¡Saludos revolucionarios, camaradas! Soy reiterativo con este tema que nos afecta y duele a todos los revolucionarios, buscando un lector, como la ministra, que analice sí tiene alguna lógica. Por favor me disculpan. 

También lo repito a raíz  de estarse celebrando la Semana de la “Artillería del pensamiento” (parte de una frase del Libertador) con el Día del Periodista el 27 junio. Disfrutamos de una Charla de Roberto Malaver en la Sala Cultural de Pdvsa de Pto. La Cruz, tuve la oportunidad de comentarle, con humor, que me sustituyó como columnista de opinión en EL TIEMPO y Earle Herrera al compatriota Santiago Suárez Avendaño.  

Ambos teníamos más de 20 años allí (22 y 24 respectivamente) y gratuitamente, simplemente como colaboradores. Ah… pero aprovechando ser voces críticas, tratando de ser didácticos y orientadores. En mi caso muchos se extrañaban que no me hubieran sacado antes, siendo de los pocos que escribíamos a favor de Chávez y de la Revolución Bonita. 

Roberto agregó que cuando recibieron la invitación de ese periódico de fuerte oposición se preguntaron qué querrían y, sin embargo, se decidieron a echarle pichón. Salen todas las semanas.  

Le expliqué que nuestra salida se debió a que, dentro de otras defensas permanentes, lo hacíamos por el gobierno de Tarek, que por la lucha en contra de la poca información de la acción de su gobierno no les envió más publicidad y los descarga en su programa televisivo.  

En lo personal Tarek también me desplazó del panorama revolucionario, al extremo de que conociéndome todos como un buen chavista se extrañan de cómo un ingeniero experimentado no colabora con un gobierno al que le falta ese apoyo y tiene algunos con debilidad ideológica. ¡Misterios de la ciencia!  

Volviendo a la Artillería tuve la deferencia por parte del la Oficina de Información Oriental del Minci de charlar sobre “Bolívar periodista”, asunto que me produjo doble satisfacción porque fue en el Auditorio del INCES, edificio donde participé en su construcción como ingeniero Inspector, y aquí va la cédula, en 1974. Recién había llegado a Pto la Cruz, huyendo del tránsito caraqueño. Y que por la desplanificación de la IV, y de la nuestra, también está insoportable. 

A continuación se presentó un conferencista dinámico, el joven periodista Harim Rodríguez, en representación del Movimiento por el Periodismo Necesario. Movimiento que busca rescatar lo noble del periodismo y con nuestra artillería ganarle a la pesada artillería de la oposición, que nos tiene fregados. 

Mencionó las propuestas de reforma  a la Ley de Ejercicio del Periodismo (LEP). El qué hacer con el CNP y la obligatoria incorporación de los comunicadores alternativos, etc. Se logró, simpáticamente, una polémica participación. 

La más dura: más que buscar otra Asociación ganar el actual CNP, especialmente en los estados, ya que en Caracas es muy fuerte.

Esto podría lograrse, pero…, el pero de siempre, ¿por cuánto tiempo? ya que ha aumentado el número de escuelas de Comunicación Social en las universidades privadas.  

Y cuando se hagan profesionales -que según una licenciada de la USM de un grupo de 85 alumnos, 5 eran chavistas- entonces el CNP estaría nuevamente dominado por el fortín de la artillería pesada de la oposición. Y, nada menos, que con la grandiosa “santabárbara” de los medios de comunicación-partidos políticos transnacionales.  

Se podría pensar, en el supuesto de que ganáramos el actual CNP, que junto a la nueva LEP, mejor dicho, de la Comunicación Social, que incorporaría a todos los comunicadores alternativos, pudiésemos compensar el desequilibrio electoral. 

Estimo que pasa a ser un asunto de matemáticas. 

La otra sería, suena a utopía del pensamiento, reglamentar el pensum y evaluar la marcha de la transmisión de la información. ¿Exceso de controles? ¿Autonomía de cátedras?   

