El Estado Comunal: fase superior de la organización social contemporanea

Los seres vivos o todo ser viviente tienen como rasgo de su naturaleza la necesidad de supervivir o instinto de supervivencia. Pero en el hombre, que a diferencia de los animales se desarrolló la conciencia o razón, ese instinto natural es sublimado. Es decir, ese instinto en el humano, constituye una fuerza inconsciente. El individuo no sabe que es impulsado en la búsqueda permanente de la felicidad suya y la del ser social. Porque el hombre es gregario, no puede vivir sino en sociedad, en comunidad; esto es parte de la naturaleza humana.

En este sentido, el pensamiento humanista de Erich Fromm (1985:38), refiriéndose a la naturaleza humana la describe:

"La necesidad de encontrar soluciones siempre nuevas para la contradicciones de su existencia, de encontrar formas cada vez más elevadas de unidad con la naturaleza, con su prójimo y consigo mismo, es la fuente de todas las fuerzas psíquicas que mueven a hombre, de todas sus pasiones, afectos y ansiedades."

En esa búsqueda, el hombre, va creando valores, principios y normas al igual que formas de organizarse socialmente para garantizar la supervivencia de sí mismo y del prójimo. Es el estado, en este sentido, la mayor expresión de esa necesidad. El estado, luego de miles de años de evolución del ser humano, es la forma de organización suprema de nuestra civilización.

La Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, en el desarrollo de su cuerpo normativo, coloca al Estado como la figura destinada por el Poder Constituyente (El pueblo) para garantizar la satisfacción de las necesidades individuales y colectivas de los ciudadanos y las ciudadanas y entre ellas, el derecho a la Seguridad Ciudadana, a la paz social como uno de los valores superiores de la calidad de vida. Asimismo, esa responsabilidad se instrumentaliza por parte del estado garantizando, a su vez, los derechos mínimos de la colectividad en lo político, económico, vivienda, salud y educación como parte del desarrollo integral de la nación que termina vinculándoles al concepto de la Seguridad Ciudadana.

En ese marco de seguridad ciudadana, es responsable también el Estado, de la integridad territorial, la independencia política y de la soberanía frente a amenazas de factores internos y externos y a las realidades del mundo globalizado porque el concepto de seguridad ciudadana implica garantizar a las ciudadanas y ciudadanas el goce y disfrutes de todos sus derechos. Al respecto, en su obra Del Terror a la Esperanza, auge y decadencia del neoliberalismo, nos dice Theotonio Dos Santos (2004: 86) :

"Pero el estado no cumple únicamente esta función soberana de garantizar el orden. Tiene que materializar además, su poder militar y policial. Históricamente, fue siempre una fuente de poder económico, cumpliendo tareas productivas de contenido social que los poderes privados no logran realizar."

Conforme a Dos Santos entonces, el estado tiene una multiplicidad de deberes para con el conglomerado social que va más allá del orden, del aspecto militar, policial y de seguridad ciudadana, sino que se extiende a " tareas productivas de contenido social que los poderes privados no logran realizar" como fuente de poder económico.

Por su parte, el concepto de la seguridad ciudadana abarca mucho más allá de la teoría del delito, la criminalización de las conductas, su reprensión y prevención o indemnización de las víctimas. En la Declaración Universal de los Derechos Humanos, aprobada el 10 de diciembre de 1948, se enfatiza que toda persona tiene derecho a la vida, a la libertad y la seguridad. Con relación a la Seguridad, escribe el ex Defensor del Pueblo del estado plurinacional de Bolivia, Waldo Albarracín, en sus Fichas Constitucionales, lo siguiente:

"….ésta última se refiere precisamente a que la seguridad es el correlato de las dos anteriores, en el entendido de que las personas no deben estar sometidas a una serie de amenazas, agresiones físicas o psicológicas, amedrentamientos, coacciones, extorsiones y un abanico de acciones de violencia que pongan en riesgo la vida, integridad física, la tranquilidad, la propiedad y el derecho a vivir en paz que se merece todo ser humano". https://lapublica.org.bo/especiales/articulos-seguridad-ciudadana/item/234-1-que-es-seguridad-ciudadana (abril 03, 2018)

No obstante el papel que la mayoría de los estudiosos del tema le conceden al estado y que quizás cumplió en fases anteriores de nuestra historia, al parecer las funciones descritas son en la actualidad de difícil cumplimento y ejecución, como los es, entre otras, el de garantizar la seguridad ciudadana.

Bajo la consigna de refundación de la República (el Estado), la ciudadanía expectante votó por la elección de la Asamblea Nacional Constituyente que dio origen a la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela que entro en vigencia el 19 de diciembre del año 1999. Es en esta constitución donde instituye por primera vez la doctrina de la seguridad ciudadana, es decir, la protección del estado a los y las ciudadanas y que se manifiesta en tres dimensiones: Protección frente a situaciones que constituyen amenazas, vulnerabilidad o riesgos para la integridad física de las personas o sus propiedades, para el disfrute de sus derechos o para el cumplimento de sus deberes.

