Evolución, alcances y obstáculos en la construcción del estado comunal (IV)

ESTADOS ABORTADOS-NUEVA CULTURA- LA REVOLUCION DESDE ABAJO- LAS DESVIACIONES DEL SOCIALISMO-NI UN ESTADO OBRERO NI UN ESTADO BURGUES

ESTADOS ABORTADOS

La historia es un hilo genético a través de la cual se van hilvanando los diferentes procederes de las construcciones que han sido posibles y que luego han sucumbido ante los arteros y permanentes ataques y asedios del enemigo.

Reflexionar críticamente acerca de las experiencias socialistas del siglo XX resulta en consecuencia, además de un compromiso con la historia de los pueblos, un empeño vital a la hora de replantearse hoy la superación del capitalismo, sus vías y métodos, y las formas de organización y participación de los protagonistas fundamentales. En este sentido, resulta claro que lo relativo a la democracia, la participación y el control populares, tienen tanta importancia como lo inherente a la construcción de un nuevo poder y una nueva cultura. De conjunto, resultan cuestiones de fondo que hacen a la posibilidad de construir la nueva sociedad, que en el siglo XXI requiere –junto al rescate crítico de las enseñanzas de las experiencias socialistas del siglo XX-, de nuevos enfoques y propuestas. (Rauter, 2009).

Cuando se hace referencia a la nueva cultura lo hacemos en el sentido de establecer una cultura a la manera en que la entiende Samir Amín citado por Ludovico Silva (2012) que "la cultura es el modo de organización de los valores de uso" mientras que la contracultura de la sociedad capitalista se fundamenta en los valores de cambio" (pág. 71).

Esa nueva cultura para la sociedad en construcción debe ser basada en la negación de aquellos valores de las formaciones precedentes que impiden la liberación del hombre.

Tal vez uno de los graves y grandes tropiezos de construir otra sociedad haya sido el repetir la organicidad de los elementos tradicionales de la distribución y organización de la misma. Con mucha razón afirma que "aún los países que se autodenominan "socialistas" tiene que sufrir los riesgos de una economía mercantil y monetaria, y el proletariado, dominado brutalmente por la burocracia, sigue sujeto a la "ley del bronce" del salario" (pág. 75); de seguidas agrega que "el capitalismo no ha agotado sus fuerzas productivas, y siempre encuentra - aunque sea a través de la guerra- nuevas formas de sobrevivir. Pero este modo de producción no es eterno. Como otros modos de producción, tendrá que llegar a su fin, que mucho me temo será difícil y doloroso, por no decir catastrófico" (pág., 76)

UNA NUEVA PROYECCIÓN ESTRATÉGICA: LA REVOLUCIÓN DESDE ABAJO

Dentro de ese marco se puede afirmar siendo coherentes con la historia la esperanza que llego a significar la revolución de octubre; Una gran experiencia histórica y como protagonista y ejemplo para la humanidad fue la extinta URSS donde la presión del imperialismo tuvo como objetivo el cambio de la naturaleza misma de esa sociedad donde se echaron las bases para establecer otra forma de propiedad; paralelamente ante el enemigo externo surgió un adversario interno –al cual haremos referencia más adelante-que a la larga fue adquiriendo un poderío de Estado dentro del Estado: la burocracia.

El estado socialista producto de los acontecimientos iniciados en 1905 en la Rusia zarista, fue producto de lo que algunos investigadores llaman una revolución desde arriba, en la cual según Rauter (2009) "apelaron al estado como herramienta fundamental del cambio e hicieron del partido (de vanguardia) su personificación política. Se centraron en la conquista del poder político para – desde ahí, - poner fin a la propiedad privada de los medios de producción y de la producción toda. Apostaron a la política (institucionalizada) para modificar la economía y, a través de esta toda la sociedad la misión del partido de vanguardia era-en esa estrategia –garantizar esto".

Como se dijo al comienzo que la historia es una hilvanacion genética, se encargaría de mostrar lo errado de colocar al partido por encima de todo forma de pensar y de hacer, lo cual trajo como consecuencia el aislamiento y la exclusión del poder popular que se había implementado al inicio con los soviets, los cuales fueron en su momento cenit la representación real de un nuevo poder ante el estado tradicional. El partido término secuestrado y no precisamente por sus mejores hombres y mujeres. Nacía así, un extraño y omnipotente poder interno dentro de la revolución.

