Hace pocos días tuve la extraordinaria oportunidad de acompañar a nuestros hermanos cubanos en la celebración del 60 aniversario del asalto a los Cuarteles Moncada y Carlos Manuel de Céspedes, eventos que sirvieron para derrocar la nefasta dictadura del General Fulgencio Batista allá en los años 50… sin duda y conociendo la historia política de Cuba, aquel derrocamiento era necesario y por supuesto no es sorpresa que los cubanos aunque lloran a los caídos, celebran esa fecha con alegría... el fin de aquella era dictatorial dio paso a la Revolución Cubana que tanto aman y sienten los nacidos en esa isla hermosa. Esa riqueza de ideas, de cultura y de moral es lo que ha hecho a los cubanos tan fuertes en medio de las adversidades. Victimas del bloqueo estadounidense y carentes por muchos años, de apoyo internacional, han sobrevivido y han mantenido íntegra la idea de la revolución, la cual han asumido e interpretado como parte trascendental de sus vidas, ¡La aman, la sienten y la viven! Lo mismo que han hecho con Fidel y con cada uno de sus cuadros políticos, los cuidan, los protegen y los defienden. Y eso sin duda es lo que nos falta a muchos de los que escribimos la historia de la Revolución Bolivariana que nos dejó el Gigante Chávez. No hemos entendido que el camino hacia la Revolución debe elevar la moral, el compromiso con lo humano, con el pueblo, con nuestras raíces… eso es lo verdaderamente importante. Nos falta mucho para llegar a entender este proceso revolucionario, nos falta mucho para sentir ese amor patrio tanto como los cubanos sienten por su isla. Sin duda, hemos avanzado en este duro camino hacia el socialismo pero no podemos proclamar victoria. Hemos alcanzado grandes aciertos, pero también errores y desaciertos que vienen acompañados con el egoísmo y el individualismo en nuestras propias filas. Tenemos en marcha un proceso que nos demanda mayor esfuerzo y dedicación. Consolidar, defender y profundizar la Revolución Bolivariana es la orden para quienes creemos en esto. Ganar la batalla de las ideas, elevar la moral, derrotar la pobreza y potenciar la inclusión, gobernar para todos, vencer la ineficacia, el burocratismo y la corrupción debe ser la acción de gobierno; vencer el egoísmo, la vieja cultura política heredada de la IV República, dejar de ser definitivamente “un servidor de pasado en copa nueva” como dice aquella trova de Silvio que canta Mercedes, es decir, no pretender vivir en revolución con los vicios de la cuarta, es la orden de todo revolucionario, tenemos la obligación de darle poder a la gente, potenciar la participación de las comunidades… tomar el ejemplo de Cuba sin cubanizarnos por supuesto, cada país tiene sus realidades, Comprender que el amor a la Revolución y a la Patria no solo debe tratarse de ideologías sino de hábitos, métodos, sistemas que deben aplicarse y asumirse con completo compromiso. Compatriotas, entendamos que si esta Revolución se cae, por nuestras miserias humanas, por nuestros proyectos individualistas, por egoísmos y por dejarnos encantar por el adversario y ser su marioneta para atacar a nuestros cuadros políticos y a nuestros líderes como ha ocurrido con el compatriota Rangel solo por querer hacer de este estado una potencia económica y por haber sido leal al comandante Chávez! si llegara a caerse este proceso, dice la canción de Silvio; “nos arrastrarán por sobre rocas, nos Machacarán las manos y la boca, nos arrancarán los ojos y el badajo” a todos, pero a todos nos harán lo que dice la canción, porque además el oposicionismo se ha venido preparando para eso, es por ello que en el marco de la unidad necesaria, en el marco de las líneas de Chávez y ahora con el gobierno de eficiencia de Nicolás, no perdamos nuestro objetivo, es preferible seguir caminando hacia la Revolución. polopatrioticobolivar@gmail.com