En cualquier caso, debemos estar bien claros que lo que está y estará por mucho tiempo activa es una lucha conceptual de maneras de vivir. Capitalismo (salvaje, imperialismo) Vs. Socialismo (del siglo XXI, a la venezolana)  

Grupos irreconciliables. Dura lucha. Artillerías pesadas del pensamiento, de lado y lado disparando. Y nosotros en eterna desventaja, perdiendo esta guerra de cuarta generación. 

Mientras estos cambios ocurren voy a insistir en algunas medidas, ya sugeridas en otros artículos, pero ahora, de forma más directa, a la ministra Eckout; como, humildemente, me permito proponerle al camarada ministr@ de una determinada área.  

Antes, las preguntas de siempre:

¿Vamos o no a combatir de una vez por todas a la mass media opositora?

¿O seguiremos llevando la angustiosa leña terrorista que hace cuesta arriba la revolución?

¿Existe CONATEL? ¿Qué hace? ¿Cuándo actúa? 

En política, la falla permanente de todos los gobiernos es la mediática. Por supuesto, era menos cuando los medios eran parte conchupáncica de los gobiernos de la IV.  

La sociedad, y sus fuerzas dañinas, a través de sus medios de comunicación, han venido trasculturando al venezolano. Ya no somos tan auténticos. Dirán que tiene que ser así porque estamos en la globalización. Pero hemos perdido nuestros valores tradicionales por aculturación.  

Ahora, y para variar, la oposición de manera agresiva y organizada tiene una destructiva acción mediática contra la Revolución, contra Chávez.  

Ojo, es contra todos nosotros, contra nuestros hijos y nietos. Contra sus futuros, que es nada menos que el de la Patria que necesitamos y que con grandes esfuerzos estamos “tratando de construir”. No podemos dejar que nos la pateen. 

Por otra parte, no ha sido posible organizar y promover una política comunicacional coherente y efectiva. El presidente Chávez está súper consciente de ello y sumamente preocupado. Todos estamos preocupados y, además, arrechos. 

Estamos inmersos hasta el cuello en una guerra de cuarta generación. Eminentemente mediática. Que es doblemente perversa: es de cuarta y de la cuarta.  

La oposición apátrida, que es lo mismo, está guapa y apoyada. Grandes inversiones internacionales quieren detener y acabar con el proceso revolucionario y, por encima de todo, esforzándose en sacar a Chávez. Hasta asesinándolo. 

Constituye, nada más y nada menos, que estamos actuando por un firme propósito, un proyecto, que es la posible reduzca al capitalismo, que se suicidó y muere lentamente. 

¿Nos habremos dado cuenta todos en qué lío, mejor dicho, en qué peo estamos metidos? ¿Hemos medido las consecuencias que representa esa gran debacle para los Estados Unidos de Norteamérica y de todos su aliados comerciales, bien sean gobiernos o el universo comercial consumista que ellos representan? 

El gobierno Osamista está claro que no es un simple asunto de mejorar unas relaciones políticas con Chávez, con Venezuela.  

Por vez primera están ante alguien que, despertando a la América, y a todo el Tercer Mundo, está contribuyendo a la destrucción de su destructivo sistema, valga la redundancia, que nos perturba a todos.  

Que se corresponde con su manera de pensar y de vivir y, sobretodo, de dominar.  

Ellos que han usado bombas de destrucción para acabar con pueblos enteros; ellos que han invadido quitando y poniendo presidentes; ellos que destruyen valores humanos universales con su bombardeo mediático-consumista; ellos que quieren ponerle la manos a las riquezas naturales de todos (petróleo, pulmones naturales, agua, etc.); ellos que actúa junto a los de acá que van perdiendo privilegios ¿qué no están haciendo para acabar con quien progresivamente los está minando? Para acabar con Chávez.  

Por más que por nuestros canales de Tv. y las pocas emisoras de radio y periódicos que nos acompañan, y las valiosas cadenas, difundan la magnitud de la obra -que a veces no es del todo representativa ante tantos problemas acumulados por tanta desidia del pasado- ni por más didáctico e informativo que sea el Aló Presidente, ahora el Teórico, la acción de gobierno se diluye con la sucia acción mediática de la oposición integral. Universal. Que cumple con su tarea. 

Nos están ganando la batalla mediática con su terrorismo y su desinformación masificada. Con sus mentiras. 

