El mito de la democracia (3)

Dictadura: es el régimen en el que una sola persona gobierna con poder total sin someterse a ningún tipo de limitaciones, con la facultad de promulgar y modificar leyes a su voluntad. El gobernante que asume la dirección de esta forma de gobierno se le llama dictador o tirano.

Las dictaduras más famosas del mundo en el siglo XX se establecieron en Centro y Suramérica, y en África. Veamos algunas con su respectivo dictador: Santo Domingo, Rafael Leónidas Trujillo; Venezuela, Pérez Jimenes; Nicaragua, dinastía Somoza; Paraguay, Alejandro Stroessner; Haití, Francisco Duvalier; Chile, Augusto Pinochet; Zaire, hoy República Democrática del Congo, Mobuto Sese; Etiopía, Haile Selassie, Etiopía; Burundi, Michel Micombero; Ruanda, Juvénal Habyarimana; Uganda, Idi Amín…Además, dos dictaduras europeas, en España presidida por Francisco Franco y en Portugal, Antonio de Oliveira Salazar.

Si fijamos la atención en la lista anterior se podrá destacar que en su mayoría las dictaduras nombradas están en Centro y Suramérica y también África y dos en Europa. En España, la del dictador Francisco Franco, quien gobernó a España con mano de hierro durante cuarenta años y OliveiraSalazar en Portugal, quien fungió como primer ministro durante 36 años. Esto no es coincidencia, en primer caso porque la mayoría de los recursos naturales requeridos por EEUU y Europa para su desarrollo estaban en esos continentes, por lo tanto, dicha potencia y los antiguos imperios necesitaban colocar a presidentes títeres y tiranos en esas naciones para lograr sus objetivos. Sin el apoyo militar y económico de dichos países no hubiese sido posible la existencia de aquellos dictadores. Esto ocurría ante la mirada indiferente de los llamados naciones industrializadas frente a la violación continua de los derechos humanos, crímenes de lesa humanidad y genocidios. Surge en el 1945 el mito del llamado tercer mundo. Esto son países del sur del globo del cual extrajeron (robaron) riquezas y materia prima necesarias para el desarrollo de los países del norte. Por lo tanto, era imprescindible controlar política y económicamente a Centro y Suramérica y también a África. Según la idea del desarrollo, el sentido de las pretensiones de los países capitalistas era repartirse el mundo, el cual lo dividen en naciones industrializada (en el norte del globo) o del primer mundo y las naciones pobres no industrializadas (en sur del globo) o del tercer mundo. Fragmentando así el orbe entre los que forman y controlan el mercado y los segundos, los que pueden comprar o los que no.

Esta división artificial del mundo, entre primer y tercer mundo, es un mito creado por los capitalistas. Los del primer mundo son los países que se industrializaron a costa de la materia prima barata, pago de salarios miserables y mercados cautivos. Todo esto para vender caro las mercancías fabricadas con la los productos arrebatados a la fuerza en las naciones tiranizadas por el dictador de turno. Y los del tercer mundo, las naciones a los que le extraían las riquezas para exportarlas hacia el norte y a los que nunca le transfirieron la tecnología necesaria para evitar su industrialización. Una manera de obligar a comprar productos importados.

En el segundo lugar, el tirano Francisco Franco y Oliveira Salazar no recibieron del mundo occidental las condenas que merecían, a pesar de las constantes y graves violaciones de los derechos humanos y los crímenes de lesa humanidad. EEUU y los países europeos se mantuvieron imperturbables ante tales contravenciones, consideraban que ambos dictadores constituían un freno al avance del comunismo en el mundo occidental. Así se construyó el mito del tercer mundo, los países industrializados necesitaban nuevos mercados y fuentes de materia prima para ensancharse y eso se los aseguraba los gobiernos de los dictadores de Centro y Suramérica, además, los de los tiranos de África.



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Enoc Sánchez


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