En aras de continuar explorando las corrientes del pensamiento de la humanidad, mientras se allana el camino en la consecución de la construcción del conocimiento, permitiendo con ello enriquecer el discernimiento, la capacidad analítica y visualización sistémica, entre otras, identificando de forma asertiva la sintomatología de fenómenos de interés, a la par de producir resoluciones efectivas sobre cuestionamientos científicos y filosóficos. Se destacan las aportaciones de Carlos Marx (1818-1883), Charles Peirce (1839-1914); sobre Marx sería importante destacar, que se erige como un defensor de tres (3) corrientes ideológicas fundamentales para la interpretación de las ciencias sociales, suscrita al siglo XIX, como lo son el socialismo francés en Rene Descartes (1596-1650) del racionalismo; la economía política inglesa del escocés-Reino de Gran Bretaña Adam Smith (1723-1790) economía clásica y el portugués David Ricardo (1772-1823) pensamiento clásico económico; así como la filosofía clásica Alemana de Friedrich Hegel (1770-1831) inmerso en la «cumbre del movimiento decimonónico alemán del idealismo filosófico» donde se discuten problemáticas filosóficas anteriores al materialismo alemán y autor del libro La Fenomenología del espíritu (1807), a su vez seguidor de filósofos de la talla del prusiano Inmanuel Kant (1724-1804) criticismo y precursor del idealismo alemán, así como el Suizo Jean-Jacques Rousseau (1712-1778) de la Ilustración.
Se puede decir que Marx hereda la dialéctica hegeliana de carácter especulativo, anterior en Platón (espalda ancha) cuyo verdadero nombre es Aristocles, discípulo de Sócrates; transformándola en dialéctica histórica-social propia del materialismo, donde el hombre es definido en términos de praxis (productor, creador y transformador), la cual axiomatiza la enajenación, por cuanto es necesaria la emancipación del hombre esclavizado por el trabajo. Allí se encuentra la autentica filosofía de la historia, que busca descubrir la ley que explique la historia humana «el modo de producción de vida material condiciona el proceso de la vida social, política y espiritual en general», dando cuenta a una estructura que gravita en las relaciones económicas y sociales, y una superestructura concebida en la religión, el arte, la filosofía, la ideología y la moral, entre otros. Marx militante comunista, autor del libro "El capital" un tratado de la economía política; se constituye en el principal detractor de la sociedad burguesa-capitalista «explotación del hombre por el hombre», de igual manera habla del socialismo que habría de construirse sobre las cenizas del capitalismo (primera fase de la nueva sociedad) para luego evolucionar hasta alcanzar la sociedad ideal denominada comunismo, en tal sentido Marx proclama.
Mi método dialéctico, no sólo es fundamentalmente distinto del método de Hegel, sino que es, en todo y por todo, su reverso. Para Hegel, el proceso del pensamiento, al que con el nombre de idea, transforma en sujeto con vida propia, es el demiurgo (creador) de la realidad, y ésta sólo es la simple forma externa en que toma cuerpo. Para mí, lo ideal no es, por el contrario, más que lo material traducido y transpuesto a la cabeza del hombre.
Sobre Pierce (1839-1914), profesor estadounidense de astronomía y matemática, egresado de la Universidad de Harvard en química, miembro de la Academia Nacional de Ciencias de EEUU, Academia Estadounidense de las artes y las Ciencias; se destaca por ser considerado el fundador del pragmatismo (artículo publicado en 1878) y padre de la semiótica moderna, inmortalizado por sus obras escritas (libros): Photometric Researches (1878) y Studies in Logic (1883). Según Pierce, citado por Atencia, José María (2009): "El pragmatismo puede entenderse como un método de resolver confusiones conceptuales relacionando el significado de concepto alguno con un concepto de las concebibles consecuencias prácticas de los efectos de la cosa concebida" (pág. 208). Así mismo podría agregarse, de acuerdo con fundador de la psicología funcional James, William. (1907), en su libro: Pragmatismo: un nombre nuevo para viejos modos de pensar.
La verdad para James no es una propiedad inherente e inmutable a la idea, sino que es un acontecer en la idea según su verificabilidad. La verificabilidad consiste para James en un sentimiento agradable de armonía y progreso en la sucesión de ideas y hechos, es decir que, al tener tales ideas, éstas se siguen unas de otras y se adecuan también a cada suceso de la realidad experimentada. Estas ideas verdaderas cumplen una función fundamental: son herramientas útiles para el individuo que lo guían en sus elecciones para dirigirse a la realidad de forma satisfactoria y no perjudicial. Su posesión es un bien práctico; lejos de ser un fin en sí mismo, es un medio para satisfacer otras necesidades vitales.
Para finalizar, se puede inferir que existe una diferencia fundamental entre el marxismo y el pragmatismo, de acuerdo con la manera de concebir la verdad determinada, a partir de diferentes criterios de verdad. Mientras que el marxismo intenta probar lo verdadero como reproducción espiritual de la realidad, acción subjetiva del individuo destinado a satisfacer sus intereses. El pragmatismo persigue aprobar lo verdadero como lo útil, acción material, objetiva, transformadora que responde a intereses sociales y que, considera desde un punto de vista histórico-social, no es solo producción de una realidad material, sino creación y desarrollo incesante de la realidad. Por tanto, ni en la concepción de la verdad, ni en lo que se refiere al criterio y sobre todo en el modo de concebir la práctica pueden ser asimilados marxismo y pragmatismo, ya que no solo no coinciden, sino que se hallan en posiciones diametralmente opuestas. Así que continuando con una máxima histórica de la filosofía, persiste hasta nuestros días, la contraposición de teoría y práctica, manifestadas en el marxismo y pragmatismo, respectivamente.
Profesor universitario (Lcdo. Administración, organización y sistemas)
wilmansanz@gmail.com
