Todo en la vida es costumbre, el dolor por la desaparición física de un ser querido, la nostalgia por los diversos momentos o situaciones de la vida misma, se vislumbra en un determinado momento en la mentes de las personas.. El pasado y futuro no son reales y solo viven en nuestro mundo interior, el pasado era nuestro presente de entonces lo mismo el futuro que será el presente inmediato, en si solo el presente existe..
He sido un asiduo curioso de lo incomprensible, de lo desconocido, de las historias contadas como verdades y que a la final no son como no las relataron, siempre ando indagando y mi mente divaga todo el tiempo sobre esto..Desde ese mismo momento, donde emitimos el llanto natal, somos esclavizados a un sistema de normal y leyes ya establecidas..
Normas y leyes creadas para darle una supuesta convivencia a una sociedad, formada por diversas individualidades, cada una con sus propios mundos interiores únicos y a todo esto existe otro factor esclavizante el “Tiempo” ese tiempo que solo es visible en un simple instrumento constituido por números y manecillas que giran lentamente, pero que nos impone un ritmo que limita nuestra libertad y moldea nuestra existencia, a este entramado de normas, leyes y tiempo se suma que somos etiquetados con un número incrustado en un carnet, de modo que nuestra identidad queda reducida a un simple código, que nos define dentro de un sistema que nos controla y nos identifica..
En Medio de todo esto surge en mí una inquietud, que ya se viene hablando por allí, es sobre la Matriz o ese sistema de simulación, que según somos dirigidos por una elite que moldea nuestra percepción y limita nuestra libertad, aunque esto no está comprobado, pero nos invita a reflexionar sobre esta posible realidad, planteándose un enigma fascinante sobre nuestra existencia...¿Cuál será la verdad oculta?...
