Rodríguez desmintió la versión del enfrentamiento y explicó que se trató de una ejecución, puesto que el joven no ofreció resistencia. La mujer presenció el asesinato de su hijo sin justificación alguna; contó que cuando llegaron los policías, Wilkerman se encontraba en las afueras de su casa fumando un cigarrillo e intentando tomar señal del Wifi de unas de sus vecinas.
“Mi sobrino y mi otro hijo le dicen: ‘Hermano, vienen los policías’, a lo que él respondió: ‘Yo no voy a hacer nada porque yo no le debo a los policías’, y se quedó en el lugar que estaba sentado”, relató con tristeza su madre.
Minutos más tardes, Jennifer Rodríguez vio cómo su hijo levantó las manos cuando los funcionarios se le acercaron, y escuchó cuando el policía le dijo: “Vengo a matarte” y seguidamente le disparó. “Le dieron un solo tiro en el corazón”, comentó Rodríguez a El Pitazo después de haber entrado a reconocer su cuerpo.
La madre de Wilkerman recuerda como un funcionario la tomó por el brazo para que no se acercara a su hijo, y acto seguido comenzaron a lanzar disparos al aire. “Después uno de los funcionarios sacó una pistola con un guante y la tiró hacia donde le dispararon a mi hijo, yo vi todo, vi como me lo mataron. Mi hijo no se enfrentó en ningún momento”, afirmó.
El petareño murió el pasado jueves 5 de diciembre, un poco después de las 4:00 pm y dejó huérfana a una niña de un año de edad, quien tiene varios días sin dormir puesto que su padre era él que la llevaba a la cama y hacerle la arepita del desayuno, comenta con preocupación su abuela.
Familiares desmienten el enfrentamiento
La madre asegura que Wilkerman Rodríguez era un hijo ejemplar que se dedicaba a vender material metálico como chatarras, pero también hacía trabajos ocasionales como cargar material de construcción o botar basura.
“Él era un muchacho bueno”, narró su madre mientras recordaba todas las veces que le tocó salir a defenderlo porque a su hijo no le gustaba pelear, ni cuando era un niño, por eso, cuestionó a los policías cuando le afirmaron que su hijo había participado en un enfrentamiento.
“Él no era peleón cuando en la calle buscaban pegarle, yo era la que tenía que salir a defenderlo porque él lo que hacía era llorar”, señaló.
Asegura que en ningún momento se metió con los policías ni usaba armamento. “No usaba armas, su única arma fue el celular y el cigarro porque ni droga consumía”, señaló su madre.
Este joven veinteañero practicaba boxeo y jugaba baloncesto. “Él lo que hacía era ayudar a la gente de la comunidad porque la gente le pedía favores. Él era un muchacho muy humilde, por eso, no entiendo por qué dicen que mi hijo tiene unos expedientes abiertos cuando mi hijo no era malandro, nunca estuvo preso o con problemas con la justicia”, contó
Rodríguez recalcó que Wilkerman Rodríguez no merecía morir de esta forma y le pide a las autoridades que se responsabilicen por la muerte de este petareño que era el sostén de su hogar. “Exijo justicia por la muerte de mi hijo. Ellos (los funcionarios) me lo mataron y él no merecía morir así”, sentenció.
Carmen Arroyo, representante del Comité de Madres Poderosas, se encuentra acompañando el proceso de Jennifer Rodríguez y asegura que ver tan cerca este caso le hace revivir lo que pasó con su hijo Christian Alfredo Charris Arroyo, un día después de su cumpleaños, el 24 de septiembre de 2018 en La Dolorita. Está institución agrupa a 15 familiares de víctimas de ejecuciones extrajudiciales por los cuerpos de seguridad del Estado venezolano.
#Caracas | El asesinato de Wilker Rodríguez, de 23 años, enluta a la comunidad de Barrio Unión de parroquia #Petare, estado #Miranda, una muerte que sus familiares lamentan puesto que denuncian que este joven fue víctima de una ejecución extrajudicial por parte de los organismos… pic.twitter.com/WpfxPCnnPF
— El Pitazo (@ElPitazoTV) December 7, 2024