“Allí donde el mando es codiciado y disputado, no puede haber un buen gobierno ni reinara la concordia”

Platón…

Para lograr posicionar la democracia bolivariana, y ser exitosos en la gestión de Hugo Chávez hay que exhibir la grandeza y la limpieza de la democracia actual. Necesitamos alejarnos del servilismo político y oponernos a la corrupción política

Es necesario hablar de democracia con naturalidad, de sus postulados imprescindibles e irrenunciables, y conseguir de esa forma dos efectos fulminantes: ganar las diversas audiencias, que la aplaudirán a rabiar, y poner en evidencia con fulgurante claridad que Venezuela es una democracia, y no una sucia y despreciable oligocacracia de políticos corruptos. Numerosos hechos políticos en el pasado así los han demostrado.

Es necesario hablar de nuevas libertades ciudadanas – del Estado de derecho – controlando pulcramente el sistema, de los cinco poderes básicos del Estado funcionando con independencia absoluta , del necesario imperio de la ley, de la igualdad como alma de la democracia, de acabar con las ventajas partidistas , con los operadores políticos de la corrupción, del juego limpio en la administración del poder, de la limitación del mandato a la impunidad y al crimen organizado, y de equilibrar un país hoy dominado-todavía y entrenando a los bolivarianos- por la mafias de la IV Republica durante estos 10 años

Pero claro, solo basta exhibir la revolución verdadera ante una sociedad acostumbrada a padecer a la democracia tramposa y degradada de los políticos, lograr el milagro de despertar el entusiasmo en los jóvenes que se han alejado de la política y sumarlos al proyecto de la revolución bolivariana; porque la dimensión del engaño a que están siendo sometido por unas élites políticas que han perdido la ilusión y que sólo poseen ya el ansia de poder y de privilegios. La gente ya descubrió que está siendo suciamente engañada y que en Venezuela lo que reina es cualquier cosa menos una revolución con justicia y realidad.

Es necesario presentar los movimientos o métodos ideológicos para así obligar al partido o a los partidos que apoyan a la revolución bolivariana a que abran los debates que el país necesita, sobre todo el de la revolución del sistema, para que sea realmente una democracia bolivariana.

En consecuencia, Las soñadas demandas y expectativas que han de transmitir los revolucionarios son las demandas y sueños de los miles de ciudadanos venezolanos actualmente frustrados y desilusionados con la corrupción y la podredumbre del sistema: instaurar realmente la igualdad entre los ciudadanos ; otorgar al ciudadano el papel de protagonista y de controlador del poder que la democracia exige, erradicar la corrupción, abrir la revolución bolivariana a la sociedad y reducir su desmesurado poder, lograr que los poderes básicos del Estado, sobre todo el Judicial, sea más eficaz en la lucha contra la impunidad. Reforzar la venezolanidad ante los arteros ataques a la soberanía por parte de países vecinos y al mismo tiempo combatir la inseguridad y los secuestros en varias zonas del país. Entonces, se deben apartar del gobierno a los que quieren que todo siga igual. No solo únicamente nos interesan los revolucionarios los que quieren cambiar las cosas, buscamos con todos “regenerar la política para controlar a los políticos”. Hay que decirlo con fuerza: “Queremos recuperar para la política a la gente desesperanzada de la política. Queremos atraer a todos los jóvenes, hombres y mujeres.

El hombre nuevo nacerá del hombre viejo, dijo una vez el presidente Hugo Chávez en uno de sus tantos discursos. Creo que el nombre nuevo no tiene edad, no es que de pronto la Revolución Bolivariana va a empezar a fabricar al Hombre Nuevo como si se tratara de una línea de producción nueva en una fabrica moderna, no es así, ni tampoco será así el hombre nuevo tiene que nacer desde el fondo de nuestras conciencias y agarrado de la mano del ejercicio de la crítica y de la autocritica, del auto aprendizaje y de la decisión por empezar el cambio entre nosotros mismos.

Percasita11@yahoo.es