Puede dar frutos o hacer homenaje a la vida
Construir ilusión
Dignificar el trabajo (propio y ajeno)
Puede poner de nuevo la dignidad propia y de un pueblo en alto
Y levantarse una y otra vez
Invitar a empinarnos siempre
Puede leer o invitar a leer crítica y creativamente a Bolívar,
A Marx
A Lenin
A Trotsky
A Gramsci
A Mariátegui
A Franz Fanon
A Martí
Al Che
A Rosa Luxemburgo
A Fidel
A Pío Tamayo
A Ludovico Silva
Y a tantos otros y otras
Pero, sobre todo, un poeta obrero o un obrero poeta pueden aprender y enseñar a ser pueblo
Y relatar esa intuición de barrio con que se fraguan todos los 27F y los 4F y todas las pólvoras de liberación
Puede erguir de nuevo la utopía y reinventarla
Asumir la contradicción
Y aprender qué es y demanda asumir la praxis dialéctica de acumulación de fuerzas en cada coyuntura
Pero un poeta o un obrero también pueden y deben emplazar y emplazarse siempre en su historia (de clase)
Ser pies en tierra y sueño hacia un firmamento colectivo pero con pies en tierra
Ser e invitar a ser revolución humana
Revolución poética
Revolución de género
Revolución en erupción
Revolución permanente
Revolución anti-adulto céntrica
Y consciencia eco-política
Y pueden ver y hacernos ver que somos parte, responsables y únicos protagonistas de esta historia
Y
compartir y sobre todo aprender junto con los verduleros, los horneros y
los limosneros y condenados de la tierra que nos topamos a diario por
la calle
Pueden re-inventar esa antigua utopía de tratarnos como humanos,
como hermanos, como familia (no como bestias de carga, ni esclavos, ni
delincuentes ni enemigos)
Pero un poeta y un obrero deben asumir la autogestión en cada gesto
Esto es, incitar que los compañeros hombres y compañeras mujeres que nos circundan
discutan y decidan y aprendan democrática y cotidianamente sobre sus prácticas de trabajo (modos y medios de producción)
y sobre todos los ámbitos de su vida
Pueden ahondar y dar nueva carne diaria a la praxis revolucionaria democrática
Y
advertir sobre nuestros heredados pero peligrosísimos individualismo y
consumismo, revisionismo y falta de fuerza para cultivarnos y
actualizarnos en ideología
Y enaltecer la cayapa, la minga, la colaboración animosa en pro de un inédito destino común
Pueden denunciar los sistemas y prácticas en que pocos individuos comercian para sí bienes, privilegios y fortunas.
Y no resignarse a que las mayorías se eternicen en la pobreza, la falta de oportunidades de trabajo y de jolgorio y creación
Puede construir condiciones para la crianza solidaria de los hijos, sobrinos y nietos
y azuzar la creación y reinvención de la ceremonia cultural y espiritual
Puede resistir a que unos pocos manden siempre y en todo, mientras el resto dobla la cabeza
E instar subvertir las tan hábiles cuanto funestas teorías económicas liberales y neo-liberales
Un
poeta obrero o un obrero poeta pueden ser apertura al cambio constante,
a la consulta constante, a la práctica constante de la humildad, el
poder obediencial y la influencia mutua
Y ayudar a que hombres y mujeres, adolescentes y niños y niñas nos
libremos de tanta explotación económica y tanta maniobra
propagandístico/ publicitaria desarrollista
Pero un poeta o un
obrero pueden contribuir también a superar la fase de propiedad
colectiva pero no democrática ni liberadora que deben construir los
nuevos medios y modos de producción (colectivización)
Y ayudar a alcanzar cada día una convivencia más humana, más plena, más radiante
Un
obrero o un poeta y sobre todo ambos juntos pueden hacer que las ideas
dominantes no sean siempre las ideas de las clases dominantes (Marx)
Y que la televisión dominante no sea eternamente esa cosa sexista, racista y pasatista funcional a las clases dominantes
y enseñar a cuidar, a entender, a acompañar pero también a espolear y exigir cada vez más de nuestros compañeros líderes
Ambos
pueden ayudarnos a rescatar del pasado y de los mohosos libros de
historia las palabras textuales de nuestros próceres de independencia y
de los viejos y nuevos teóricos del socialismo ante cada disyuntiva
Y ayudar a evitar que lo que se construyó histórica y colectivamente
derive en erario de grupos, compadres o favoritos que den después
espaldas al pueblo
Pero un poeta cuando se hace obrero o un obrero cuando se hace poeta pueden protagonizar control
y contraloría de la gestión pública por las bases, las comunidades y
los sindicatos sin caer en anarco-basismo o anarco-sindicalismo
Y ayudar que los concejales, alcaldes y parlamentarios se mantengan cerca de sus electores
Y,
fruto de una relación respetuosa de escucha, aprendizaje y convivencia,
pueden cultivar la opinión y dar madera a los anhelos hasta las
siguientes elecciones
y enfrentar la flojera, el burocratismo y el centralismo burocrático
Y encarar la explotación, la humillación y el bozal de arepa
Un
poeta cuando se asume obrero o un obrero cuando se sume poeta pueden
escribir, y pintar, y cantar, y esculpir, y hacer cine y video y
televisión y radio y periodismo y teatro alternativos, de calidad, esto
es, revolucionarios
Y recuperar las prácticas ancestrales de la cestería, la cerámica, el laboreo, el pastoreo y la fiesta tribal
Y
hacer algo siempre para reducir las distancias entre mil-millonarios y
misérrimos, educados y analfabetas, patrones y proletarios
Un poeta/ obrero debe ser capaz además de valorar todos los tipos de trabajo y darles una compensación justa y decorosa
E impedir que el sistema de salud pública y de pensiones sea convertido en harén de burócratas o caja chica de trasnacionales
Un
poeta obrero debe y puede ayudar a superar el mero el describir el
mundo, y aventurarse a transformarlo, transformándose cada cual con él.
Puede prevenir o denunciar las guerras y las provocaciones de guerra imperialistas
Confrontaciones en que por lo común se destripan 9 civiles por cada soldado
Y deplorar las injusticias, donde quiera se practiquen
Y cultivar la savia de vida, no las políticas del miedo
Es practicar la indignación, el coraje y el sacrificio,
la palabra clara y la acción animosa en todo
Y no consentir ser pasto de egolatrías
Un poeta obrero no puede darse el lujo de ser ingenuo o come-flor
Ni amargado ni pesimista
Debe saber, con Rosa Luxemburgo, que: “el día en que realmente alcancemos la revolución
el más revolucionario va a descubrirse reaccionario”
Y sentir que la muerte por una causa colectiva, viable, justa y hermosa no es cosa rara en la historia
ni épica