Bien. Por mi angustia, la del Presidente, y la de todos, aunque es sólo para que analice su viabilidad, someto a su consideración algunas propuestas para combatirlos.

Que además estimo fundamentales para librar la marcha que debe ser acertada y acelerada, a mi manera de ver, hacia las elecciones de la AN. 

Hay que actuar decididamente salgan sapos o salgan ranas por las supuestas violaciones a la libertad de expresión, de los DIHH, y todas esas pajas manipuladoras.  

Esos medios que agreden y agreden, que insultan e insultan a mansalva a un altísimo porcentaje de venezolanas y venezolanos no pueden seguir afectándonos. Nos someten al escarnio mundial. Por falsos y mentirosos nos irritan y van a sus propios tribunales internacionales a pedir condenas a nuestro Presidente humanista porque están siendo agredidos por él. ¡Qué bolas! 

Veamos nuevamente las propuestas, señora ministra, y directivos del PSUV, ya que debemos conquistar a 5 millones de votantes y un pelo de sus descendientes en edad de no votar. Un montón ¿No?  

Debemos dejar este tira y encoge, angustioso, socavante, de estar día a día, aclarando mentiras. Mentiras tras mentiras y no hacemos nada. ¿Hasta cuándo, coño? 
 

1. Ordenar la transmisión de noticias.

 

Imágenes cargadas de agresiva perversidad de las primeras páginas de diarios que ni se venden, atropellan cada mañana, cada día, todos los días mentes tanto escuálidas, revolucionarias como independientes. Imagínense, presentan la primera página de Tal Cual, ¿quién lee esa vaina? O la del Nuevo País. Financiados por quién sabe, para poder sobrevivir.  

Eliminar, prohibir, la lectura de periódicos que cada mañana salen por la radio en todo el país y que de manera más agresiva inundan las pantallas de televisión, tanto en las de alcance nacional como en  todas las regionales.  

Cada tipo de medio audiovisual deberá generar sus propias noticias. Ahora lo hacen sin trabajo, sin esfuerzo. Esto se traduce en aumentar la mano de obra periodística y la complementaria a estas funciones (camarógrafos, ayudantes, etc.) 

Es más, Globoterror se ve en España, en Las Islas Canarias. No sé dónde más, pero el daño desde Venezuela es internacionalmente terrible. Ni pensarlo si es desde Miami. Por desinformados, por malformados por las cadenas transnacionales, odian a Chávez y a nosotros, sus seguidores. 

Y esto para estudiarlo: pudiese permitirse la lectura de diarios internacionales, pero siempre que dicha lectura implique un equilibrio. 

Como sólo destacan las cosas negativas del país, y del gobierno, es una manera de envenenamiento constante y progresivo para todos los habitantes.  

Se permitirán programas semanales como “el kiosco veraz”, o por ese estilo, 

1. Repeler las noticias e informaciones mentirosas o que confundan.

 

Es insoportable ver y leer como la oposición, locutores y sus invitados, sus articulistas, inventan cada estupidez, cada mentira atroz contra el Presidente, contra las  Misiones, contra las obras, contra los logros agrícolas, etc., etc., que lo que hace es confundir, engañar, a los 5 millones de votantes opositores.  

Estamos  obstinados de escuchar y ver a tanto opositor amañado con USA y con la oligarquía expresando estupideces, sandeces. Diciendo lo que el entrevistador opositor quiere que le digan. 

Hacen mucho más daño con esa impunidad perjudicial, perniciosa, que la no investigación por acciones criminales y juicios no sentenciados. 

Ante cada información falsa o tendenciosa en radio y televisión, y de una manera bien monitoreada, oponer una respuesta inmediata en una mini cadena antes de que se convierta en una matriz de opinión.  

Mientras todas las emisoras de alcance nacional y las cientos de regionales y locales opositoras penetran con una desinformación bien elaborada, nosotros tímidamente nos defendemos con unas cuantas emisoras. Pelea totalmente desigual y de socavación revolucionaria total. 

