diferente a las de los agresores.

Razón por la que descarto que sus acciones de lucha, de reivindicación social y política.