Recientemente el mundo sensato y civilizado vio con asombro un acto abominable en la ciudad de Bilbao, España, en cuyo lugar se cometió una acción de irrespeto al busto que se erige en la plaza que lleva su nombre, en donde colocaron con pintura una frase indecorosa y detestable, que solo intenta mancillar su honor.
No obstante, por un lado debemos aclarar a la opinión pública que esta desquiciada y despreciable conducta, no nos resulta extraño a quienes nos identificamos con el pensamiento y el legado de Simón Bolívar, ya que la campaña de descredito contra su ideario y su imagen ha sido parte de la estrategia política del antibolivarianismo, dirigida desde la intelectualidad cipaya no solo de Venezuela en dónde se ha proferido los más enconados insultos a su memoria por medio de obras como "Por qué no soy Bolivariano" de Manuel Caballero, "Contra Bolívar" de Tomás Straka, "El Bolivarianismo- Militarismo, una ideología de reemplazo" de Germán Carrera Damas, "María Antonia, la criolla principal" de Inés Quintero; sino también en Latinoamérica, en donde se ha desatado la furia del Monroísmo con publicaciones despectivas como el libro "El terror de Bolívar" del colombiano Pablo Victoria, además de videos que ponen a circular en You Tube, los cuales solo buscan agraviar imagen.
Por otro lado, creemos oportuno develar el insólito grado de falsedad de quienes se asumieron defensores del ideario bolivariano y quienes lejos de garantizar el respeto a su memoria y a su dignidad, solo han actuado como cómplices de la tergiversación al servicio de una doctrina norteamericana denominada "Panamericanismo".
En este sentido, los militantes de la Historia Insurgente y defensores del proyecto Bolivariano estamos absolutamente claros que esas conductas obedecen a la óptica de una lucha política de gran escala, pero sobre todo antagónica iniciada por Bolívar y retomada por Chávez, en donde se vive la etapa más cumbre y más crucial del Bolivarianismo frente al Monroísmo.
Por lo tanto, los Bolivarianos estamos plenamente conscientes y cumplimos con el deber de manifestar que esa desfachatez al busto del Libertador en Bilbao, España no se puede mirar aislada, sino que forma parte de una campaña de odio orquestada y desatada desde el mismo momento que los Estados Unidos y la oligarquía latinoamericana se dan cuenta que hemos recuperado el Bolivarianismo arrebatado y tergiversado para justificar sus designios hegemónicos, por medio de falsas doctrinas que insultan y mancillan su gloria y visión como el "Panamericanismo".
Lo cierto es que Chávez ganó la partida en cuanto al hecho de haberles quitado y dignificado el proyecto de Bolívar, para ponerlo al servicio de la unidad y la soberanía de los pueblos Latinoamericanos y Caribeños y esta es la amenaza más grande para los enemigos históricos de El Libertador. A ello también se deben las expresiones entreguistas del cipayo de Luis Almagro, Secretario del Ministerio de las Colonias, OEA, quien se confiesa al decir que la "Brisas Bolivarianas" no son bienvenidas en el continente, algo que fue secundado por el presidente fascista de Brasil Jair Bolsonaro.
Por consiguiente, desde esta Red Nacional de Historia, Memoria y Patrimonio de Venezuela nos pronunciamos de manera enérgica para repudiar y rechazar de todo plano la aberrante acción contra la imagen de nuestro mayor referente filosófico y guía ideológico, El Libertador, al tiempo que ratificamos de forma irrestricta nuestro compromiso de lealtad y firmeza con esta lucha que define los destinos de la Patria Grande, soñada por Simón Bolívar y retomada por el Comandante Hugo Chávez.
! Qué Viva Bolívar!
