TeleSUR 29/09/08.- Durante el derrumbe, el valor bursátil de las empresas cotizadas en la Bolsa de Nueva York descendió en más de 1,2 billones de dólares, casi el doble del presupuesto del plan diseñado por Washington para acudir al rescate del sector financiero.
La negativa de la Cámara de Representantes de Estados Unidos a aprobar el multimillonario plan de rescate del sistema financiero que proponía el gobierno conservador de George W. Bush causó un verdadero "lunes negro" bursátil en todo el mundo, encabezado por Wall Street, que sufrió la mayor caída de su historia.
El índice Dow Jones de Industriales, el principal indicador de la Bolsa de Nueva York, cerró con un retroceso de un 6,71 por ciento, o sea, una pérdida nunca vista de 777,68 puntos.
Mientras, el mercado Nasdaq perdió 199,61 puntos (-9,14 por ciento), hasta 1.983,73 unidades, en tanto que el selectivo S&P 500 retrocedió 106,85 puntos (-8,81 por ciento), hasta 1.106,42 unidades.
El efecto dominó se hizo sentir con fuerza en todos los mercados bursátiles del planeta, en especial los de América Latina y Asia.
La vecina Bolsa de Toronto perdió 840,93 puntos, un 6,94 por ciento de su valor, y terminó la jornada con 11.285,07 puntos, lo que supone la evaporación de unos 100 mil millones de dólares.
En Europa, pese a que allí los mercados cerraron antes de que se conociera el rechazo al plan por parte de los legisladores estadounidenses, el FTSE cayó más del 5 por ciento y registró su mayor retroceso diario desde comienzos de año.
Asimismo, se anunció una nueva nacionalización bancaria, esta vez en Bélgica, donde las regiones de Flandes, Valonia y Bruselas acordaron participar en una ampliación de capital de unos 7 mil millones de euros para el grupo bancario Dexia.
En Tokio, el índice Nikkei se desplomaba casi un 5 por ciento en las primeras transacciones, la mañana de este martes. Poco después, el Banco de Japón inyectaba casi 2 billones de yenes (19 mil 200 millones de dólares) en el mercado monetario local, en un intento por calmar la crisis.
Y en Hong Kong, la Bolsa abrió este martes con una caída de 5,6 por ciento en los intercambios iniciales, mientras el índice Hang Seng perdía 998,68 puntos a 16.882 puntos.
Bolsa de Caracas cerró en alza
En América Latina, las plazas más golpeadas fueron las de Sao Paulo, con una caída del 9,36 por ciento, sin precedentes en la última década, y Buenos Aires, que cayó el 8,68 por ciento.
La excepción fue la Bolsa de Caracas, que registró una leve subida, que fue posible porque no tiene ya valores que coticen en Nueva York.
Después de la votación parlamentaria en Washington, que se saldó con 205 votos a favor y 228 en contra, tanto los demócratas como los republicanos convocaron sendas ruedas de prensa para acusarse mutuamente por el fracaso de esta iniciativa, contenida en el proyecto de Ley de Estabilización Financiera.
El secretario del Tesoro, Henry Paulson, hizo un llamado desesperado, asegurando que es preciso aprobar "lo antes posible" un plan de rescate que "proteja el sistema económico", es decir, a las multimillonarias empresas financieras.
No obstante, los analistas ven difícil una salida en el corto plazo. Durante el derrumbe, el valor bursátil de las empresas cotizadas en la Bolsa de Nueva York descendió en más de 1,2 billones de dólares, casi el doble del presupuesto del plan diseñado por Washington para acudir al rescate del sector financiero.
"Derrota" de Bush
La votación de la cámara baja supuso un "derrota catastrófica", para el presidente de EEUU, según lo describió el diario de The New York Times
Bush, al que sólo le quedan cuatro meses en el cargo, había apostado todo su capital político en la defensa de esta medida, que iba a suponer el pago de 700 mil millones de dólares del bolsillo de los contribuyentes para comprar la deuda multimillonaria de la banca privada.
El director de la Consultora Bursamétrica de México, Ernesto O'Farril, dijo que la decisión de los republicanos de no aprobar el plan de rescate fue política y no financiera, para permitir a su candidato a la Casa Blanca, John McCain, proponer una salida que tranquilice a los mercados y así repuntar en la campaña.
No obstante, fueron los republicanos los principales impulsores del veto al plan de Bush, al considerar que atentaba contra el libre mercado y beneficiaba especialmente a Wall Street y no al ciudadano medio.
Bush y sus asesores económicos habían insistido en que un rechazo a la medida causaría la congelación de las facilidades de crédito de la banca y sumiría al país en una "grave y profunda recesión". La reacción de los mercados a la votación no se hizo esperar.
El mandatario, cuya popularidad es inferior al 30 por ciento, dijo estar "muy decepcionado" y aseguró que seguirá trabajando para "desarrollar una estrategia" que les permitirá "avanzar" hacia una solución.
Lucha de tiburones
En medio de la crisis, los colosos financieros sobrevivientes se apresuraron a seguir devorando a los caídos. El grupo Citigroup se situó así como el primero de Estados Unidos, tras adquirir las operaciones bancarias de Wachovia, el cuarto mayor banco del país, que había sido declarado en quiebra.
Ahora Citigroup tiene un total de depósitos por 1,25 billones de dólares, por delante de JPMorgan Chase (911 mil millones) y de Bank of America (785 mil millones), según la firma.
Para justificar la medida, la Corporación Federal Aseguradora de Depósitos (FDIC, por sus siglas en inglés) dijo este mismo lunes que Wachovia "no quebró" y que se trataba de un "acuerdo entre bancos".
"Esta acción era necesaria para mantener la confianza en el sector bancario dadas las actuales condiciones del mercado financiero", declaró la presidenta de la FDIC, Sheila Bair, en un comunicado de prensa.
Sin embargo, se rumoreaba sobre la negociación desde la pasada semana, poco después de que otra entidad, Washington Mutual, fuera intervenida por el Gobierno y sus activos vendidos a JPMorgan Chase.
El acuerdo contempla la compra de todas la filiales bancarias de Wachovia por Citigroup, que pagará 2 mil 160 millones de dólares en acciones y asumirá deuda y otras obligaciones por un valor total de 53 mil millones de dólares.
Wachovia estaba valorada en unos 312 mil millones de dólares.