Se deberá conformar un tremendo equipo de producción al efecto. ERI: Equipo de Respuesta Inmediata

Todo esto requiere que se legisle para penalizar la información mentirosa, la no soportada, la tendenciosa. Prohibido infamar. Prohibido mentir. Prohibidos los mensajes subliminales. 

El alcance de esta medida va a la retransmisión de mentiras de los entrevistados , que es totalmente impune, bien sean politiqueros de la cuarta, los paraalcaldes y paragobernadores golpistas, economistas de pacotilla que nunca han pegado una, encuestadores amañadores, comerciantes inescrupulosos, fedecamaristas explotadores, cetevistas sin trabajadores, curas sin grey, gente de petróleo sin petróleo y sin gente, etc., etc.) 

Equilibrio Informativo

En vista de que el equilibrio -estado ideal del periodismo responsable- no se logrará voluntariamente por parte de los medios, debemos exigir (también legislando, de ser necesario) que cada noticia negativa tenga una positiva.  

En TV., en Radio y en los Medios Impresos: un comentario, una imagen o una foto de un local descuidado le corresponde una foto de uno reparado; una foto de un hueco-una de uno reparado. Una protesta por un problema, una declaración de una solucionada, etc.  

    Extra: prohibir fotos horrorosas en las últimas páginas, y en cualquier revista, que altere a las personas y en espacial que afecte a nuestros jóvenes y a niñas y niños. Lopna, creo. 

1. Propagandas.

 

Todavía gastamos una millonada de bolívares fuertes para alimentar a esa perversa cadena nacional de prensa. Es pagar armas para que artillería enemiga nos mate. 

Reducir la promoción e inversión en los medios adversos al gobierno, por dos cosas: las buenas acciones las reconoce cada comunidad –gobernadores y alcaldes a ponerse las pilas– y los lectores de oposición no le hacen caso a nada de eso. No los leen, y si lo hacen no creen y hasta se burlan. Y es un  dinero perdido. Además, la mayoría, inclusive los independientes que pudiésemos captar, casi no lee periódicos. 

La propaganda gubernamental –que no aparece en ninguna parte– debe verse en Circuitos cerrados de TV., afiches, en cada instituto, CDI, consultorios de Barrio Adentro, Seguro Social, ministerios, Oficinas de Pdvsa y filiales, en todas partes.  

1. Transmitir en minicadenas nacionales programas que desenmascaren la perversa actuación de la oposición (y se aprecie el apoyo de USA) Casos Puente Llaguno, El Caracazo, La masacre de Cantaura, por ejemplos. Desmentir lo de la patria potestad, etc.

Y minicadenear las obras invisibles para la oposición; los mensajes que orienten sobre la solidaridad y las bondades del proceso revolucionario, etc. 

1. Potenciar las emisoras comunitarias. Apoyo total con recursos económicos, asistencia comunicacional técnica y social, calidad del mensaje, ideologización; incorporación por calles a los vecinos, hijos inclusive, en las programaciones. etc. Sugiero hasta comprarle a los chinos radios bien económicos para donarlos a las familias que sintonicen esos “diales” y a la vez, de ser posible, la radio nacional. Guapos y bien informados.

 

7.  El Gobierno, los gobiernos, nuestros gobiernos (incluye instituciones de todo tipo) deben generar equipos de atención a las quejas, reclamos, denuncias de todo género, y propuestas que aparecen por todas partes –especialmente de los revolucionarios–. Hablamos de los que aparecen en diarios, en radio, en TVs., incluyo los cintillos de mensajes de texto, etc.  

8. Penalizar los insultos a los funcionarios de alto nivel. Más cuando se dirijan al Presidente. 

Echémosle un parao definitivo a la desinformación. Nos está dividiendo. Es la que ha generado odio en la oposición contra los chavistas. La que ha separado y los muy c. de m. se la cargan a Chávez. Ja ,Ja.   

Es una andanada de mentiras sumamente arrecha. 

Voy con una variante de mi variante de nuestro lema de combate 

¡Patria, Socialismo o muerte! Que no nos ganen la batalla, y perdamos la única opción de surgir como lo estamos logrando. Y si nos ponemos las pilas y respondemos con efectividad a las agresiones mediáticas. ¡VENCEREMOS!