La Sagrada Misión de Educar

Primero, describamos etimológicamente el título según la RAE. Sagrada: venerable que inspira profundo respeto; Misión: Cometido o deber moral que una persona o colectividad consideran necesario llevar a cabo; Educar: dirigir, encaminar, doctrinar. Podemos resumir que la “Sagrada Misión de Educar es el acto sublime e ineludible de orientar nuestra sociedad y donde están involucrados el hogar, la escuela y el estado”.

El hogar es el principal protagonista, puesto que es en el, donde recibimos nuestras primeras enseñanzas que van moldeando nuestro carácter y actitudes. Aprendemos principios y valores que irán formando de una manera u otra nuestra conciencia.

Pero, es necesario que los padres nos involucremos más en el proceso educativo de nuestros hijos que a veces es muy poco o nulo. Conviene supervisarlos, orientarlos, y advertirles de los peligros que enfrentaran en la calle y el entorno. Enseñarlos a darle valor a las cosas. Al mismo tiempo, distribuirles el tiempo que ocupan en internet y tv, alternándolos con otras actividades, como el deporte y la música. Recordemos que “El ocio es la madre de todos los vicios”.

La escuela es la encargada de transmitir saberes y conocimientos y coadyuva a la formación integral y a la sociabilidad.

Admirable la labor del educador en la escuela. Pero, sostengo que es necesario un cambio en la enseñanza concebido en un marco: Cultural, que permita conocer más de nuestra cultura y conocer otras, compararlas. Permanente: que de sentido de pertinencia y de actualidad. Dialógico: que facilite poner en común, saberes, conocimientos, ideas, en relación afectiva con los demás. Participativo: que motive la aportación de todos los involucrados. Dialéctico: que a través del dialogo, enfrentemos posiciones diferentes y saquemos conclusiones. En donde la relación de enseñar-aprender se transforme en una relación compartida y participativa, enseñar y aprender al mismo tiempo, desarrollando el pensamiento crítico.

Y el Estado, que es el encargado de velar porque esta Sagrada Misión de Enseñar se realice efectivamente.

Es importante destacar el esfuerzo que el gobierno hace en la educación, estableciéndola como un derecho humano constitucional, contemplado en Plan de Desarrollo de la Nación, como respuesta para saldar y atender las necesidades de la deuda social y la exclusión, en la formación del nuevo ciudadano, educación que abarca toda la vida. Pero, creo que es necesario mejorar la calidad de vida del docente, porque su salario aún está por debajo del promedio de cualquier profesional; dotar las instituciones y establecer otras; y exigir más responsabilidad profesional.

Concluyo, que es de vital importancia el cambio de actitud que debemos tomar los protagonistas: hogar, padres, hijos; escuela, educador, educandos; y Estado, en este valioso proceso. Ese cambio que es una transición de un pensamiento a otro; de un estado a otro; de una actitud a otra y, a la que puede ser difícil adaptarse, cuando tenemos que dejar hábitos, costumbres, formas, ideas. Condición que va a hacernos sentir mejor; disfrutar nuevas emociones; nuevas satisfacciones; nuevas enseñanzas. “Este mundo no va a cambiar a menos que estemos dispuestos a cambiar nosotros mismos”. Rigoberta Menchú.

“Educa al niño y no será necesario castigar al hombre”, Pitágoras. Y como dijo alguien:”Llenemos las aulas para que no tengamos que llenar las cárceles y los cementerios”.


Esta nota ha sido leída aproximadamente 1996 veces.



Elmer Montero

Licenciado en Comunicación Social,locutor,productor radial,escritor,compositor,músico,poeta.

 elmersanto@hotmail.com      @elmersanto

Visite el perfil de Elmer Montero para ver el listado de todos sus artículos en Aporrea.


Noticias Recientes:

Comparte en las redes sociales


Síguenos en Facebook y Twitter



Elmer Montero

Elmer Montero

Más artículos de este autor