Segundo jerarca del catolicismo hondureño se reúne con la ultraderecha de Miami

La parlamentaria ultraderechista con el obispo auxiliar Pineda

La parlamentaria ultraderechista con el obispo auxiliar Pineda

16 de julio 2009. -Mientras su brazo derecho sigue realizando una gira en Estados Unidos a favor de la cúpula golpista que expulsó de Honduras al Presidente constitucional Manuel Zelaya, el arzobispo de Tegucigalpa, el cardenal Oscar Andrés Rodríguez Maradiaga, aseguró este martes 14 de julio en Roma que la Iglesia "no puede alinearse con ninguna parte" – distanciándose de los autores del golpe de estado..

En declaraciones a 'Radio Vaticano' reportadas por la agencia española Europa Press, el jefe máximo de la iglesia católica hondureña afirmó que lo único que busca es "la reconciliación, la paz y, sobre todo, el entendimiento a través del diálogo".

En las horas que siguieron el criminal golpe de estado. la Iglesia Católica de Honduras ha expresado su firme apoyo al cabecilla golpista Roberto Micheletti, y a los militares que comparten con él el poder, y pidió al presidente legitimo Zelaya que "reconsidere" su regreso porque "podría desatar un baño de sangre".

En un comunicado de la Conferencia Episcopal, leído por el cardenal Oscar Andrés Rodríguez, la Iglesia fue hasta “alertar” a la Organización de Estados Americanos (OEA) acerca de las “ilegalidades” supuestamente cometidas por el jefe de estado derrocado.

En sus declaraciones hechas en Roma, el cardenal Madariaga comentó, que "los partidos políticos pueden ser legítimos, pueden tener modos distintos de pensar, pero esto no justifica de ninguna de las maneras la violación de la ley". El arzobispo no resistió a la tentación de denunciar, en una referencia a Zelaya, que “quien la ha violado (la ley) el primero es la máxima autoridad".

Este domingo, el Papa Benedicto XVI manifestó su “preocupación” por la situación que atraviesa Honduras, lo que parece haber reorientado las reflexiones del jefe de la iglesia católica hondureña.

EN WASHINGTON, PINEDA SE REUNE CON ROS-LEHTINEN

Sin embargo, en Washington, el numero dos de la iglesia del país centroamericano, el obispo auxiliar Juan José Pineda, afirmaba, en declaraciones equivocas que parecen contradecir las de su superior jerárquico, que “apoya al gobierno interino” y “objeta la expulsión de Zelaya”.

Ese mismo martes, se reunió con la congresista de Florida, Ileana Ros-Lehtinen, vocera de la ultra derecha cubanoamericana en el Congreso.

Aunque reconoció que la expulsión del Presidente Zelaya del territorio hondureño es una violación de la Carta Magna por parte de los golpistas, opinó junto a Ros-Lehtinen que “con los días, cuando las aguas se apacigüen, se tendrá una mejor comprensión de lo sucedido y se reconocerá al gobierno interino”

El también Vicario General de Tegucigalpa exhibió a la congresista una carta firmada por otros prelados donde se declara que las acciones del 28 de junio fueron “constitucionalmente legales” y que el retorno del Presidente Zelaya a Honduras “pudiera causar mayores problemas sociales”.


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