Según Romero, una vez que su progenitor superó la etapa crítica y fue egresado de la UCI, logró comunicarse con sus familiares y hacerles saber el calvario que vivió.
«Tiene mil hematomas, tiene golpes en la cabeza que preferí no tomar fotos, tiene un pie hinchado y golpeado porque al parecer lo dejaron caer. Por la complicación, no tenía ningún tipo de defensas, no tiene ni fuerzas en los brazos ni en las piernas. Le rompieron toda la nariz, (él dice que le decían ‘aguanta el dolor o te morís’)», indica además que el paciente fue amarrado.
Sobre los presuntos responsables, aún se desconoce la identidad, sin embargo el paciente señala que tres personas «fueron las que más daño le hicieron, una médico y un enfermero». En el testimonio de Germary Romero detalla que un camillero profirió amenazas de muerte contra su padre, por el solo hecho de ser venezolano.
Fue tal la situación vivida por el señor Romero, que se quebró emocionalmente. «Yo nunca había visto a mi papá llorar, los que lo conocen saben que es súper fuerte», dice su hija.
Ante los reclamos de los familiares, el hospital no se ha pronunciado, ni les han recibido. Al contrario, se les restringió el acceso a ciertas áreas y les negaron una silla de ruedas para poder marcharse con el paciente.
Germary Romero pidió la difusión de la denuncia, al tiempo que manifestó que desea contar con apoyo legal para las acciones que tomará contra la institución.