Este 2019 cumple 100 años la Organización Internacional del Trabajo conocida también por sus siglas OIT. Venezuela es miembro de la OIT desde el año 1919. Dicho organismo está adscrito a la Organización de las Naciones Unidas (ONU), y cuenta con la participación de 187 Estados miembros. Los objetivos principales del organismo son:

1. Promover los derechos laborales de los Trabajadores.

2. Fomentar oportunidades de trabajo decente.

3. Mejorar la protección social.

4. Fortalecer el dialogo al abordar los temas relacionados con el trabajo.

Basado en los principios anteriormente descritos, este organismo tiene una deuda pendiente que saldar con los trabajadores de Latinoamérica, especialmente con los Venezolanos que hacemos vida laboral dentro y fuera de nuestro país. Venezuela cuenta con una excelente Ley Orgánica del Trabajo, que fue promulgada en el año 2012 y que cumple con los principios fundamentales del derecho internacional sobre protección y seguridad social de los trabajadores y trabajadoras del país. Sin embargo en lo interno se violan muchos de sus articulados, como por ejemplo en lo concerniente a la postergación de las firmas de contratos colectivos, inexistencias de elecciones sindicales donde sus dirigentes continúan participando en actividades laborales de forma ilegal, incumplimiento en el pago de prestaciones, ambigüedad de la retroactividad y empresarios que abandonan sus negocios sin cancelar pasivos laborales a sus trabajadores entre otros delitos. Motivado a la crisis que se vive actualmente en el país, se suma una nueva realidad, que es la Migración de Venezolanos que en su mayoría ha escogido como su residencia países del área como lo son; Colombia, Brasil, Perú, Ecuador, Bolivia, Chile y Argentina entre otros. En estos países se convierten nuestros paisanos en trabajadores Migrantes, donde la mayoría de las veces son sometidos a largas jornadas laborales, con pocos días de descansos y un sueldo por debajo del promedio nacional del país donde se encuentren, es decir los empleadores sacan provecho de la necesidad del Venezolano.

A la vez la mano de obra Venezolana contribuye positivamente en la economía del país que lo acogió y paralelamente desarrolla en menor grado la economía de su país de origen, con el envío de divisas producto del esfuerzo de su trabajo. Vista esta realidad que están viviendo nuestros paisanos, por este mundo globalizado con el avance en las tecnologías de la comunicación y la información, considero extraño que organismos internacionales como la OIT y la ONU, traten el tema de manera sesgada, dejando de lado los sentimientos de Justicia y Humanidad, contraviniendo a los principios de la constitución de sus propios organismos. Es momento de solicitarles a dichos organismos, que se elaboren los informes de la realidad del tema MIGRACION VENEZOLANA, Porque estamos en presencia de evidentes violaciones de los derechos humanos y urge la aplicación de las sanciones correspondientes para los países que no están prestando la debida ayuda para nuestros ciudadanos en el exterior. Los mismos se encuentran desprotegidos, sin seguridad social, vulnerables a la explotación, al tráfico de personas y sin garantías a la igualdad de oportunidades. Es oportuno solicitar la aplicación del convenio internacional sobre la protección de derechos de los trabajadores migratorios, el cual entro en vigencia en el año 2003. La invitación también es para los organismos de nuestro país a ejercer las políticas aplicadas al derecho internacional para mejorar la condición humana de nuestros ciudadanos en el exterior.

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