Además de considerar al partido como la vanguardia que realizaría los cambios de una sociedad enteramente feudal a un estado socialista, también sus máximos dirigentes pensaron que el cambiar la estructura de la economía y entendieron como objetivo fundamental que lograr el desarrollo económico , lo cual configuraría el periodo de transición al socialismo "entendido y aceptado como sustrato de la base "material" indispensable para pasar al socialismo" se alcanzaría apelando a un peculiar socialismo estatista.

Ese socialismo estatista colmo toda la vida de los habitantes de la antigua URSS y de otros países de su área de influencia; la vida social fue colmada en los mínimos detalles, lo invadió todo, "incluso el desarrollo de la vida doméstica, tergiversando-cuando no contrariando-, el postulado originario de la liberación" (Rauter, 2009).

La liberación de un pueblo debe marchar aunada a la construcción de una nueva cultura como elemento clave para la superación del capitalismo; esa oportunidad de realizarla fue desechada por los procesos socialistas centralistas y estatistas, pues la practica centralista del estatismo aumento el funcionamiento burocrático, incrementando los métodos autoritarios, verticalistas y subordinantes heredados de las sociedades clasista anteriores. Esa liberación y la nueva cultura que se traducen en la terca aspiración humana de intentar cambiar el mundo en la conformación de una sociedad que al mismo tiempo que insiste en el reparto de la riqueza, hacerla mejor y más habitable, procura aliarse a la expansión de las capacidades productivas del hombre.

Aunque que para algunos pueda resultarles tremendista se puede afirmar que los socialismos estatistas que si bien fueron procesos revolucionarios del momento no es menos cierto que fueron procesos en los que les fue arrebatado al pueblo mediante la exclusión, donde los Soviets como

expresión del poder asambleario, lentamente, las decisiones sobre las transformaciones, los pasos a seguir, los esfuerzos a entregar, le fueron arrebatados de sus manos y de su conciencia.

En consecuencia y por si esto fuese poco, al final la antigua URSS se desmorono y el Estado soviético fue abortado o mejor dicho se decretó el "cambio desde arriba" -a través de lo que se dio en llamar la perestroika y glasnot- generando una serie de discusiones no siempre bien intencionadas sobre el futuro del socialismo a raíz de los acontecimientos del llamado socialismo real; socialismo "real" que de real tuvo fue el imponer según Moleiro (1992) " una burocracia de administradores, jerarcas del partido y jefes militares que en un proceso difícil y cruento despojó a los productores del control de la producción y, posteriormente, de sus derechos políticos, así como el disfrute de un poder que habían conquistado" (pág. 27).

Lev Davidovich Bronstein (Trotsky), en su documento de 1937 "Ni un estado Obrero Ni un estado Burgués" refiere que "en su calidad de mecanismo transmisor en esta lucha, la burocracia se apoya ya en el proletariado contra el imperialismo, ya en el imperialismo contra el proletariado, con el fin de aumentar su propio poder. Al mismo tiempo explota sin misericordia su papel de distribuidor de escasas necesidades vitales, con el objeto de proteger su propio poder y bienestar". La capa de la burocracia se erigió en la conductora de un Estado que se proclamaba Obrero, pero donde su clase dirigente a la vez también era una clase oprimida.

Ese Estado Obrero de la antigua URSS, luego de estar en manos de la burocracia en tanto dictadura "sobre el proletariado", al caer como resultado de una deliberada implosión, significó la destrucción de conquistas que se mantenían de la revolución de los Estados Obreros burocratizados, donde se aplicaron los planes del FMI, la reversión de los derechos sociales, además de la abrupta caída de las expectativas de vida de la población, en fin el regreso al estado liberal burgués es decir la restauración burguesa en pleno siglo XX y XXI. (Maldonado y Maiello, 2011).

La deformación burocrática representa una herencia directa del régimen burgués y siempre resurge de sus cenizas para devorar y carcomer las revoluciones y el despertar de los pueblos, pues reciben nuevas fuentes de nutrición y se convierten en factores decisivos que hacen mutable los cambios originarios e inéditos, ese riesgo es permanente pero evitable en el Estado Comunal.

LO PARTICIPATIVO Y EL NUEVO CONSTITUCIONALISMO LATINOAMERICANO.

