María Concha Alonso (hermanita del otro Alonso: (el de Daktari)

Es que existe una ausencia de valores del carajo. Esta mujer, que en
sus días de activista artística en la televisión venezolana fomentaba
el escándalo, la rochela, el vivalapepismo, ahora sale hablando paja
sobre DECENCIA Y "democracia", ¿ qué vaina es esa? Ahora resulta que
Maranella Salazar, por ejemplo, nos va a dar clases sobre "lo malo
del adulterio" o Ibéyise Pacheco abrirá un taller de "como debe
comportarse un periodista". Para mi que hay una locura global
apoderándose de los escuálidos que los vuelve locos de bola. El colmo.

Tengo miedo que Dios provoque otra vez aquel castigo infringido a
Sodoma y Gomorra y que caigamos inocentes en la misa olla con esos
vándalos.La señora Concha Alonso(¿hasta cuándo esa vaina de Conchita
con una mujer que debe andar rondando los sesenta años de edad?) Ella
es de los tiempos de cuando Marianella Salazar tenía una línea
telefónica desde Miraflores a su casa mandada a instalar por el
"Gocho" (perdonen el farandulerismo, pero a estas mujeres hay que
hablarles con la verdad , ¿acaso ellas son de otro mundo?) que le
mandó a instalar el gocho viejo verde Carlos Andrés que se la daba de
galán con esa boca de su madre que no ha de quitársela ni la muerte.
Marianella Salazar y María Concha son igualitas.Dos sexagenarias
bonchonas. María Concha andaba en moto, por las calles del Este y la
otra, Marianella se la pasaba en Venevisión tratando de ser estrella
de telenovelas. Todavía ese canal recuerda el dineral que le hizo
perder con una de esas culebras que llamaron BALUMBA,la cual produjo
que a Marianella después la llamaran Balurda con muchísima razón, pues
era tan tapada para aprender una letra de su libreto, que el director
de la susodicha telenovela decidió cortar por lo mejor: sacarla del
aire. Pues bien María Concha no es un ejemplo para nadie. Allá se la
pasa, en Miami, con la gusanera, pues no debemos olvidar que ella es
cubana anticatrista. Es decir, es paisana de Fulgencio Batista y de
esa nueva versión de Jack el Destripador llamado Posada Carriles.

María Concha es una cubana bonchona. Que apoye al GOLPISTA ROSALES no es nada del otro mundo. Ella fue una "madmoasel" de la era IV-R, donde
la orgía, el destape, el cojeculo era algo brutal por los núcleos
gobierneros. ¿Será por eso que Oswaldo Álvarez Parr (por Paz),
"bombillo é túnel" le pega tanto la nostalgia y se pone a llorar como
una madre al recordar cuando se entraba a palo limpio con el otro: el
Fernández, que se la pasa con esa nariz como el tercer faro de un
semáforo, de arriba abajo) Fue en esa época cuando a Carlos Andrés
Pérez se le destapó un deseo incontrolable de "echarse el talco por
la nariz". Tan contundente fue ese vicio para el ex, que un día en
Miraflores, un tramoyista del VTV lo sorprendió en el acto y al día
siguiente el tramoyista salió del canal del Estado como corcho de
champaña (¿hasta cuándo de limonada?) María Concha no tiene nada que
enseñarle al pueblo. Su apoyo al GOLPISTA ROSALES ES EL MISMO QUE LE
DA EL BUSHrro con el olor a güiski. María Concha es la Mesalina que se
contorsiona, la Lucrecia Borggia que se desdobla en cualquier cama de
un imperio, la Cleopatra, que puede muy bien, por dinero,
suministrarle un áspid en la cama a cualquiera de sus amantes de
turno. Ese apoyo al GOLPISTA ROSALES no proviene precisamente de
alguien con una vida de Moral y Luces. María Concha es una pasajera
de la noche, buscando una luz que le alumbre la vejez.

aenpelota@gmail.com


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Ángel V. Rivas

Limpiabota, ayudante de pintura, articulista, Productor Nacional Independiente, editor de El Irreverente. Animador del programa Gigantes del Romance, autor del libro Pacto Satánico y poeta en estado de frustración.

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