El 23 de febrero del año 2019 es un día de gran importancia no solamente para los militantes del proyecto bolivariano sino para todos los venezolanos, ese día se combatió por la paz y no a la Guerra, que en unidad perfecta cívico – militar, se enfrentó con gallardía la arremetida violenta realizada por los imperialistas y sus lacayos. Resultando las batallas del Táchira o de lo que se denomina la batalla de los cuatro puentes (puente Tienditas, puente Simón Bolívar, Ureña, Puente Unión). Los revolucionarios distribuidos estratégicamente en el territorio, no se dejaron amilanar por las fuerzas de la derecha apoyados por el grupo de Lima y los EEUU, que pretendía a toda costa, pasar la ayuda humanitaria que a final resulto una falsa y gran mentira. Se tenía información días previos, que el cargamento proveniente del territorio colombiano no era medicina ni alimento, era en realidad una "bomba de humo" para introducir armamentos de distintos índole a Venezuela y generar a partir de ese momento la liberación del territorio y convertir la frontera en lo que fue en su momento Bengasi en Libia o Alepo en siria; zonas liberadas para ir introduciendo fuerzas de ocupación para ir derrotando militarmente el gobierno Bolivariano. Es por ello que celebramos esta fecha siempre con honor y respeto, por el gran significado que tiene para los que estuvieron en el sitio (provenientes de otros estados y los revolucionarios del Táchira); que fue la defensa del sagrado suelo patrio y la revolución bolivariana. Y estoy seguro, que miles de hombres y mujeres en todo el territorio nacional; con consciencia del momento histórico y en el lugar y tiempo que corresponda tanto presente o futuro, se movilizaran para seguir defendiendo con valentía; la soberanía patria, y por ende la libertad, la paz y la vida de esta generación y de las venideras. Ese día venció la revolución, bajo la protección de Dios todo poderoso. ¡Viviremos y venceremos!
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