Guadalajara, (10 de agosto de 2009) -
El combate al narcotráfico y la gripe porcina, junto con la crisis en
Honduras, dominaron este lunes la cumbre de Estados Unidos, México y
Canadá, y el estadounidense Barack Obama insistió en que el depuesto
presidente hondureño Manuel Zelaya "debe regresar al poder".
"Creemos que el presidente Zelaya fue retirado ilegalmente de su
puesto, que hubo un golpe de estado y que debe regresar" al poder del
que fue desalojado el 28 de junio pasado, dijo Obama en rueda de prensa
conjunta con los líderes Felipe Calderón (México) y Stephen Harper
(Canadá), al término de la cumbre que sesionó desde el domingo en la
ciudad mexicana de Guadalajara (oeste).
La situación en Honduras se transformó en uno de los temas
medulares que los tres gobernantes abordaron este lunes durante sus dos
sesiones de trabajo, junto a la violencia del narcotráfico --en
particular en la frontera de México con Estados Unidos-- la pandemia de
gripe porcina y la migración.