El regreso al gobierno nacional de grupos políticos identificados con la ultraderecha fascista ha traído un grave deterioro del contexto político colombiano con graves perjuicios para la paz, la convivencia y la vida de miles de líderes sociales y los derechos humanos.
De acuerdo con la percepción del periódico New York Times en el actual gobierno del Dr. Iván Duque la paz se está desmoronando (https://bit.ly/30MFOq4 ), los "falso positivos" regresaron de la mano del General uribista Nicasio Martínez, actual comandante del Ejército (https://bit.ly/30JBJTC ) y el exterminio de los líderes sociales se transformó en un espantosa industria de la muerte que no da tregua (https://bit.ly/2VQkWKC ).
Los anteriores hechos originan muchos temores y profundas preocupaciones entre quienes desarrollamos actividades en favor de la paz, contra la corrupción y por el derecho a la vida de los líderes sociales.
Esta nota la encabezo recordando al profesor, agrónomo y sociólogo Alfredo Correa de Andreis, quien fue asesinado en Barranquilla por los grupos paramilitares de Jorge 40, en el año 2004, por órdenes del Director del DAS de aquella época, Jorge Noguera, quien hoy paga una larga condena en una cárcel de Bogotá por tal crimen. Previamente, Correa de Andreis, fue estigmatizado por periodistas fletados del Das de Barranquilla, de ser "ideólogo" de las Farc y narcotraficante al servicio de dicha guerrilla.
En estos momentos me asalta una gran preocupación porque funcionarios de la misma calaña, inescrupulosos y envalentonados, puedan estar tramando algo contra mi vida en Armenia, capital del departamento del Quindío. En los últimos dos días he sido objeto de seguimientos e intimidaciones por parte de sujetos extraños que me siguen los pasos y actividades que realizo en Armenia.
Recientemente fui incriminado por el Vicerrector de la Universidad del Quindío, Luis Fernando Polania (https://bit.ly/2X9PdFY ), de ser un "ideólogo" de las redes del Ejército de Liberación Nacional – Eln, empeñado en infiltrar y desestabilizar la Universidad del Quindío. Sus afirmaciones se hicieron en CNC, un medio de comunicación de amplia difusión regional de propiedad de Habib Merheg Marum, quien es investigado por parapolítica por la JEP (Al respecto se puede consultar el video de la entrevista de Polania en la siguiente página web https://bit.ly/2YQeVjg en la que se sugiere abiertamente que "ideólogos" del Eln estarían detrás de campaña de desprestigio del Rector Echeverri de la UQ).
En igual sentido se refirió un comunicado de la Universidad del Quindío publicado el 12 de febrero del año en curso (2019) para tacharme de "ideólogo" con oscuros antecedente (https://bit.ly/30MvOwY ) a raíz del montaje judicial y carcelario (Tal como ocurre hoy con el sonado episodio de Jesús Santrich), orquestado por el gobierno de Uribe Vélez contra mí en el año 2007 y ejecutado por el Secretario General de la Presidencia de la Republica, Bernardo Moreno, oriundo de Armenia, quien fue condenado a varios años de cárcel por ser el artífice de las chuzadas contra los magistrados de la Corte Suprema de Justicia y por los sobornos de la "Yidispolitica".
Polania afirma olímpicamente que por mis publicaciones en Rebelión (Ver https://bit.ly/2X9dH1Z ) y en Kaos en la Red (https://bit.ly/2QmoymL ), dos páginas web alternativas, de pensamiento crítico y libertario, soy un "ideólogo" del Eln involucrado en sus estrategias de guerra. Inferencia completamente falaz que no tiene ningún sustento en la realidad.
Dicho mote de "ideólogo" es claramente acogido en los lenguajes de los funcionarios de la Universidad del Quindío (Rector, Vice Polania y Consejo Superior) como una estratagema de estigmatización y señalamiento con fines de descalificación y burla social para legitimar retaliaciones y actos arbitrarios de todo orden, como ocurrió con Correa de Andreis en Barranquilla.
Son los sentidos que rápidamente replicaron entre la opinión publica reconocidos testaferros de las elites regionales, que fungen como seudo periodistas, como en el caso de un tal Montalvo, una especie de lumpen social, cuya ocupación es el dicterio indiscriminado para de esa manera medio sobrevivir con su desgraciada condición humana (Verhttps://bit.ly/2Qo4QXP ).
Como quiera que mis condiciones de seguridad y mis derechos están seriamente amenazados por reconocidos clanes de poder regional en Armenia, estoy enviando una Carta a la Ministra del Interior, Doctora Nancy Patricia Gutiérrez, encargada del Plan de Acción Oportuna para proteger líderes sociales, al Procurador General de la Republica, al Defensor del Pueblo, a la Fiscalía General y a la Oficina de los Derechos Humanos de la ONU en Colombia para enterarlos de esta grave situación que estoy viviendo en el Quindío.
Las personas involucradas en este siniestro plan, como el Rector Echeverri y su subalterno Polania, son portadores de conductas reprochables que deben ser objeto de control por las autoridades judiciales y disciplinarias correspondientes. En la pasada huelga universitaria, durante el segundo semestre del 2018, el Rector Echeverri agredió físicamente a los estudiantes en la puerta principal de dicha institución, y Polania está en el centro de manejos oscuros en la Universidad para favorecer a sus familiares en Montenegro, con contratos millonarios de transporte. Montenegro es la cuna y un recipiente de violencia acumulada (Ver los estudios de Alvaro Villarraga al respecto), pues la pistola y la masacre han sido el sistema de gobierno de los gamonales liberales allí desde los años 50. En ese ambiente es que Luis Fernando Polania formo sus antivalores y conductas desviadas con las que supuestamente administra la extensión de la Universidad del Quindío y en la que junto al Rector Echeverri, liquida multimillonarios viáticos en euros en viajes recurrentes a Europa a supuestos eventos científicos.
Conviene aclarar que la arremetida de estos altos funcionarios y sus seudo periodistas contra mí por las denuncias hechas sobre la corrupción en esta institución no me harán renunciar a mis tareas en favor de la transparencia y el buen manejo de los dineros y recursos públicos.
No obstante que un alto funcionario de la Procuraduría me advirtió que tuviera cuidado con esta rosca porque disponen de muchos recursos para hacer daño, no me voy a amedrentar ni a salir corriendo.
En la Universidad del Quindío hay mucha corrupción y lo que quieren sus mandamases de ahora es tender una cortina de silencio para quedar en la impunidad.