22 e febrero de 2017.- El viernes 22 de febrero de 2002, el Alto Mando de la entonces Fuerza Armada Nacional manifestó su apoyo al presidente Hugo Chávez y repudió los anteriores pronunciamientos de facciones del cuerpo castrense que apoyaban el golpe de Estado que se concretó el 11 de abril de 2002.
"Queremos ratificarle nuestra lealtad al señor Presidente de la República, quien es nuestro Comandante en Jefe de la Fuerza Armada Nacional tal como aparece en nuestra Constitución", expresó el general en jefe del Ejército, Lucas Rincón Romero, quien fue el encargado de leer un pronunciamiento, en el Circulo Militar de Caracas.
"Hay personas que incitan a la rebelión, a un golpe de Estado, a la provocación. Yo me pregunto: ¿Será que esas personas han tenido un momento de reflexión y miden las consecuencias que esto puede traer?", inquirió Rincón.
Junto a Lucas Rincón estuvieron presentes los comandantes de la Guardia Nacional, Francisco Belisario Landis; de la Aviación, Régulo Anselmi; de la Armada, Jorge Sierralta; y el Jefe del Estado Mayor Conjunto, Bernabé Carrero Cubero.
Con el pronunciamiento, el Alto Mando militar se deslindó de la facción que contravenía la Constitución y que aun así, consumado el golpe en abril de 2002, fueron exculpados por el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) en agosto del mismo año, los generales de División del Ejercito, Efraín Vásquez Velásco, y Pedro Pereira Olivares; el vicealmirante de la Armada Nacional, Héctor Ramírez Pérez; y el contraalmirante de la Armada Nacional, Daniel Comisso Urdaneta.
El TSJ sentenció que no existían méritos para enjuiciar por rebelión militar a los cuatro oficiales, partícipes del golpe de Estado porque toda su acción estuvo "preñada de buenas intenciones", como indica la sentencia del magistrado ponente Franklin Arrieche.
