“Ningún despliegue militar detendrá a Venezuela, en su camino de independencia”. Ningún ente extranjero, por más poderoso que diga ser, puede venir a amenazar la alegría y los derechos de desarrollo de la Venezuela, de: Guaicaipuro, Simón Bolivar, Antonio Jose de Sucre, Ezequiel Zamora, Fabricio Ojeda y del Comandante Chávez. Nadie, ninguna amenaza, ningún despliegue aeronaval, por más poderoso, intimidatorio que pretenda ser contra el pueblo de Venezuela, contra los pueblos del Caribe, los pueblos de Latinoamérica, no nos va a quitar la alegría. Nadie nos va a quitar nuestro derecho de trabajar en los proyectos que debemos seguir desarrollando, para que Venezuela, siga el camino de su libertad, de su independencia, con trabajo, con dignidad, con prospectiva de futuro la victoria siempre será nuestra.
Que le importa al pueblo venezolano, que el Gobierno de Trinidad y Tobago se preste para que Washington, agreda a Venezuela, la presencia militar gringa en Puerto España pone en riesgo la seguridad de sus propios ciudadanos. Un nuevo ángulo en la narrativa del Gobierno de Estados Unidos, de señalar a Venezuela como un “narcoestado” ha sido difundido a través de medios internacionales, luego de que funcionarios de la administración de Donald Trump y supuestos expertos en tráfico de drogas dijeron que los barcos que han destruido las fuerzas militares desplegadas en el mar Caribe transportaban cocaína hacia Europa. Información que no ha sido demostrada, solo una narrativa para acusar al pueblo venezolano. Las corporaciones mediáticas al servicio de los EE.UU. y la Unión Europea, han manejado una narrativa para descalificar al gobierno Chavista a los fines de sacarlo de Miraflores.
En un inesperado giro de argumentos, la cadena NBC citó las declaraciones, señalando que, al parecer las embarcaciones no se dirigían a territorio norteamericano, donde el consumo de fentanilo se ha convertido en una amenaza alarmante para los ciudadanos y se ha cobrado miles de vidas en los últimos años. El fentanilo no sale de Venezuela. El fentanilo viene de México, aseveró Christopher Hernández Roy, investigador principal del centro de estudios estratégicos e internacionales de Washington. Esta nueva afirmación profundizó las dudas y cuestionamientos sobre las operaciones norteamericanas en aguas internacionales, ya que, en ningún momento, la Casa Blanca ha presentado evidencia sólida que justifique ataques a lanchas y los asesinatos de sus tripulantes. Estamos en presencia de crimines que se cometido por la Armada estadounidense que no han sido castigados.
Luego del evidente fracaso del guion para criminalizar a Venezuela, diciendo que la droga que entra a Estados Unidos, proviene de la nación suramericana y así tener una excusa para ejecutar una invasión, decidieron llevar el asunto hacia otro enfoque. Distintos grupos, políticos, organismos internaciones y países de todo el mundo han condenado la escalada estadounidense y han exigido que cesen las agresiones.
Frente a la agresión hay que mantener la cordura, basta de amenazas, basta de militarismo y basta de fascismo, pide el pueblo venezolano. Maduro es víctima del imperialismo. Es la historia grande, es un proyecto para colonizarnos, otra vez, para dominarnos, para saquearnos, para destruir nuestra identidad, nuestra cultura, para destruir nuestro derecho al futuro. Primero vinieron por Venezuela y pocos dijeron algo, porque no eran venezolanos, pudiéramos decir. Vinieron por Cuba y algunos dijeron algo, pero otros callaron. Ahora, vinieron por Colombia y algunos miran de lejos y no hablan.
Yo diría: que no se complete la frase, que no vengan por los demás.
Ojalá, América Latina y El Caribe y el pueblo noble de Estados Unidos podamos responder a tiempo. Basta de amenazas, basta de militarismo y basta de fascismo.
