Da pena ajena, ver, escuchar y leer, a un conjunto de artistas criollos y extranjeros, todos mayamerizados, es decir, hechos vecinos y ciudadanos en los condados de Miami, centro que agrupa a todos los latinos y personajes de la farándula, residentes en Estados Unidos de Norteamérica (EEUU), en donde además, se han concentrado, por muchos años, todas las mafias de banqueros prófugos, terroristas cubanos anticastristas, proxenetas, prostitutas con abolengo, sodomitas de escaparate, sobre todo, artistas reconocidos de la farándula, que como forma de superación social y estatus, compran propiedades y se pavonean, como residentes de estas zonas.
El caso es, que en este Golpe de Estado continuado, entre los actores de reparto, han emergido estos artistas mayameros, en los medios de comunicación al servicio del Departamento de Estado de EEUU, como CNN y todos los privados que hacen vida en Venezuela y en las redes electrónicas, también llamadas erróneamente, "sociales", entre los que cuentan, cantantes, actrices y actores, con un solo discurso: "suspender conciertos, giras, presentaciones, por la crisis que vive Venezuela y su solidaridad con la misma".
Ellos han emergido en oposición a todos aquellos artistas, una gran mayoría, que conscientes, han conformado un gran ejército de luchadores por la vida y por la paz, cuyo efecto y resultados positivos, han conjurado la violencia y la muerte, en toda la esfera nacional y, su ejemplo (motivo de envidia mayamera), se ha extendido en todos los confines de la tierra, lo que le ha dado otra dimensión social a los artistas del mundo, en favor del Pueblo y de los más inermes del mundo.
Al contrario de los artistas por la vida y por la paz, los artistas mayameros están pagando la cuota que les corresponde con sus contratistas y para no perder la visa que les ha otorgado el personal de la CIA en la Embajada de EEUU en Caracas, razones por las cuales, mienten con contumacia y no dicen la verdad: que se prestan para hacer masiva la mentira de una supuesta "crisis" que no existe y su solidaridad con los guarimberos criminales y asesinos, que con fachada de "Movimiento Estudiantil" han asesinado a venezolanos inocentes e indefensos, quemado, destrozado y perturbado la paz social de la mayoría, con total impunidad, al tiempo que están abusando de la tolerancia y el respeto a los derechos humanos que el gobierno revolucionario del primer Presidente obrero y chavista, Nicolás Maduro, ha manifestado por toda la disidencia, aún cuando ésta es una minoría nacional, como se ha demostrado en todos los procesos electorales, desde nacionales, como municipales, lo que ha obligado al gobierno de Obama y a sus serviles criollos, a buscar otra salida, no democrática, que desaloje y liquide todo el proceso revolucionario en Venezuela.
La mejor respuesta frente a estos artistas mayameros, que desprecian al Pueblo, no es el insulto, sino ignorar su egocentrismo y vedettismo y demostrarles, en la práctica, que su chantaje, entreguismo y mentiras, no dañarán, ni perturbarán la alegría de la mayoría nacional, que se apresta a celebrar y disfrutar en familia, en sana paz, de estas fiestas de carnaval.
Lo mejor que podemos hacer, es desear a los mayameros, que la pasen lindo en carnaval, aunque se están perdiendo el destino más chévere, es decir, Venezuela, y, dejarlos que griten histéricos, hasta que pierdan la voz o se les derrame el bótox, porque lo que son, Nicolás Maduro y el chavismo, no nos iremos de Venezuela, porque somos "Pueblo", concepto que la disociación psicótica no ha logrado entender.
Seguiremos disfrutando de las canciones de estos artistas mayameros y de sus actuaciones, aunque sea, grabadas, así como nos estamos beneficiando del papel toillette importado de EEUU, porque a las tres grandes cadenas de producción, distribución y comercialización, les ha dado por desaparecer el papel toillette, para irritar nuestros delicados anos, porque ellos están empeñados en coronar a su rey Momo, Lorenzo Mendoza, como Presidente del Virreinato de Venezuela, al servicio del imperio. Hoy, tenemos Patria y la alegría del carnaval seguro, con Nicolás Maduro, gracias al Comandante Chávez.
