(VIDEO) J.V. Rangel: "EE UU continuará escalada contra políticas progresistas en América Latina"

El periodista José Vicente Rangel

El periodista José Vicente Rangel

Caracas, jul. 19 de 2009.- Con el transcurrir de los días se facilita el análisis de lo sucedido en Honduras. Por tanto, aprovecho este programa de hoy para hacer algunas consideraciones que se ubican en el actual contexto. Lo primero que quiero señalar es que definitivamente se comprueba que el golpe hondureño tiene las mismas características de los tradicionales golpes en la región. Participaron la oligarquía local, el poder mediático, los políticos corruptos, el narcotráfico, la Fuerza Armada desnacionalizada y, por supuesto, EE.UU. con la peculiaridad de que ahora este país lo hizo a través de algunos niveles. Esta comprobada la participación en la aventura del 28 de junio de la Embajada norteamericana en Tegucigalpa y de los efectivos militares norteamericanos de la base de Soto Cano en Palmerola. De ello no cabe la menor duda.

Pero hay más: la ambigüedad que se observó en el alto gobierno en Washington al producirse el golpe, ha evolucionado con el pasar de los días hacia ciertas definiciones que ensombrecen aún más el panorama. Me explico: si bien es cierto que el Presidente Obama mantiene la condena formal al derrocamiento de Zelaya y apoya su retorno, en otras áreas de la administración no se observa la misma actitud. Ejemplo, la entrevista que la Secretaria de Estado le diera a un canal identificado con el golpismo --tanto el 11 de Abril en Venezuela como el 28 de Junio en Honduras. En esa entrevista, la importante funcionaria expone lo que pudiéramos calificar de novísima doctrina sobre la democracia, consistente en que no importa el voto sino el gobierno. El desarrollo de este planteamiento significaría, en la práctica, la abolición del sufragio y por tanto, la aceptación de que cualquier vía es buena para arribar al gobierno, porque lo que cuenta es la gestión en el gobierno. ¡Absurdo total! en otras palabras, que el origen de un gobierno puede ser espurio, pero lo legitima su actuación. Ahora bien, ¿quién juzga esa actuación? seguramente que los EE.UU., con los mismos criterios que esta nación aplica en materias como narcotráfico, terrorismo y derechos humanos, es decir, de acuerdo a sus particulares intereses y conveniencia.

En síntesis, creo que el golpe en Honduras, la participación que tuvo la Secretaria de Defensa dirigida por un halcón como Billi Gates y el papel que cumplió el Comando Sur conectado a la base Soto Cano, así como el novedoso y letal mensaje que deslizó la señora Clinton, confirman la escalada contra las políticas progresistas de la región. Lo de Honduras fue un primer paso. Recomiendo estar alertas ante los próximos pasos que están por venir.



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