Este sábado el diario estadounidense The New York Times publicó un artículo de opinión reconociendo que las sanciones de Estados Unidos (EEUU) contra Venezuela, Cuba y Siria han tenido un "historial terrible" ya que han producido consecuencias devastadoras para esos pueblos y al mismo tiempo han sido contraproducentes para los intereses de Washington.
El medio menciona los riesgos de lo que considera como "una de las herramientas más severas en el arsenal de política exterior estadounidense". Según la información suministrada, el país norteamericano "representa el 42 %" de las medidas coercitivas impuestas en todo el mundo desde 1950.
"Las sanciones económicas se han convertido en una herramienta de primer recurso para los políticos estadounidenses", se lee. En este sentido, agrega que el número de nombres en la lista de penalizaciones de la Oficina de Control de Activos Extranjeros del Departamento del Tesoro aumentó a nueve mil 421 en 2021. Sobre este punto, afirma que la administración de Donald Trump "agregó alrededor de tres nombres por día a la lista".
Efectos contraproducentes de las sanciones
Aunque el diario considera a las medidas coercitivas y unilaterales una alternativa para tener una diplomacia exitosa, indica que también generan efectos contrarios.
"Si bien las sanciones son fáciles de imponer, son política y burocráticamente difíciles de levantar, incluso cuando ya no sirven a los intereses de EEUU. Las sanciones también escapan al escrutinio público significativo. Pocos funcionarios son responsables de si una sanción en particular funciona según lo previsto en lugar de dañar innecesariamente a personas inocentes o socavar los objetivos de política exterior".
En este sentido, el artículo afirma que las sanciones impuestas a Venezuela, Cuba y Siria generaron efectos contraproducentes para EEUU. "La inclusión en la lista negra del sector petrolero de Venezuela ha exacerbado una crisis humanitaria", refiere el texto.
Seguidamente añade: "Las sanciones a la industria petrolera, que representa alrededor del 90 % de las exportaciones del país, causaron recortes dramáticos en los ingresos del gobierno y aumentos significativos en la pobreza".
De acuerdo con el Departamento del Tesoro, las sanciones deben evaluarse sistemáticamente para asegurarse de que sean la herramienta adecuada para las circunstancias. Según el ente, las medidas deben estar "vinculadas a resultados específicos" al tiempo que deben "tener cuidado para mitigar los "impactos económicos y políticos no deseados".
Finalmente, el artículo admite que las medidas coercitivas y unilaterales deben tener objetivos y criterios de alivio. El informe concluye que si no se cumplen con esos parámetros, "corren el riesgo de ir en contra de los intereses y principios estadounidenses".