La noticia de que la Asociación Nacional Republicana (Partido Colorado), que gobierna el Paraguay desde hace más de 60 años, adoptó el socialismo humanista como ideología ya recorrió el mundo. La noticia, generada por diversas agencias informativas, puede leerse en las versiones digitales de casi todos los diarios de América Latina, incluso en los sitios de información alternativa.

Quienes en el mundo simpatizan con las ideas socialistas pudieran sentirse entusiasmados pues el hecho significaría un afianzamiento de la tendencia hacia la izquierda que se viene notando en la región desde hace varios años. Pero, ¡cuidado!, las apariencias engañan.

Veamos primero la parte de la realidad que las noticias no cuentan. La adopción del socialismo humanista como ideología acurrió en la convención del Partido Colorado, llevada a cabo el pasado fin de semana, sin ningún tipo de debate. Cosa rara en un partido que protagonizó uno de los regímenes más ferozmente anticomunistas de sudamérica, que no distinguía entre comunistas, socialistas ni nada que oliera a izquierda. Me atrevo a decir que la mayoría de los convencionales ni siquiera sabía que el tema iba a ser tratado.

Este asunto es obra del presidente de la república y del Partido Colorado (con permiso), Nicanor Duarte Frutos. Es una muestra del más descarado oportunismo. El presidente, en su discurso ante la convención, criticó el neoliberalismo, el ALCA, dijo cosas que acostumbramos a escuchar de boca del presidente venezolano Hugo Chávez. Pero que nadie se llame a engaño, son sólo palabras que no tienen nada que ver ni con la historia ni con los hechos actuales.

Primero la historia. Dice Oscar Creydt en “Formación Histórica de la Nación Paraguaya”, en relación al proceso posterior a la guerra contra la Triple Alianza (1864-1870):

El sistema económico-social creado por la revolución nacional fue reemplazado por el sistema económico social imperante en los países vencedores. La estancia latifundista y ganadera orientada hacia la exportación y la explotación forestal latifundista exportadora de materias primas se convirtieron en los sectores fundamentales de la economía. En consecuencia, el país perdió su independencia económica y política. Una reforma agraria retrógrada despojó al Estado de la mayor parte de sus tierras al mismo tiempo que expropió a la mayor parte de los campesinos. El objeto de esta reforma neofeudal consistía en transformar los campesinos libres en ocupantes de propiedades latifundistas, en campesinos dependientes de las estancias y en esclavos de grandes empresas forestales de capital extranjero.

( ... )

Este cambio retrógrado en la estructura económica y en el régimen político del país no se debió solamente a la Guerra de la Triple Alianza. Fue un reflejo de la profunda transformación que el sistema capitalista sufrió en las dos últimas décadas del siglo pasado, al degenerar en capitalismo monopolista y exportador de capitales. La ley de 1883, en virtud de la cual se convirtió a las tierras del Estado en grandes latifundios, fue hecha con miras a entregar el territorio nacional a capitales europeos, norteamericanos, brasileros y argentinos.

El principal autor y responable de esta transformación antinacional es el Partido Colorado. Su jefe, el general Bernardino Caballero, había actuado como un héroe en la gran guerra patria bajo la jefatura del mariscal López, pero, poco después, al regresar del Brasil, renegó de la causa nacional, calumniando a López como el peor tirano de la historia universal. Al mismo tiempo, mediante la ley de 1883, dio el último golpe al régimen económico y social surgido de la Revolución de 1811 y de los gobiernos de Francia y de los López.

La dictadura de Alfredo Stroessner, que participó del Plan Cóndor, se caracterizó por una cruel y sanguinaria represión contra todo el que osara plantear una reivindicación social o popular, peor aún si resultaba sospechoso de tener ideas de izquierda. El Archivo del Terror es testimonio de aquellos años. Pero no solo la represión caracterizó a la dictadura de Stroessner, hasta su muerte presidente honorario del Partido Colorado. Durante su gobierno se consumó la entrega de nuestra soberanía energética mediante los Tratados de Itaipú y de Yacyretá.