Para la construcción del Estado Comunal es imposible partir de cero, de allí que sea importante ir tomando los espacios conquistados por las luchas de los pueblos; un ejemplo lo tenemos cuando en Venezuela el comandante Hugo Chávez luego de ser investido como presidente de la republica pudo hacer un llamado a realizar la Asamblea Nacional Constituyente la cual no estaba prevista ni contemplada en la Constitución Nacional de 1961.

Efectivamente, La Ley Orgánica del Sufragio y Participación Política de 1998 abrió la compuerta al permitir mediante el referendo consultivo se consultará al pueblo, con carácter decisorio, sobre la conveniencia o no de convocar una Asamblea Nacional Constituyente avalado por la decisión de la sala Político Administrativo de la entonces Corte Suprema de Justicia con fecha de 19 de enero de 1999.

Establecida la materia refrendaría en la precitada ley en su artículo 181, ya que dicha instancia política no se encontraba regulada en el texto constitucional de 1961.Es decir, fue un proceso

constituyente de iure, esto es, que se trataba de un proceso enmarcado dentro del sistema jurídico venezolano( CSJ-SPA, 21-07-1999); Quedando plasmado según Rincón Y Fernández (2006), "el elemento del poder como fuente legitimadora del proceso constituyente originario, estuvo plasmado en la definición del poder constituyente originario".

Decía Montesquieu en su Espíritu de las Leyes que es frecuente que en los Estados florezcan más en el paso insensible de una constitución a otra, de lo que hacían bajo una u otra constitución. A través de ese eficaz y relevante artículo estaba la semilla que haría germinar la consulta al pueblo sobre la Asamblea Nacional Constituyente; es decir desde una constitución basada en el derecho liberal burgués donde sus defensores fueron presas de las contradicciones surgió la luz para allanar el camino de la participación y protagonismo del pueblo invisibilizado por años en sus decisiones.

Con ese llamado a constituyente comenzó a florecer lo que fue el proceso de re-constitución en todo lo que fue la discusión, aprobación y posterior sanción de la Constitución Nacional de la República Bolivariana de Venezuela. Lo que ha hecho posible colocar en movimiento la forma del Estado que hasta ahora hemos tenido y que dará nuevo fundamento jurídico al Estado Comunal.

A lo largo de la lucha de los pueblos por ampliar sus derechos como constructores de su protagonismo existen ejemplos reales donde las constituciones de países como expresión del Estado Liberal burgués dieron como resultado el incorporar y reconocer algunos derechos; estos elementos se podrían considerar como algunos antecedentes elementales del nuevo constitucionalismo latinoamericano y pregón de entrada del Estado Comunal.

En ese sentido, los avances se van logrando, aunque no con la velocidad aspirada, pero las exigencias de los pueblos como catalizador hacen posible que en las distintas constituciones se vayan incorporando derechos sociales, culturales, políticos y económicos que permiten ampliar el rango del horizonte de los mismos, creando el espectro de acuerdo a las realidades de cada país o región.

Así tenemos según lo relata Palacin (2010) que desde la década de los ochenta del siglo XX se reconoce e incorpora el multiculturalismo: la identidad cultural, inclusión de los derechos indígenas específicos; el caso del constitucionalismo multicultural de Canadá (1982), Guatemala (1985), Nicaragua (1987); Luego en la década del noventa del mismo siglo, se incorpora los derechos contenidos en el convenio 169 de la OIT, donde además de reafirmar el derecho a la identidad y diversidad cultural se desarrolla el concepto de "nación multiétnica" y "Estado Plurinacional", calificando la naturaleza de la población y avanzando hacia el carácter de estado.

Ese reconocimiento de derechos, el hecho de que sean incorporados, no implica ni garantiza que surjan contradicciones por la adopción simultánea de derechos indígenas y políticos que permitan nuevas formas de despojo territorial indígena como no se había dado desde el siglo XIX. (De Sousa).

Ese nuevo constitucionalismo que viene surgiendo desde la emergencia del sur es un ejemplo a decir de Yrigoyen (2010) de los importantes cambios constitucionales que se han dado en el continente, donde lo novedoso es que han sido planteados por diferentes actores sociales entre ellos movimientos sociales emergentes, como los movimientos indígenas, de mujeres, de derechos humanos, de ecologistas, siendo de igual importancia que han puesto en cuestión los dogmas de la teoría del derecho y del estado, la ecuación Estado-Nación y Estado de Derecho y definición de Derecho.



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Heriberto Rivera


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