Sin embargo, aquella expectación quedó suspensa en el tiempo porque el estado no ha sido capaza de menguar o disminuir vicios como deficiencia y la corrupción en los servicios públicos o privados, el maltrato a los usuarios, la especulación en los productos de primera necesidad y de consumo masivo, la improductividad, el desabastecimiento, la indolencia y por supuesto la criminalidad. Se pudiera afirmar por el contrario que tales vicios han aumentados de manera exponencial. Detrás de todo ésto corre vertiginosamente una generalización de una crisis de valores a todos los niveles del que hacer público y privado de la sociedad.

Con relación a la corrupción:

La corrupción en Venezuela es considerada alta para los estándares mundiales y es prevalente en todos los niveles de la escala social venezolana,2​ y particularmente en el poder judicial, donde incluso se ha dolarizado.3​ En el caso particular de Venezuela, el descubrimiento del petróleo a principios del siglo XX, ha empeorado la corrupción pública y privada.4​ Aunque la corrupción es una variable difícil de medir fiablemente, Transparencia Internacional (de sus siglas en inglés TNI) actualmente posiciona a Venezuela entre los 20 países más corruptos del mundo.5​ En la encuesta de Gallup del 2014, se encontró que el 75% de los venezolanos piensa que la corrupción es generalizada en todo el gobierno de Venezuela. https://es.wikipedia.org/wiki/Corrupci%C3%B3n_en_Venezuela

La criminalidad es otros de los problemas que a pesar de los esfuerzos del estado ha sido imposible de resolver:

Venezuela fue en 2017 el país de Sudamérica con los niveles más altos de muertes violentas, al registrar casi 57 homicidios intencionados por cada 100.000 habitantes, según el Estudio Mundial sobre el Homicidio de 2019 publicado este lunes por Naciones Unidas en Viena.

Según el estudio elaborado por la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Onudd), Venezuela experimentó entre 1991 y 2017 «el incremento más dramático» de muertes violentas de toda América, al pasar de 13 a 56,8 homicidios por cada 100.000 habitantes, reseñó EFE. https://observatoriodeviolencia.org.ve/onu-venezuela-es-el-pais-de-sudamerica-con-la-tasa-de-homicidios-mas-alta/

En el aspecto económico, a pesar de denunciarse al estado como un estado interventor, la masa poblacional ha estado y está bajo el yugo de la especulación, el acaparamiento y desabastecimiento inducido. Un aspecto de este problema lo trata de la manera siguiente la economista Pascualina Curcio lo siguiente:

"Cuando manipulan ese tipo de cambio, los comerciantes, industriales y empresarios aunque hayan adquirido las divisas a un precio menor, e incluso los que no han adquirido divisas y no han tenido que comprar, van a marcar el precio de sus mercancías al tipo de cambio más alto que ven en el mercado", afirmó. https://albaciudad.org/2018/06/pascualina-curcio-la-inflacion-es-inducida-desde-el-exterior/

No se pasa por alto la complejidad de todos estos problemas que afronta el estado y sobre el todo el estado venezolano, que con excepción de los vicios de corrupción e ineficiencia, gran responsabilidad la tienen intereses internos particulares y foráneos, cuyo autores, incluso, la asumen como objetivo de sus planes geopolíticos y geoeconómicos como es el caso del gobierno de los Estados Unidos.

Bajo condiciones como estas, se encuentran sometidos la mayoría de la población, sin mecanismo de respuestas eficientes y oportunas para satisfacer sus necesidades como la de la protección frente a situaciones que constituyen amenazas, vulnerabilidad o riesgos para la integridad física de sí mismas o sus de sus propiedades, para el disfrute de sus derechos o para el cumplimento de sus deberes, como lo ordena el artículo 55 constitucional.

3. Importancia del Problema, consiste en establecer la posible evolución del problema, en el caso que éste no se atienda. Aquí se describe la situación en el futuro. No se debe emitir juicios de valor, debe limitarse a presentar un panorama de lo que puede pasar a corto, mediano y largo plazo, de continuar la situación como se presenta en la actualidad, lo que amerita una investigación que permita explicar, comprender o transformar la realidad.

A pesar de los programas de masificación y educación gratuita, vivienda, asistencia médica gratuita, financiamiento del combustibles del servicio eléctrico y aseo urbano, profesionalización de los cuerpos de seguridad del servicio de policía, diferentes planes económicos, planes de seguridad ciudadana, planes de inversión, planes de producción y eslóganes anticorrupción y ataque a la ineficiencia, existe un crisis persistente en todos los niveles y percibida por todos y todas que hasta se ha llegado a utilizarse el término de "anomia" o "caos" haciendo alusión a una descomposición generalizada de las instituciones.

