En la actualidad la situación diaria de la gente es muy delicada, el problema de la alimentación se agrava con el paso del tiempo. Se puede decir que estamos en una situación que en el derecho internacional llama "Estado de Necesidad". Eso nos pone en una situación tensa y peligrosa en el ámbito internacional. El principio de injerencia y no intervención, la misma ONU, que no cumple sus resoluciones, podría mirar hacia otro lado.
En los actuales momentos, los recursos financieros de la república son muy escasos en el ámbito de las monedas internacionales. A pesar del aumento de los precios del petróleo, la caída de la producción petrolera nos impide obtener suficientes divisas para comprar alimentos.
A su vez, y a pesar de los pagos ya realizados, el gobierno está acumulando una deuda externa, con pago a futuro, tanto en divisas como en materia prima intercambiable (petróleo, oro, coltan entre otros), que no sabemos cuáles pudieran ser las consecuencias, dado la volatilidad de las relaciones internacionales con cualquier país aliado.
En ese sentido, el "Estado de Necesidad", es un arma de doble filo. En el futuro, será utilizado para justificar una intervención. Por ello, debemos mejorar la atención alimentaria de la población, porque si no logramos eso a mediano plazo, esta situación de "la intervención humanitaria", ya nadie podrá detenerla.
Las preguntas de reflexión son: ¿Cuantos países de américa latina y el mundo, son amigos de Venezuela? ¿Existe la posibilidad de un corredor humanitario con países amigos, donde todas las acciones de apoyo a Venezuela, sean realizadas por civiles? ¿Si el anuncio prematuro de las elecciones son un problema para Venezuela, existe la posibilidad de replegarnos tácticamente hasta agosto o Diciembre, mientras desplegamos por el mundo, un plan comunicacional efectivo de nuestra verdadera situación, su razón y el por qué ha resultado difícil para el gobierno superarlas?