Leemos la carta de una madre palestina en la que intenta responder a su hija sobre la situación en Gaza. Esta mujer se levanta para ir al Pediatra y de repente siente que ella y su gente son víctimas de un bombardeo ordenado por el gobierno israelí.

Su hija le pide una descripción de lo que está sucediendo; y ella escribe llena de dolor: “Ella se empeña en pedirme que le describa a las víctimas, que le describa las atrocidades que veo; pero no puedo. ¿Qué debo decirle? ¿Que por todas partes veo cuerpos convertidos en trozos de carne chamuscada?”.

Es el resultado del ataque de un demente criminal que ha dicho que por cada israelí muerto deben morir quinientos palestinos. ¿Se puede considerar humano a un ser que pronuncie algo así? Uno busca palabras para describir esta acción del gobierno israelí contra el pueblo palestino, y no las encuentra. Es tanto el crimen, es tanta la maldad acumulada y expresada, es tanto el horror desatado por el Estado Sionista de Israel que no se puede describir.

Entendemos que esta mujer palestina vive el horror de una ciudadana convertida en víctima del horror impuesto por mentes criminales.

Es una mujer que nada tiene que ver con los combatientes palestinos, pero el gobierno de Israel está bombardeando a inocentes; según estos criminales en las mezquitas, en las escuelas, en los hospitales, etc; donde hay mujeres, niños y ancianos, pueden estar escondidas bombas y militantes de Hamas. Por lo tanto, hay que acabar con todo.

Situación que nos recuerda a sus cómplices, los gobernantes de los Estados Unidos, quienes durante la guerra contra Vietnam acababan a pueblos enteros con bombas napalm y bombas terrestres, sólo porque entre el pueblo podían estar los revolucionarios vietnamitas.

También recordamos que muchos de aquellos soldados gringos se suicidaron, enloquecieron, terminaron como piltrafas humanas ante semejante barbarie; por lo que hoy no horroriza ver como los soldados israelís no tienen una reacción contra la masacre que les ordenan ejecutar. ¿O sí hay reacciones pero los medios lo ocultan?

No podemos negarnos a esa posibilidad, pues hoy se intenta ocultar al mundo las imágenes de horror que se dan en Gaza; sólo la existencia de cadenas internacionales no controladas por los Estados Unidos ni el Reino Unido ha permitido que se conozca la carnicería ejecutada por el gobierno de Israel.

Bajo esta desinformación que en el caso de los Estados Unidos está funcionando, el recién electo Presidente Obama se hace de la vista gorda ante semejante matanza. No dice nada, y pareciera que la mayoría de los norteamericanos aceptaran este silencio cómplice como algo normal.

¡Paren la matanza! Es el grito nuestro, quizás un grito impotente, pues no tenemos a mano otro recurso contra la matanza que se da en Gaza; salvo acompañar la soberana decisión del Presidente Chávez de expulsar al embajador israelí del país; y desear que otros Jefes de Estado asuman posturas similares, pues no sólo con discursos se le puede seguir diciendo a los criminales que gobiernan Israel que la mayoría del mundo los repudia, hay que hacer algo más.

En nuestro país se espera de un movimiento solidario que vaya más allá de las diferencias políticas internas; pero no es así, antiguos militantes de la solidaridad internacional prefieren callar ante la matanza para no coincidir con la postura del Presidente Chávez.

Duele pensar que las diferencias políticas internas, convierta a estos pompeyosmarquez, teodorospetkoff, pablosmedina y otros de la misma especie en silenciosos cómplices del criminal sionismo israelí.

¿O es que sus posturas anteriores fueron de la boca para afuera? A lo mejor, quizás en el fondo fueron admiradores de Hitler.



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