Stroessner continuó y perfeccionó la privatización de las tierras del Estado iniciada por el fundador del Partido Colorado. Mediante una amañada reforma agraria se entregaban tierras a campesinos pobres que abandonados en medio del mercado terminaban vendiendo esas tierras que iban a parar a manos de los paniaguados del régimen. Varias de las actuales grandes propiedades son las llamadas "tierras malhabidas", fruto de la dilapidación de millones de hectáreas de tierras destinadas a la reforma agraria. Todos los presidentes de la república desde 1954 se autoadjudicaron centenares de hectáreas destinadas a campesinos sin tierra (del actual aún no tenemos datos). Hay casos de políticos oficialistas, amigos de autoridades, militares y conocidos capos de la mafia de la droga que han sido adjudicados no una sino decenas de veces con miles de hectáreas. Hasta el ex dictador de Nicaragua, Anastasio Somoza, obtuvo tierras en el Chaco y se rumoreó que la visita que una de las hijas de George W. Bush hizo al pais hace unos meses tuvo por objetivo inspeccionar unas tierras de su padre en la región del Alto Paraguay.

Ahora le toca el turno a la realidad actual. Quizás el mejor termómetro para medir el grado de socialismo de un gobierno sea su comportamiento ante los conflictos sociales. Hace pocos días el presidente Nicanor Duarte Frutos, quien asumió la presidencia en agosto de 2003, criticaba a los ganaderos (¿actitud socialista?) y les recordaba que bajo su gobierno habían cesado las ocupaciones de tierras por parte de los campesinos. La represión de la protesta social, especialmente la campesina, ha sido una característica de los gobiernos, todos colorados, desde la caída de la dictadura, pero alcanzó su clímax durante el actual gobierno, a pesar de que al presidente le encantaba ser fotografiado con gorra de aviador à la Chávez.

FIAN Internacional y La Vía Campesina realizaron en el marco de su Campaña Global por la Reforma Agraria una misión investigadora a Paraguay para conocer el estado de la realización de la reforma agraria en tanto obligación de derechos humanos. La misión contó con el apoyo y la participación de la Obra Episcopal Alemana de Cooperación al Desarrollo, Misereor, y se llevó acabo del 27 de mayo al 3 de junio de 2006. Parte de su informe dice:

Las familias que se organizan para ocupar pacíficamente tierras que no cumplen su función económica y social como último recurso para presionar a las autoridades estatales a implementar la legislación existente sobre reforma agraria son detenidas, por lo general de manera arbitraria, con cargos penales en el curso de los desalojos. La cantidad de personas detenidas e imputadas por invasión de tierras o por participar en cortes de ruta y otras manifestaciones de protesta alcanzó en el 2004 la cifra de 1.156 y un total de 7.018 en el período 1990- 2004. Las organizaciones campesinas entrevistadas por la misión calculan que 2 mil de sus miembros se encuentran actualmente imputados con cargos penales

Por su parte, el Dr. Alberto Alderete, director de la ONG SEIJA (Servicio Jurídico para el Desarrollo Agrario) y catedrático de la Facultad de Derecho UNA, dice en su informe “El problema de la tierra en Paraguay”,

Los conflictos por la tierra han sido duramente reprimidos y controlados por la Dictadura Stronista a lo largo de los 35 años que duró, pero al ser derrocado por un golpe de estado en 1.989, se inicia una apertura política con vigencia de las libertades y promesas gubernamentales de vigencia plena de los derechos humanos.

La apertura política generó profundas aspiraciones de cambio en el campesinado quien interpretó la caída de la dictadura como una revolución política y social, pues entendía la democracia desde una óptica de satisfacción de sus postergadas necesidades sociales. Explota el problema de la tierra y miles de campesinos se lanzan a ocupar los latifundios improductivos y tierras malhabidas de militares y políticos, generalizándose ocupaciones en todo el territorio nacional. La tierra y las movilizaciones campesinas irrumpen en el escenario político nacional ocupando un lugar preponderante en la agenda del nuevo gobierno, el parlamento y el poder judicial.

( . . .)

El poder judicial actúa y ordena en forma arbitraria e ilegal detenciones masivas, llenándose las cárceles de campesinos sin tierra, superando la capacidad de los penales de todos los departamentos del país.

( . . .)

Desde 1990 han sido ejecutados extrajudicialmente 100 dirigentes campesinos por las fuerzas de seguridad del estado, de las cuales un solo asesinato fue esclarecido . . ., el resto de las ejecuciones han quedado en la impunidad.

( . . . )

Las FFAA han intervenido en conflictos de la sociedad civil como el de los campesinos. En lugares como 8 de diciembre, del departamento del Guairá, un asentamiento oficial creado por el INDERT se instaló un destacamento militar. En el asentamiento Santa Elena del Departamento de San Pedro, fuerzas militares realizaron un desalojo forzoso de una antigua comunidad , quemando viviendas y pertenencias de los dueños de casa. Muchas propiedades con cultivos de soja y haciendas fueron guardiadas por efectivos militares.

