07-11-20.-El máximo responsable de la misión enviada por la principal organización europea de seguridad y derechos para supervisar las elecciones presidenciales de Estados Unidos dijo que los asesores de Donald Trump deben aclararle que ha perdido en el caso probable de que se confirme este resultado.
El político alemán Michael Link dijo al grupo editorial Funke que las acusaciones de Trump de fraude y trampas en el proceso de recuento de votos eran infundadas y que con ellas se corre el riesgo de socavar la confianza en el sistema democrático de Estados Unidos, reseñó la agencia Reuters.
Trump, de 74 años de edad, se ha mostrado desafiante mientras se desvanecen sus posibilidades de conseguir un segundo mandato de cuatro años. Ha hecho repetidas afirmaciones infundadas de fraude electoral, mientras su equipo de campaña ha puesto en marcha acciones judiciales que, según expertos jurídicos, tienen pocas probabilidades de alterar el resultado de las elecciones.
"El presidente estadounidense tiene la gran responsabilidad de preservar la calma en Estados Unidos", dijo Link. "No estoy seguro de que esto esté claro para él".
Añadió: "Lo único que puedo esperar es que Trump tenga asesores bienintencionados que le digan si ha perdido. Todo indica que ese es el resultado que veremos pronto".
Link lidera la misión de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE), de la que Estados Unidos es miembro fundador, que durante décadas ha enviado delegaciones para supervisar la integridad de las elecciones en todo el mundo.
Joe Biden candidato por el partido demócrata se convirtió este sábado en el presidente número 46 de EEUU, según varios medios estadounidenses como FOX y CNN.
Trump ripostó asegurando que la elección está lejos de haber finalizado y criticó que el candidato demócrata, Joe Biden, se haya apresurado a reclamar falsamente la victoria en las elecciones presidenciales de 2020 en EEUU.
"El lunes nos veremos en los tribunales". "Se han contado votos falsos", dice en un correo enviado mientras está en su campo de golf en Virginia.