El patio trasero

Esa expresión que desde mis años de estudiante he oído con connotaciones negativas, me ha sorprendido gratamente oírla en este caso de una conspicua representante de la oposición venezolana. Me refiero a la señora Beatriz De Majo en sus declaraciones cuando asistía a una reunión en el  puente Simón Bolívar que une a Venezuela y Colombia, con el señor Álvaro Uribe, ex presidente de la hermana República de Colombia.

La señora De Majo, dijo lo que ni el candidato de la oposición, ni los integrantes del comando de  su campaña, ni los  asesores del mismo, son capaces de decir, pero lo tienen muy claro para poner en ejecución en el supuesto negado de un posible éxito electoral. No se atreven a expresarlo públicamente, como lo hizo la señora De Majo, por temor a perder algunos votos. Ella tiene muy claro, que de llegar de nuevo al poder, volverían a convertirnos en el ansiado PATIO TRASERO, de USA, del cual ya salimos.

Y se sorprenderá el lector cuando le coloco el calificativo “gratamente”, y es que al fin alguien de ese sector se quitó la careta antes de las elecciones y expresó sin ambages el sentimiento que mantienen reprimido en el mensaje electoral sobre la estimación que tienen de nuestro país y en consecuencia del proyecto que pretenden recuperar. Este es un mensaje para el PUEBLO, con mayúsculas, que sufrió las consecuencias años tras años, por ser justamente el PATIO TRASERO del gran imperio. Cuando yo oigo a un vocero de la oposición hablando en nombre del “pueblo”, y elogiando o profiriendo arengas en defensa de ese “pueblo”, siempre me pregunto: ¿a qué pueblo se refieren?  ¿Creerán ellos que ese “pueblo” que no solo en épocas pasadas, sino aún hoy, fue despreciado, marginado, humillado, vilipendiado, por ellos, cuando éramos el PATIO TRASERO de los Estados Unidos, sigue siendo el mismo? Es muy frecuente oír voceros de la oposición que ayer condujo al país a la más terrible miseria y abandono, continuar despreciando al contingente de pobres que aún tenemos, no obstante el gran empuje que se ha dado desde este gobierno para sacarlos de ese submundo. Su elogio, con sabor a hipocresía,  a denodado  interés por obtener su voto, luce vacío, pobre, indigno. De inmediato, me viene a la memoria aquel tan conocido verso del Poeta Andrés Eloy Blanco que decía: “Si vieres comer a un negro/ de un blanco en su compañía/ o el blanco le debe al negro/o es del negro la comida”, que bien pudiéramos parafrasear y colocarle “rico y pobre” en vez de “blanco y negro”.

Hay que ser bien cara dura para hablar en nombre del pueblo que ellos desprecian. Cuando veo las intervenciones de los representantes de la oposición en la Asamblea Nacional destrozando con encendido verbo, cuando no tienen el poder y eliminando todo vestigio de  las políticas sociales emprendidas desde el gobierno, cuando lo tienen, como en el caso de los gobernadores de la oposición y las Misiones, por ejemplo, diera la impresión que piensan que están ante la presencia de un pueblo descerebrado, que no piensa, que no ha despertado.

Pero se equivocan, señores de la oposición, el pueblo probó las delicias de una vida mejor, decente, se hizo dueño de sus derechos y muy difícil los entregarán a no ser que la fuerza bélica del imperio que Uds. defienden, se imponga con el ventajismo que lo ha hecho en todas partes del mundo donde se les antoja.

Felicitaciones señora De Majo, pues hablando con algunos “ni ni” sencillamente han deplorado sus declaraciones y en consecuencia, inclinado su opinión hacia la defensa de la soberanía, lo cual no es otra cosa que la defensa de la actual política defendida por la revolución Bolivariana. Poco le faltó decir que se sustituya la estatua de las Plazas Bolívar, por la de George Washington y una estrella más en la “estrellada” bandera de los Estados Unidos.

marinamaica@hotmail.com



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Marina Guaithero de Maica


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