Están de moda las obras sociales del gobierno, realizadas sobre todo mediante los fondos que la Itaipú Binacional destina a ello como parte de su “responsabilidad social”, y que es el modo en que el Partido Colorado perpetúa el esquema clientelista que le permite perpetuarse en el poder. Pero no se trata sólo de eso. Es la manera en que la clase dominante se enriquece. La lectura de los diarios de los últimos meses nos provee un frondoso muestrario de casos de “socialismo humanista”, en las más diversas areas del quehacer estatal.

Educación. Conviene recordar que el primer cargo político relevante del presidente Nicanor Duarte Frutos es el de Ministro de Educación del gobierno de Juan Carlos Wasmosy, el gobierno paraguayo más claramente neoliberal. La merienda escolar es un programa de complementación nutricional para niños de escuelas de zonas de bajos recursos. Se ha descubierto toda clase de irregularidades administrativas típicas, como privilegiar a proveedores que casualmente están emparentados con el entorno gubernamental y, como coronamiento, los alimentos proveidos no cumplen con los requerimientos nutricionales establecidos. También para esa misma población se reparten kits escolares al inicio del año escolar, finales de febrero. Los de este año no se han entregado aún. Información adicional: la actual ministra de educación es la candidata favorita del presidente para sucederle en el cargo.

Salud. Kits de parto para futuras madres de pocos recursos. Incompletos, con componentes de muy baja calidad, vendidos ilegalmente, etc.

Agricultura. El gobierno implementó un sistema para entregar gratuitamente semillas de algodón y además subsidiar en dinero a los agricultores que las plantaran. La distribución de semillas y el subsidio no lo hace el gobierno directamente sino a través de algunas empresas. Los diarios nos cuentan de miles de bolsas de semillas no entregadas pero los subsidos supuestamente pagados, miles de personas que no sabían que eran agricultores, que no sabían que habían plantado algodón y que no sabían que habían cobrado el subsidio. Además, gran parte de las semillas habían entrado al país de contrabando y contaminadas con material trangénico.

Una muestra de cómo se enriquecen a costa del pueblo los miembros del Partido Colorado que acceden a altos cargos la ha dado el presidente de la Cámara de Diputados, Víctor Bogado (que antes había pasado por la Conatel, el ente regulador de telecomunicaciones), con ocasión de su boda el mismo día de la convención colorada, celebrada con una fiesta que se dice costó más de 800 millones de guaraníes (160.000 dólares). La investigación de la actuación de Bogado al frente de la Conatel está bloqueada debido a sus fueros parlamentarios. Hay varios otros parlamentarios que no pueden ser investigados por la misma razón. Y se está volviendo una costumbre entre los políticos colorados celebrar sus cumpleaños con fastuosas fiestas.

Frente a tan descarado derroche el pueblo se muere de hambre y enfermedades. Hay un déficit anual de alrededor de 100.000 puestos de trabajo. La emigración de paraguayos desesperados es galopante. Lo único que evita que el país se hunda en la bancarrota son las remesas de dinero de los emigrados a sus familiares, que ya supera, como ingreso de divisas, a cualquier otra actividad economica (exportación de soja, de carne, etc.)

Como es fácil de ver, lo del socialismo humanista es puro oportunismo, sólo palabras. Quizás buscando apoyo quién sabe de donde para continuar en el poder. No es casual que en su discurso en la convención del Partido Colorado el presidente de la república y del partido haya dicho, "todos los partidos históricos han caído en América Latina porque pensaron que sólo sus estructuras o sus tradiciones podrían salvarles sin innovar su conducta y su visión", y luego afirmó que "está seguro" que los colorados "seguirán de pié" luego de los comicios generales de 2008. ''Con este cambio (ideológico), el partido Colorado está en condiciones de seguir gobernando durante los próximos 50 años''. Esto es lo único que les importa realmente.

Ciudad del Este, 1 de mayo (día internacional de los trabajadores) de 2007.

Rerefencias.

Creydt, O. Formación histórica de la nación paraguaya. Pensamiento y vida del autort. Compilación de Antonio Carmona. Servilibro. Asunción. 2004.

FIAN, Vía Campesina, La reforma agraria en Paraguay. 2006

Alderete, A. El problema de la tierra en Paraguay. 2005

Red de investigación Acción sobre la tierra http://www.acciontierra.org/display.php?article=410