Situaciones como estas, han dado orígenes a hechos como los del año 87 que se conocieron como el "Caracazo", lo cual no era más que, ante la represión de factores sobre la población, el poder constituyente tuvo la necesidad natural de drenar la irascibilidad por la impotencia contenida durante mucho tiempo explotando en violencia.

Siendo el Estado responsable a la luz de lo contenido en el pacto constitucional aprobado en el Año 99 de garantizar la paz y el bienestar social de todas y todos los venezolanos, no ha sido suficiente con lo establecido en dicho texto. El estado no ha ejercido la autoridad suficiente para la protección debida. El aparato burocrático de la autoridad (gobierno), como parte intégrate del estado, carece de controles eficientes, fiscalización y sanciones ejemplarizantes para un satisfactorio ejercicio de la actividad y función administrativas frentes a favor de las necesidades de los particulares. No existen mecanismos vigorosos que garanticen la responsabilidad de los administradores frente a sus administrados.

El funcionariato, empleados y trabajadores públicos, por ejemplo, no se encuentran subordinados a sus funciones de los servicios que prestan y por tanto de subordinados a las y los ciudadanos, sino a una figura abstracta como lo es el estado, responden a una abstracción con la cual no tienen ninguna tipo de vinculación subjetiva.

En este punto, el estado, como lo conocemos doctrinal y teóricamente, se nos presenta como inoperante ante los designios que la corresponde ejecutar, los propósitos y fines que le corresponde atender. Lo mismo ocurre en la práctica como se ha advertido en las líneas anteriores. El estado "moderno", el estado burgués o el estado de bienestar o el estado liberal o el estado planificador de nuestros tiempos se manifiestan como incapaces de atender y garantizar las necesidades de su "súbditos", se nos aparecen como obsoletos. De allí que, en la actualidad los movimientos sociales de los pueblos se estén cada día más multiplicando y manifestando en todo tipo de protestas.

Sin embargo, partiendo de la realidad del concepto y estructuración de lo que se debe entender por estado, no es el estado como sistema el que está fallando por lo que no es el estado como sistema lo que se debería perfecciona, modificar o abolir. Los que hay que cambiar es uno de los elementos constitutivos del estado: El Poder y más propiamente el control del poder.

El estado es un sistema socio, geográfico, histórico, político y jurídico compuesto por cinco elementos: Pueblo, geografía o territorio, identidad, soberanía y poder (autoridad-gobierno).

En el estado "moderno", el estado burgués o el estado de bienestar o el estado liberal o el estado planificador, el poder es controlado y ejercido por una elite con sus propios intereses que generalmente no representan o comulgan con los intereses de las mayorías. Mas allá, en lo que se ha denominado el poder dentro del poder o el poder de facto o el estado profundo, ni siquiera el poder institucional, legitimado por los conductos constitucionales y legales tienen su propio control del aparataje burocrático (Policías, economía, misterio, poder judicial, etc.). Ese poder bajo las sombras, es el que termina socavando la estabilidad de las instituciones y del mismo estado aplastando los derechos y garantías de todos los ciudadanos.

El estado debe avanzar para garantizar la pervivencia de la sociedad al cambio del ejercicio y control del poder. El control y el ejercicio del poder del estado por parte de los ciudadanos y ciudadanas no es una aspiración reciente, pero en nuestro país se le ha dado forma a esa meta a través de la teoría del Estado Comunal y del ejercicio del Poder Popular, lo que no es más que el ejercicio de la democracia directa. Del control y ejercicio vertical del poder al control y ejercicio horizontal del poder del estado.

El estado comunal o más concretamente, el ejercicio directo del poder popular sobre las instituciones y el aparataje burocrático, permitirá una mayor eficiencia en los mismos y, a través de la sociedad comunal, consecuencia automática o natural de la vigencia del estado comunal o forma de organización del poder, una cosmovisión que ha de reproducir valores éticos, la corresponsabilidad y la solidaridad. Es decir, para que puedan hacerse concretos los valores en una sociedad, deben crearse las estructuras que permitan su desarrollo y práctica.

El estado "moderno", el estado burgués o el estado de bienestar o el estado liberal o el estado planificador de nuestros tiempos se ha constituido en un obstáculo para el impulso y nacimiento de una nueva forma de organización social que garantice las satisfacen material, sociológica y espiritual de la colectividad. Nuestra sociedad se encuentra suficientemente madura para impulsar esa trasformación. De allí que, es estado comunal constituya un nivel superior de organización social de la humanidad en esta etapa de la historia. Para ello, es necesario analizar los modelos contemporáneos del estado, su estructura y funcionamiento, así como la estructura y funcionamiento del estado comunal y, como amas figuras inciden en lograr la mayor suma de felicidad posible en los administrados. He aquí la finalidad de la presente investigación.

joseantoniocastillos@hotmail.com



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